Parte sin título 21

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Pov Calle

Si no me equivoco eran las 10 de la noche, estuve hablando mucho con Camila, ella me contó que Lauren estaría aquí mañana y me preguntó si quería pasar el día con ellas... Planeamos todo y nos dispusimos a Bailar, bailamos mucho hasta que me cansé y fui a la barra por algo de beber, revise mi celular por milésima vez y no había señas de Poché, ojalá la esté pasando bien, ella merece todo lo bueno del mundo, terminé mi bebida y pensé en ir a pedir otra, pero una voz me interrumpió...

—Daniela Calle —dijo muy cerca de mi oído para que lo escuchara—

— ¿Mario? —Dije confundida—, ¿qué haces aquí?, ¿dónde está Poché?, ¿no estaba contigo?, ¿a qué viniste a Colombia? —el río de tantas preguntas que le hice—

—Cállate y actúa normal —yo lo miré confundida—, Poché esta por allá, ella no sabe que aquí estás tú —dijo sonriendo—, ¡sorpresa! —dijo emocionado—

Yo sonreí....

—En cuanto enciendan la luz de la derecha la podrás ver, para ese entonces yo estaré a su lado, esperando que llegues a presentarte, si te sirve de consuelo ella lleva ratos mirándote —dijo guiñándome el ojo y caminando hacia una esquina—

No lo podía creer, ella estaba aquí, yo la buscaba con la mirada, pero no daba con ella, pasaron unos minutos y encendieron las luces de casi todas las esquinas, y allí estaba ella y Mario a su lado, yo le sonreí y ella me devolvió la sonrisa. ¡Dios!, Yo estaba temblando, ella no dejaba de verme, ¿será que piensa que soy algo de Mario?, ¡no creo!, Decidí acercarme...

Ella no dejaba de verme y hubo un momento en el que ella quiso caminar en dirección opuesta a la mía, ¿qué pasa? ¿Por qué se va? Pensé, Mario tomo su mano y ella se quedó allí...

— ¿Hola, me recuerdas? —Dije Viendo a Poché y hablando con un tono de voz distinto—

Ella parecía pensarlo...

— ¿No, disculpa de donde te conozco?, no recuerdo conocerte —Pregunto Poché confundida—

Yo a este entonces estaba temblando...

—Si me conoces bonita, sí que lo haces —Hable, ya con mi tono de voz normal —

Ella me miro sorprendida...

— ¿Daniela? —Pregunto Poché con su voz entrecortada, y apretando la mano de Mario—

—Si mi amor, soy yo —Respondí a punto de soltar una lagrima—Me acerqué a Poche para tomarle su mano—

Ella no decía nada, se quedó muda observándome, parecía que no me estaba escuchando, la idea de que estuviera pasando lo que más temía se hizo presente, solté su mano ya que no obtuve respuesta y di dos pasos atrás, Mario miraba la escena confundido, al igual que yo...

¿Estaba pasando? Ella no dejaba de verme, pero no decía nada...

No Aguantaba más, ella simplemente no me imaginaba como soy...

Me di la vuelta buscando para donde salir, no soportaba estar más allí, di el primer paso y sentí que agarraban mi brazo, seguro era Mario...

Forcé para que me soltara, él no sabía lo que yo sentía y estar aquí me estaba haciendo sentir más mal de lo que se podía...

De repente sentí la mano me sostuvo de nuevo y me volteo.

Sentí que unos labios aplastaron los míos... observé quien era...

Y era Ella, Ella me estaba besando como si el mundo fuese a acabarse... tomo mis manos durante el beso y entrelazó nuestros dedos, nos separamos por falta de aire... y ella me sonrió divinamente...

— ¡Dios! Eres hermosa —dijo aun con la respiración agitada, pegando su frente a la mía—, ¿a dónde ibas? —pregunto tomándome de la cintura y viéndome a los ojos—, ¿querías escapar de mí? —dijo y las dos reímos, y ella me besó yo sonreí, por un momento creí que no le gusté—, tienes una sonrisa preciosa —dijo mirando mis labios y dándome un beso rápido mordiendo mi labio inferior al final—, agradezco que seas la única chica que me pareció atractiva y no dejaba de ver en este lugar —dijo riendo yo reí ya que Mario me había dicho antes que no dejaba de verme —, eso es una buena señal —añadió riendo—, wow, no te recordaba muda —dijo y es que la verdad no sabía que decir, simplemente no formulaba palabra—, Te Amo —dijo viéndome a los ojos y ahora fui yo quien la beso—

—Eres una tonta —dije bromeando golpeando su hombro—

—Vaya, si habla —dijo mirando a Mario él solo reía viéndonos—, pensé que cuando por fin volvió a ver, mi novia había quedado muda —dijo bromeando—

—Te Amo —dije suspirando y abrazándola—

—Yo más mi amor, yo más —dijo besándome—

Pov Poché

¿Sabes la satisfacción que se siente al saber que la persona por la que has babeado con solo verla por primera vez, es la que tú elegiste como el amor de tu vida? ¿Loco no?

Llevaba ratos observando a esa castaña, me gustaba mucho, tanto que sentí miedo ya que yo tenía novia, pero la vida conspiro a mi favor, y literal estuve babeando por mi propia novia, ¡Genial! Eso quiere decir que no me equivoqué al elegirle, mi corazón no me mentía, mi familia ni me mentía, Mario no me mentía al decirme que Calle era hermosa, lo comprobé, ella me estaba poniendo más loca de lo que ya estaba por ella, cuando se acercó a mi quise alejarme, no puedes quedarte a recibir a una chica tan atractiva cuando tienes a tu novia, yo me creía incapaz de parar algo si sucedía y Calle no se lo merecía, pero era Calle, aun no me lo creo.

Yo estaba metida en mis pensamientos observándola, ella parecía temblar, se alejó de mí, se volteó y quiso irse, ¿porque se iba?, ¿será que me estoy tardando mucho en reaccionar? La tome del brazo y ella se sacó, la volví a jalar y esta vez la bese, la besé sin que me diera permiso, me volvería loca si no lo hacía, estuvimos hablando un poco y decidimos bailar... yo no me lo podía creer que esa mujer a la que observé tanto era MI mujer....

—Ven bailemos esta —dijo ella jalándome a una esquina—

Al empezar bien la canción las luces se apagaron de nuevo, yo la tomaba de la cintura y ella rodeaba mi cuello con sus brazos...

Bailábamos muy a gusto....

—Te Amo —dijo en mi oído—, Te Amo mucho mi amor —mordido el lóbulo de mi oreja—

—Te amo más bonita —la besé mientras la empujaba hacía la pared—

Nos besamos mientras aun bailábamos, baje mis manos de su cintura a su trasero y ella suspiró...

—Vamos a mi casa —dijo en un hilo de voz—

Yo la seguía besando y baje a su cuello...

—Poché, Aquí no, vamos a mi casa, está a 5 minutos —dijo casi gimiendo mi nombre—

Yo seguía besándola y mordía su cuello, baje más mis besos y llegue a sus pechos, los tome y masaje uno de ellos...

Con la otra mano baje a su trasero y contorneé hasta sus piernas, acaricié de arriba hacia abajo, y ella estaba perdida en el placer, wow amaba esta imagen, en un movimiento no planeado mi mano llego hasta su entrepierna, ella gimió fuerte ,la besé para que si lo hacía otra vez no se escuchara mucho, volví a pasear mi mano sobre su centro y sí que está a mojada, ella suspiro clavando sus uñas en mi espalda, iba a quitar sus bragas, cuando la música para y las luces se volvieron a encender... nos paramos bien y yo la abracé para que nadie sospechara nada...

—No pensarás dejarme así, vamos a mi casa —dijo en mi oído y yo reí—

En serio estaba muy excitada, no pensaba que cualquier momento podían vernos, literal estaba decidida a hacerle el amor aquí mismo...

—A tu casa no —dije viéndola a los ojos—, allí están tus padres, vamos a un hotel —ella sonrió—

—Vamos —dijo jalándome a la salida—

La noche apenas comenzaba...

Recuerdanos | CachéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora