Pov Calle
Fue un día de locos, conocí a ese tal Johan que lo único que sabía de él es que había llevado a casa a Poché el día del accidente, pero ya luego hablare con ella eso.
Estamos en el apartamento y Poché pidió domicilio, había que recogerlo abajo ya que no había pasado, me ofrecí a hacerlo y supe cuál era el problema.
La chica que se estaba mudando a nuestro lado estaba Llevando sus cosas una por una, ella sola.
Bajé y exactamente las cajas estaban tapando la salida, cuando por encima de ella vi que estaba el repartidor. Le pague y al el pasar la comida yo no alcanzaba muy bien, de pronto sentí un cuerpo pegarse al mío y agarrar la bandeja, cuando reaccioné me retrocedí causando la persona empujara cajas y las botara.
Me disculpe y voltee a ver, la chica que se estaba mudando está riendo.
—Perdón —dije viendo todo regado—
—descuida —dijo sonriendo—, soy Matu —dijo extendiendo su mano—
Yo repetí su acción y me presenté.
Ella al soltar mi mano, rozó sus dedos en mi palma de manera afectuosa.
Me sentí incomoda.
Ayudé a recoger las cosas y me volví a disculpar.
—Bien fue un gusto —dije sonriendo—
—El gusto es mío, espero ser buena vecina —dijo guiñándome el ojo—
Caminamos, ella llevaba una caja más, y llegó a su apartamento.
—No conozco nada aquí, ojalá puedas mostrarme la ciudad —dijo ella—
—No creo, no pasamos mucho tiempo en casa —dije y me percaté de que Poché estaba en la puerta de nuestro departamento—
—Pensé que vivías aquí —dijo con decepción—
—Si vivo aquí —dije riendo—, pero trabajo en las afueras, bueno me voy, me esperan con la comida —ella asintió y saludo a Poché, Poché no disimuló para nada su desagrado—
—Chao espero verte de nuevo —dijo ella sonriendo—
Me di la vuelta y llegué hasta donde Poché, ella me jalo y me besó muy intensamente, ella me agarro el trasero y yo gemí para ella.
Me di cuenta antes, pero ella me lo confirmo, estaba celosa, ella dice que la chica había visto mi trasero cuando caminaba y no lo dudo, esta chica prácticamente se me había insinuado. Preferiría no decirle más a Poché, si ella supiera que la chica estuvo pegada a mi cuerpo disque ayudándome, no me levantaría en días...
Vale nos encontró en otro de nuestros momentos caóticamente calientes y no faltaban sus comentarios. Entramos y todos empezaron a molestar junto a Vale hasta que Poché amenazo con correrlos, ellos sabían que no lo haría, pero decidieron no seguir molestando.
El timbre volvió a sonar y Poché fue a abrir, era la novia de Mario, ella se la pasaba ocupada y siempre que planeábamos verla nos pasaba algo.
—Hola preciosas —dijo ella saludando a todas—
Les presentamos a las chicas y a Johan y ella cuando escucho el nombre de este creo que notó quien hablaba y miro sorprendida a Mario.
Termino de saludar y ahora sí, empezamos a comer. Entre risas y bromas la pasamos muy bien. Todos empezaban a irse, Solo quedaban Camila y Lauren.
Platicamos un momento más y ahora se habían ido.
Entramos al cuarto a desmaquillarnos y a cambiarnos.
Ya estábamos acurrucadas cuando escuche el timbre.
—Quien será —dije a Poché quien también tenía cara confundida—
—Voy —dijo ella levantándose—
—Voy contigo —dije siguiéndola—
Ella abrió la puerta sin encender las luces y era, ¿la vecina?
—Disculpa —dijo Poché cuando vio a la chica—
—Perdón si molesto —dijo la chica y Poché asintió afirmando que molestaba y yo le pegué en el hombro sin que la chica viera—
—Que necesitas —dije amablemente—
—Es que aún no jalo todas mis cosas y estaba preparando un té y me fije que no tengo azúcar, podrías regalarme —dijo sonriendo—
—No tenemos —dijo Poché de inmediato—
Y era en serio, nosotras no comprábamos nada aún, si la chica entrara supiera que nuestro apartamento esta igual que el de ella.
—Sí, apenas nos mudamos y pues estamos igual que tu —dije riendo—
—Ah bueno, gracias —dijo apenada—
Poché cerró la puerta de inmediato.
—Gorda puedes esforzarte un poquito y disimular que te cae mal —dije riendo—
—No —dijo sin importancia—
Yo reí y fuimos al cuarto de nuevo.
No tardamos en dormirnos y yo desperté a media noche, gracias a que se escuchaban golpes. Me levanté por un vaso con agua y encendí la luz.
De inmediato se escuchó el timbre.
Sabía que era la vecina así que fui a despertar a Poché para que saliera conmigo.
Abrimos...
—Perdón —dijo la chica—, vi la luz encendida y aproveché para que me presten un cuchillo —dijo ella sonriendo—
—Discúlpanos, pero aún tenemos todo en cajas —dije sonriendo—
—Bueno —dijo la chica—, que bueno que no las desperté para nada.
—Agradece que aún no dormíamos —dijo Poché y la chica la miro confundida—
Y me di cuenta, Poché se había tapado con la cobija como si estuviera desnuda, la chica la observo de arriba hacia abajo y su rostro cambio.
—Lo siento —dijo con indiferencia en su voz—
—Bien no te preocupes, Calle tenía sed y pues vino a la sala, gracias a eso te escuchamos —dijo normal—
—Buenas noches —dijo la chica nerviosa—
—Las tenemos, que sean buenas para ti —dijo Poché cerrando la puerta—
Poché me jalo en un beso brusco y termino de cerrar la puerta empujándome en contra de ella, yo gemí por el acto y que estoy segura la chica había escuchado.
Me separé de ella y me reí fuerte, ella aun sujetaba la cobija.
—Ya deja la actuación —dije riendo y tirando de la cobija—
—Viste su cara —dijo riendo—
—Deja de ser celosa Poché —dije riendo—
—Solo quiero que sepa que eres mía Calle —dijo caminando hacia la cama—
La seguí y la abracé.
—Con que yo lo sepa suficiente —dije dándole un beso en su mejilla—
—Te amo
—Te amo más Celosa —dije acurrucándome a ella—
Ojalá esa chica no traiga problemas a nuestras vidas —pensé.
