Pov Poché
Todo había salido perfecto, ella lloraba de la emoción, nuestra familia y amigos gritaban muy fuerte de emocionados por esto....
—Mañana será su lanzamiento —dije sonriendo—, mañana todos se darán cuenta cuanto te amo...
—Eres demasiado —dijo besándome—
—Tu eres demasiado —dije al terminar el beso con una mordida y ella sonrió divinamente—
—Esperen llegar a casa —dijo la voz de Mario detrás de mí
Corrí a abrazarlo, lo extrañaba demasiado, él había llegado ayer y de tanto que tenía que hacer no había podido verlo...
—No sabes cuánto deseaba volver a abrazarte mi a...
Él se quedó callado y me soltó...
—Puedo decirle mi amor o la señorita se pondrá celosa —dijo burlándose de Calle—
—Mario —dije empujándolo—
—Puedes —dijo Calle riendo—
—Te extrañaba demasiado mi amor —volvió a decir el abrazándome muy fuerte—
—Yo a ti —dije susurrando—
Platicábamos con todos y después de muchas bromas, chistes, copas de más decidimos retirarnos del restaurante.
Mario dijo que comería con nosotras mañana para que viéramos a su novia, que estaría llegando por la madrugada...
Llegamos a nuestro apartamento y Calle tenía una gran sonrisa en su rostro que parecía que no se borraría nunca, y yo deseaba que asiera fuera.
Entramos a nuestro cuarto y nos quitamos los tacones, nos pusimos a desmaquillarnos y yo terminé primero...
Me recosté en la cama, y aun no me creía que haya salido perfecto.
Miraba a Calle muy concentrada en lo que estaba y me pare para abrazarla por la cintura. Ella me miro por el espejo y me sonrío, bese su hombro y ella cerro sus ojos.
— ¿Dormimos ya? —Pregunte poniendo mi quijada en su hombro—
—No quiero dormir —dijo ella volteándose y pegándose más a mí—
—Bebiste mucho —dije riendo—, ¿eso te quito el sueño? —Dije recordando como ella había tomado varias copas—
—No es que no tenga sueño —dijo susurrando muy cerca de mis labios—, sino que las ganas de estar contigo son más fuertes —dijo empujándome para que me acostara en la cama—, quiero sentirte —dijo besando mi cuello—, quiero que me toques, quiero que me hagas el amor, quiero estar contigo mi amor —decía entre besos—, quiero venirme por ti Amor —dijo mordiéndome y yo gemí fuertemente—
Cambié de posiciones y me subí en ella mientras la besaba muy intensamente, mordía sus labios y mis manos acariciaban de más, yo moría por hacerla mía, y como ella había hablado me hizo perder la cordura y no dude en emprender mi misión.
Fui quitando cada prenda de su cuerpo y ella me miraba y hacia lo mismo con mi ropa, sus ojos estaban oscuros, demostraban placer, deseo, amor... baje mis besos desde su cuello por todo su cuerpo, ella se retorcía cada vez que mordía por este, llegue a su centro y aspiré el olor que emanaba, ella se apretaba los pechos y mordía su labio, baje a su centro, hacia masajes en su clítoris, ella gemía, gemía muy alto y eso a mí me ponía más caliente.
—Amoooor por favor —rogaba por que la hiciera mía de una vez por todas—
— ¿Por favor que hermosa? —Dije lamiendo sus pechos y haciendo presión en su centro—
—Hazme tuya ya por favor —dijo entrecortado—
Mordí su pezón y ella clavo sus uñas en mi espalda...
—No me quiero correr así —dijo pérdida en el placer—
—Como lo quieres hacer entonces —dije besando su cuello—
—Quiero venirme sintiendo tus dedos dentro de mí —dijo directamente—
Sonreí y me dispuse a hacer lo que mi novia pedía.
La puse de espaldas a mí y pegué su cabeza a la cama, dejando su trasero en alto. Lo acaricié y ella gimió en cuanto lo apreté.
Me baje a su centro y pase mi lengua por este, ella se movió buscando sentir más y quiso levantar su cabeza de donde la había puesto y sonreí...
—Quédate quieta —dije presionando su cabeza en la cama—
Baje y con mi lengua estimulaba su centro, Ella se movía buscando sentirme más. Pegue su trasero en mi centro, buscando a rozarnos entre sí...
—Poché por favor —dijo ella en un gemido—
Me puse de lado a ella y la bese, mientras la besaba lleve mis dedos a su centro y metí dos sin avisar, ella mordió mi labio al sentirme y eso me encanto demasiado, ella gemía y yo le daba besos que apenas correspondía, decidí meter otro dedo lo había hecho antes pero no los metía por completo para no lastimarla, pero esta vez quería hacerlo...
—Uno más Amor —dije avisando—
Metí el otro y muy lentamente metía y sacaba los tres, ella gemía y en sus labios se formaba una perfecta o.
Metí por completo los 3 dedos de golpe y ella gimió muy alta, decidí no moverme para no hacerle daño y la besé.
Ella se movió de manera que mis dedos entraban y salían de ella.
—Amoooor —decía ella gimiendo—, Poché —dijo muy alto—
Sabía que ella estaba por llegar al orgasmo, ayude a sus movimientos metía y sacaba más rápido.
—Amor estoy...
Ella no lograba formular palabra, ella gemía muy alta y yo amaba verla como la tenía.
Ella había llegado al orgasmo y sus movimientos eran más débiles, decidí seguir yo con ellos y alargar el placer. Sentí mis dedos ser apretados y dejé de moverlos para no lastimarla...
—Te amo —dijo ella aun con la respiración afectada—
Ella estaba en un hermoso estado, sus mejillas ruborizadas, su cabello revuelto, su cuerpo sudado, amo esta imagen, podría verla todos los días de mi vida sin aburrirme.
Saque mis dedos de su interior e iba a probar su sabor, pero ella me jalo la mano, la acerco a su boca y chupo viéndome muy provocativamente. Su mirada indicaba lujuria...
—Dios, te amo —dije en cuanto dejo de chupar mis dedos—
Ella se mordió el labio viendo mis pechos y sin decir nada se lanzó a besarme.
