Abby ®️

11 | Cambio de planes

Llegué a casa y toda la casa estaba en silencio, Noah escuchó la cerradura y se acercó a la puerta rápidamente.

— Mamá me ha dicho que no va a venir a comer, y no hay nada preparado ¿te apetece salir a comer?

— Está bien, espera que deje la maleta en el cuarto — dije subiendo las escaleras.

Tire la maleta en la cama y bajé enseguida, porque estaba bastante hambrienta y Noah me esperaba subido en el coche.

— ¿Dónde vamos? — pregunté mientras cerraba la puerta del coche.

— A un sitio que hace tiempo que no vamos.

Cuando estábamos llegando, reconocí el lugar fácilmente, era donde mi padre nos traía a comer siempre que acababa el curso para felicitarnos por las notas, suspiré recordándolo. Nos sentamos y pedimos.

— Oye, Will me ha dicho que qué nos parece si mañana salimos con las nuevas para enseñarle la ciudad.

— Por mi bien, no tengo nada que hacer — dije encogiéndome de hombros.

— Díselo a tus amigos también si quieres — dijo Noah.

— Pero, ¿ellas ya lo saben o hay que decírselo? — pregunté confusa.

— Bueno verás, Will me ha dicho que sería mejor que se lo dijeras tú, así no resultaría tan extraño — dijo rascándose la nuca.

— Ah, que hacéis planes sin contar con que las personas puedan, perfecto, no se porque me sorprende viniendo de ustedes — dije rodando los ojos.

Comimos y al terminar volvimos a casa, el haber estado en ese lugar había hecho una mezcla de sentimientos dentro de mí, dulces y amargos. Mi madre ya se encontraba en casa, la saludé con un beso y subí a mi cuarto.

La tarde transcurrió y al terminar de cenar me acosté, no había hecho gran cosa pero me encontraba bastante cansada.

Noté como me dormía y como la noche se me había hecho muy corta. Me incorpore lentamente en mi cama y baje a desayunar. Cuando terminé salí camino al instituto, pero sentía una presión en el pecho, me giré y vi como alguien se acercaba a mí corriendo con un cuchillo en la mano. Me quedé pálida y no sabía qué hacer, justo antes de que esa persona me tocara, me levanté acalorada y sobresaltada de la cama en mitad de la noche. Había sido un sueño, repetía en mi cabeza una y otra vez para relajarme, mientras intentaba seguir durmiendo.

A la mañana siguiente me levanté desconcertada, el sueño que había tenido sentía que me quería decir algo, recuerdo que la última vez que tuve un sueño así, había sido días antes de todo lo que había pasado con Bonnie y durante todo el día estuve analizándolo.

Llegué a clases y me encontré con Shelby.

— Hola — le saludé mientras me sentaba al lado suya — Noah me ha dicho que si vamos hoy a enseñarle la ciudad a las nuevas.

— Ah pues genial, tengo muchos lugares que seguro que les va a gustar — dijo emocionada.

— Cuando lleguen se lo propongo — dije mirando la puerta a ver si llegaban.

— Espera, ¿aún no lo saben? — preguntó achinando los ojos.

— No, por qué básicamente a Will le daba vergüenza preguntárselo — le resumí.

Vi llegar a las nuevas, pero no venían solas les acompañaban Nash y Blake, que sinceramente no sé qué hacían aquí si no era su clase, pero no le di importancia.

— Hola chicas - las saludé —¿tenéis algún plan para hoy?

— Pues verás, ahora mismo nos han dicho Blake y Nash que si salíamos con ellos para enseñarnos algunos sitios — explicó Helen.