15 | Segundas oportunidades

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Un nuevo día comenzó y me levanté tranquila, pero a la vez nerviosa. Hoy veía otra vez esos ojos que me traían loca, y sentía los mismos nervios de cuando quedamos para nuestra primera cita.

La tarde transcurrió lentamente pero al fin llegó la hora, salí de mi casa diez minutos antes y cogí rumbo al lugar donde habíamos quedado.

Allí estaba él, sentado en el columpio esperándome, tan nervioso como yo, o eso esperaba.

— Hola — dije llegando a donde se situaba él.

—Hola preciosa — dijo sonriendo y haciendo que mis mejillas cogieran un color rojizo.

Me senté en el otro columpio, buscando las palabras para empezar a hablar.

—Ryan — dije captando su atención — han pasado dos semanas desde la última vez que hablamos... y sinceramente durante todo este tiempo he estado echando de menos nuestros momentos, nuestros piques, tu risa, a tí — dije mirándole fijamente a los ojos.

Una sonrisa inundó su rostro y a continuación se mojó los labios para empezar a hablar.

— No sabes cuánto tiempo llevo esperando este momento Abby — dijo con una felicidad plena — Entonces... ¿eso quiere decir que volvemos? — terminó poniéndose de pie.

— Claro que sí tonto — dije levantándome del columpio para buscarlo.

Me acerqué a él, lo agarré suavemente por el cuello, el hizo lo mismo en mi cintura atrayendome a él y plantó sus cálidos labios sobre los míos haciendo que se me olvidara el resto del mundo.

Ambos estuvimos hablando en el parque sobre el tiempo que habíamos pasado separados y bueno, se puede decir que todo volvió a la normalidad.

(...)

Una nueva semana comenzó y ya todo el mundo hablaba sobre la fiesta de Halloween. Se rumoreaban varias casas para celebrar, pero todos sabiamos que se acabaría celebrando en la de Blake, como anunció la semana pasada.

Esa semana también se llevaría a cabo la exposición y varios trabajos que habían hecho algunos compañeros, seleccionados por la profesora. Nos reunirían a todos en el salón de actos y escucharíamos los trabajos que habían preparado.

Llegué a clase y no dude en contarle a Shelby que Ryan y yo habíamos vuelto. Cuando terminé vi como una sonrisa se dibujaba en el rostro de mi amiga.

— Si eres feliz con él, yo soy feliz — dijo sonriendo suavemente — Sabes que siempre te apoyaré en las decisiones que tomes, y si te equivocas pues estaré aquí para ayudarte.

La abracé fuertemente haciendo que el profesor se percatara y me hiciera gestos para que me sentara correctamente.

Admiraba a mi amiga, y me reconfortaba saber que la tenía a mi lado, en los momentos difíciles y en los mejores también.

Salimos a la cafetería y después de varios días sin venir, apareció Jess. Todos estaban sentados en una mesa y Shelby y yo lo hicimos cuando llegamos.

— ¿Ya estás bien? Helen me dijo que estabas enferma —  pregunté a Jess.

— Sí ya estoy mejor, me había comido algo que me sentó mal, y estuve varios días sin separarme del váter — respondió un poco avergonzada y haciendo que todos nos riéramos.

— Oye, ¿y ustedes dos que? — añadió Asher refiriéndose a Ryan y a mí.

— Pues.. que ya estamos bien otra vez — abracé a Ryan con una sonrisa de oreja a oreja, a lo que éste me imitó.

Abby ®️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora