• Kingdom •/ NoMin

𝑭𝒖𝒔𝒊𝒐𝒏

Ambas almas se veían, temiendo la una por la otra, una de ellas por ser descubierto, y la otra por ser lastimado por una criatura enorme.

Na no sabía por qué, pero tenía la necesidad de acercarse, acercarse y tocar a ese ser frente a él.

En cuanto a Jeno, tenía una lucha interna, él no quería estar ahí pero esa bestia dentro de él se mantenía firme frente a ese pequeño chico.

De repente, en las escamas de la bestia se empezaron a ver constantes líneas eléctricas, recorriendo su cuerpo llegando hasta la punta de su nariz, creando una luz ante los ojos de Jaemin, una luz tentadora, una luz que le decía que debía tocar a la bestia.

Así que Na hipnotizado por la luz, empezó a acercar su mano, el brillo azul se reflejaba en sus ojos y Lee solo lo observaba, sintiéndose extraño pero tan hipnotizado como Jaemin, viendo como el chico se acercaba sin temor alguno ante sus ojos, como si se hubiesen encontrado antes, como si se conocieran desde hace mucho tiempo.

Cuando la mano de Na por fin estuvo a solo unos centímetros de la nariz de esa bestia empezó a sentir temor, haciendo que cerrara sus ojos, pues la fuerte mirada de aquel ser era muy pesada para Jaemin, de repente, el chico sintió una calidez en su mano, una calidez tan familiar que le asustaba, no sabía porqué se sentía así, pero le gustaba.

Abrió los ojos, encontrándose con esa bestia ahora vulnerable ante él, de la misma forma en que estaba Jaemin anteriormente, con los ojos cerrados.

Lo que Na no esperaba, es que de un momento a otro la bestia ante sus ojos desapareciera de su vista, sus movimientos habían sido tan rápidos que Jaemin no se había dado cuenta cuando algo paso sumamente rápido debajo de él, entre sus piernas.

Sin embargo, si sintió cuando sus pies dejaron de tocar el suelo y caía hacía atrás, sacándolo del transe tratando de tomar algo enfrente de el que evitarse que se cayera.

Ahora Na Jaemin iba en el lomo de ese ser extraño ser buscando de dónde agarrarse.

La angustia comenzó a hacerse presente cuando vió que la criatura empezaba a ondear su cuerpo y daba vueltas alrededor de su casa mientras subía. Jaemin ahora se abrazaba a la enorme bestia, sintiendo un temor creciente y la preocupación de estar pasando por esa situación.

"¡Por favor bájame!"

Jeno escuchaba y sentía el temor de Jaemin, pero ni siquiera él podía controlar su propio cuerpo, sentía una energía y emoción creciendo dentro de él, a pesar de que Jeno había empezado a gustarle molestar a Na, sabía que está situación era muy espantosa, incluso para él, así que ondeando su cuerpo hizo saltar a Jaemin en el aire, haciendo que un fuerte grito por parte del nombrado se hiciese presente, Jeno solo quería tenerlo más cerca, sobre todo para que Jaemin pudiese tomarlo de su cabellera más cerca de su cabeza.

Así que cuando Na por fin tomó a la criatura de su cabellera notó que ésta ahora ondeaba en dirección a las nubes, un ligero temor se apoderó de Jaemin, cuando vió que la criatura estaba apunto de atravesar las nubes, se apego al cuerpo de la criatura y cerro los ojos, esperando algún impacto, uno que nunca llegó.

Lo único que logró sentir fue una brisa de aire fresco que le hizo estremecer, que le hizo ver al frente, encontrándose con la mejor escena de su vida.

El cielo estaba lleno de estrellas, era algo mágico, los ojos de Na no dejaban de brillar ante tal escena, al ver hacia abajo notó que la mitad del cuerpo de la criatura iba entre las nubes, así que sus piernas también iban de esa forma.

De pronto el temor se había ido y lo único que Jaemin deseaba era que ese momento no terminará, como si estuviera cayendo en el sueño, se recostó en la bestia mientras veía como la luna les perseguía desde una pequeña área que las nubes no lograban esconder.