Capítulo 30

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Cuando se pierde a un ser querido nos planteamos muchas preguntas y vamos entendiendo los ciclos de la vida, inevitablemente aceptamos que las cosas ocurren independientemente de lo que nosotros deseábamos o esperábamos.

Pienso que lo natural es nacer y morir pero cuando a un ser querido le llega la hora, sea como fuere, parecemos no estar preparados, como si fuera algo que nunca pudiera ocurrir, como si estuviera ajeno a nuestra condición de humanos.

Cuando escuché a mi madre decir que él había muerto me partió el corazón, a pesar de que no éramos muy cercanos ni nos llevábamos muy bien, lo quería, habíamos crecido juntos y en las vacaciones familiares siempre estaba ahí.

Caí al suelo y sentí como la vista se me nublaba, solo pensar en el dañó que me está causando a mí y a las personas que quiero. Tomé un puñado de arena y la embarré en mi pantalón mientras las lágrimas caían por doquier.

Vid se sentó a mi lado y me abrazó fuerte y yo me aferré a él, de cierto modo me sentía aliviada de estar con él, sé que me ayudara a prepararme y actuar fuerte para mis padres, mi madrina, y a todos mis seres queridos.

—Lo siento mucho—me dijo Vid chocando su frente con la mía, yo tenía la vista nublada por las lágrimas pero pude notar que sus ojos estaban aguados

—No lo puedo creer—dije con la voz entrecortada, sentía un nudo en la garganta que no me dejaba respirar

—Pero... Qué le pasó—preguntó—Quién murió

Lo miré devastada y dije el nombre de la persona que había perdido

De camino a casa en el autobús, estaba poniéndome la camisa del uniforme y tratando de arreglarme lo más que pude, aunque no me importaba que no fuera hora de salida de la escuela donde se supone que debería de estar ahora, que tuviese el cabello y la ropa húmeda y adema que Vid estuviera conmigo. Probablemente a nadie en mi casa le importará ni tiene cabeza para eso.

Cada segundo que avanzaba el autobús mi corazón latíamuy fuerte, cada segundo se me hacía más difícil controlar las lágrimas, estabaaterrada de llegar a mi casa y tener que afrontar la realidad.

En realidad pienso que la muerte no existe, sino únicamente en un plano físico y ello me provoca una pérdida del miedo a vivir la vida, sin tapujos, aprovechando cada respiración hasta que por suerte, porque Dios quiera o porque simplemente tenga que ser así, muera.

Por ello no hay que preocuparse. No me cabe duda que tras la muerte, para las grandes personas están reservados los grandes lugares. Ese gran lugar es un regalo y ese regalo es permanecer en los corazones de los que te han querido. Eso significa ser eterno y la eternidad es inmortal.

Al llegar a la esquina de mi casa me detuve a llorar.

—Tienes que ser fuerte amor—me susurró Vid dándome un fuerte abrazo—Yo estaré contigo en todo momento, no te dejaré sola

—Prométemelo

—No lo voy a prometer, te lo voy a demostrar

Respiré profundo y al entrar a la casa escuché los gritos desde la puerta, solté la mano de Vid cuando vi a mi madre y corrí abrazarla, estaba devastada al igual que yo.

Me separé de ella y camine hacia donde madrina,me arrodillé a su lado, estaba sentada en el sofá con la vista perdida, teníael cabello alborotado, los ojos hinchados y rojos con un vaso en la mano,temblaban sus pies, la toque y estaba fría.

—Cómo murió Carlos —pregunté y cuando mencione su nombre sentí un dolor en mi corazón, pero no mas que el que mi madrina reflejaba en sus ojos—No entiendo...—a penas me salían las palabras

Todo por el miedo a perderteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora