𝐿𝑖𝑙𝑦 𝐿𝑢𝑛𝑎 𝑃𝑜𝑡𝑡𝑒𝑟 | 𝐵𝑎𝑐𝑘 𝑡𝑜 𝐻𝑜𝑔𝑤𝑎𝑟𝑡𝑠

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Capítulo 4

¿La capa de invisibilidad?

Luego de la selección, pasado el banquete en donde Louis comió el doble de lo que hubiesen tragado Rose y Lily, los prefectos se llevaron a los de primer año a las salas comunes de sus casas, Konny Lanford y Peter Klavinski ambos prefectos de Gryffindor guiaron a los de primer año a la sala común. Lily y los demás también se levantaron de sus asientos, sus cosas ya debían estar en sus habitaciones.

Al salir del gran salón, se toparon con los del primer año de Slytherin y la curiosidad condujo a Lily a querer saber quienes eran los nuevos prefectos de la casa de aquel año, y por un segundo no quiso haberlo sabido, porque en cuanto vio una cabellera albina a Lily se le heló la sangre.

—No puede ser... —se quejo esta llamando la atención de sus amigos.

—¿Qué? —preguntó Rose buscando lo que Lily miraba.

Entonces comenzó a reír.

—¡También es prefecto! —exclamó Lily teniendo cuidado que no la escuche—. ¡No!, ¿es que la desgracia me persigue?

Roxane también se arrimó entre ellas para ver hacia los de primer año.

—Prefecto y capitán de quidditch... que gran año, ¿verdad Lily?

Roxane amaba provocar a Lily y mucho más cuando se trataba de él.

Lily bufó mientras veía como los de primer año guiados por Scorpius Malfoy se dirigían escaleras abajo donde se encontraban las mazmorras.

—Listo, este no va a ser mi año... —se volvió a quejar.

Las chicas se rieron y la siguieron. Mas tarde se cruzaron con los de primer año de Ravenclaw, quienes los siguieron por las escaleras ya que su torre se encontraba cerca de la de Gryffindor solo que la suya se encontraba del lado oeste. Lily y los demás continuaron por las escaleras que cambiaban de lugar hasta llegar a un pasillo que los guiaba al retrato de la dama gorda, allí una señora pasada de peso pero radiante dormía sobre su hombro.

Harry Evenlang, un chico de su mismo año quien también se conducía como todos a la sala común tuvo que despertarla con algunos aplausos hasta que esta se despabiló. Abrió sus ojos y saltó de la sorpresa, al parecer su intención no había sido dormirse, rápidamente se arregló el cabello, su corona y su vestido blanco. Lucy y Rose rieron entre los demás.

La dama gorda las fulminó con la mirada y algo molesta carraspeó y por fin dijo.

—¿Contraseña? —intentó verse lo mas perfecta posible.

—Caput draconis —le dijo Matthew mientras esta lo miraba a él.

—Muy bien —el retrató se abrió y los dejó pasar a todos.

Pasando por un pequeño pasadizo se abrieron paso a la sala común donde estudiantes de sexto y séptimo ya habían ocupado los sillones y mesas, no tenían intenciones de irse a dormir todavía a pesar de que al día siguiente temprano por la mañana empezarían las clases. Lily por otra parte, se desmayaba del cansancio, con el estomago lleno prefirió pasar de la pequeña fiesta que estaban montando y se dirigió a las escaleras para ir directo a la cama.

—¡Lily!, ¿no te quedas? —era la voz de James detrás de ella—. ¡Mira lo que conseguimos con Fred!

Lily al borde del principio de la escalera se encontró con Fred y muchas cervezas de mantequilla las cuales repartían a todos los que fueran de sexto y séptimo.