𝐿𝑖𝑙𝑦 𝐿𝑢𝑛𝑎 𝑃𝑜𝑡𝑡𝑒𝑟 | 𝐵𝑎𝑐𝑘 𝑡𝑜 𝐻𝑜𝑔𝑤𝑎𝑟𝑡𝑠

𝟘𝟟

Capítulo 7

Insomnio

Aquella mañana Lily se despertó de un sueño bastante vergonzoso, o por lo menos así lo sintió ella en cuanto despertó en su cama rodeada de sus amigas que todavía seguían durmiendo y el sol parecía todavía no volver a salir entre los arboles del bosque prohibido, las estrellas aún reinaban en el oscuro cielo de la madrugada. No quiso ni ver la hora en el reloj de su muñeca, sabía que todavía era muy temprano para levantarse, pero después de aquel incomodo sueño, no dejaba de dar vueltas sin poder pegar un ojo.

En su cabeza no podía quitar aquella alucinación. Había revivido lo sucedido dentro de aquella bola de cristal solo que esta vez Scorpius y ella discutían como siempre, y al final ambos admitían que deseaban lo que habían visto en aquella proyección, se abrazaban, olvidaban sus rivalidades y se besaban, un beso tan vivido que a Lily le asusto que no hubiese sido 100% real. Incluso se llevó sus dedos hacía sus labios verificando el recuerdo de los de Scorpius besando los suyos.

Por un momento cerró los ojos con fuerza intentando olvidarlo todo, pero no pudo, llevó su almohada hacia su cara y la apretó, pero no pudo, intentó concentrarse en los ronquidos de Lucy, pero tampoco pudo. Nada la podía tranquilizar y hacer a un lado el vacío que sentía en el estomago, como si sintiera unas horribles mariposas en el mismo que no la dejaban en paz.

Pero a ella no le gustaba Malfoy, mucho menos estaba enamorada. Entonces, ¿por qué se sentía como se sentía?, ¿por qué soñaba cosas como esas?, ¿por qué no podía seguir su día como cualquier otro?

Se le ocurrió que tal vez era un trauma de haber visto algo tan vergonzoso en aquella bola de cristal frente a él y que tal vez Scorpius estuviese pasando por lo mismo que ella en aquel momento. Tal vez solo era una etapa humillante que duraría unos pocos días, por lo menos eso esperaba ella.

Entonces por fin algo pudo sacarla por unos segundos de sus pensamientos.

—Mmm... No Roger... —Roxane reía entre sueños—. No, no puedo dejar... ¡la bludger!

Lily saltó de su cama y corrió hacia la de Roxane quien claramente estaba hablando dormida. Ante aquel grito, Lily llegó a taparle la boca para que no despertara ni a Lucy ni a Rose ni a Julia Parlon. Roxane no abrió los ojos pero se calló en cuanto Lily tapó su boca, no se movió tampoco pero la muchacha sabía que estaba viva porque la respiración de su nariz le calentaba la palma de su mano.

—¿Qué pasó? —suspiró Rose reincorporándose de su almohada viendo como Lily había corrido la cortina de la cama de Roxane.

Rose todavía no podía abrir del todo los ojos, se le pegaban por la lagaña y el sueño que intentaba controlar.

—Nada, Roxane hablando dormida...

Rose no hizo mas preguntas y volvió a correr su cortina para volverse a dormir. Lily se fijó en Roxane quien parecía no tener nuevas intenciones por abrir la boca, así que la muchacha también volvió a su cama e intentó conciliar el sueño una vez mas. Lo logró, pero no duró mucho porque volvió a soñar algo que volvió a despabilarla.

Horas mas tarde se encontraban todos desayunando en el gran salón. Todos comían como si no lo hubiesen hecho en siglos, a diferencia de Lily quien no podía probar bocado, sumida en sus pensamientos, no le apetecían los huevos, ni las tostadas ni nada que llevase la palabra comida como suplemento.

—Vamos Lily, anímate... hoy es nuestro primer entrenamiento —James le dio un empujoncito amistoso, pero Lily estaba perdida en la mesa de Slytherin.

Scorpius la observaba desde su asiento, Jody King y Taisius Nott se encontraban a su lado charlando con los demás alumnos de la casa. Sin embargo, él tampoco parecía tener interés en sus amigos como Lily, sus ojos grises no se separaban de los de ella como si le encantase incomodarla, y la muchacha estaba segura de que aquella era la razón de su sonrisa.