La fotógrafa y el futbolista.

Capítulo 4-

Después  de que mi amigo se fuese a dormir, me meto en la cama y no paro de darle vueltas a la cabeza, pero una vez que consigo dormir, la cosa tampoco mejora: sueño con Toni, y me asusta, en primer lugar él esta casado y tiene un hijo, y con lo bueno que esta seguro que ella es un pivonazo y yo a su lado no soy nada del otro mundo, además que es imposible que pase algo entre nosotros; y por otro lado, tengo novio, las cosas no están bien y no tengo noticias de él, pero seguimos juntos.

Así que analizando todo de forma fría, lo mejor es quitarme las tonterías de la cabeza y plantearme la relación con mi novio, y creo que lo mejor es  finalizarla.

Hoy hay entrenamiento a las 11:00 de la mañana, y tenemos que estar un rato antes allí, a pesar de la mala noche, salgo de la cama con ganas y me arreglo para este día.

Así que me meto en el baño, me lavo la cara, los dientes y me maquillo un poco para tapar la cara de cansancio. Vuelvo a la habitación y miro que ponerme, al final opto por una camiseta de tirantes con un estampado de palmeras, unos shorts verdes y unas Vans.

Una vez lista, aprovechando que aún faltan 15 minutos para la hora que he  quedado con mis compañeros para desayunar y luego irnos a trabajar, miro mis mensajes del móvil y como siempre, tengo mensajes de mis padres, Guille y mis amigas hablando de tonterías, pero sigo sin saber nada de mi "novio".

Una vez que les contesto, cojo mis cosas y bajo al restaurante.

Estamos ya en el lugar de entrenamiento, hay bastantes periodistas a parte de nosotros, yo estoy muy nerviosa cosa que mi amigo Fer  nota y me mira como diciendo que me calme.

Toni.

Después de un largo viaje de Alemania a Brasil y aguantar los ronquidos de varios de mis compañeros, llegamos al aeropuerto, hay prensa, como es normal y de pronto veo escondida tras una cámara a una chica, de bellos ojos azules y pelo cobrizo, nota que la estoy mirando y en un momento dado cruzamos miradas, es una chica muy bella.

Durante el trayecto al hotel no me puedo quitar la mirada de esa belleza de la cabeza, pero esta mal, se supone que estoy casado y con un hijo, pero no puedo evitar pensar en ella. Estoy muy  distraído, Götze, que esta a mi lado en el autobús que nos  lleva al hotel, me habla pero me tiene que decir las cosas dos veces para que me entere.

Llegamos al hotel, cenamos y yo me meto en mi habitación junto a Mesut, que es mi compañero.

Estoy bastante cansado, pero aún así hablo un poco con mi compañero y contesto al móvil, me habla Jessica, mi mujer, pero me siento mal hablando con ella, desde que he visto a la fotógrafa no me la quito de la cabeza, soy imbécil, veo una tontería preocuparme por una chica que ni conozco, además quiero a mi mujer y tengo un niño pequeño. Al rato de hablar con ella me voy a dormir y me despido de mi amigo, que también esta hablando con su novia.

A la mañana siguiente, me despierto a las 10, me visto y bajo a desayunar, la mayoría ya están en la cafetería, pero aún falta gente. Cuando todos estamos, nos vamos al bus, que hoy es el primer entrenamiento aquí.

Mientras vamos llegando, caigo en la cuenta de que habrá prensa, y directamente me vienen a la mente esos preciosos ojos azules.

Al llegar, efectivamente veo que hay prensa, y la busco, pero no logró verla.

Empezamos a entrenar, estiramientos, correr, y ahora voy a tirar unas faltas, justo en ese momento la veo, esta al lado de la portería, va preciosa, y ahora que puedo verla bien, tiene un cuerpo muy bonito.

-Ei, tira -me grita Neuer, sacándome de mis pensamientos.

-Si, em, ya voy.-digo y tiro la falta.

Pero desafortunadamente, no entra en la portería, si no que va a la cabeza de la fotógrafa.

Voy corriendo hacia ella, a su lado están dos chicos y una chica, pero al ver que no se ha desmayado le pregunto a ella ignorando a la gente de su alrededor.

-Perdón, ¿estas bien? -le pregunto.

Ella me mira con cara de no saber que le decía, claro, le he hablado alemán, voy a  intentar con el inglés.

-Perdón, ¿estas bien? -le repito en inglés.

-Si, tranquilo -me responda en el mismo idioma, pero con voz de que esta dolorida.

-De verdad lo siento mucho...

-No pasa nada, de verdad, sigue con el entrenamiento y esta vez apunta bien -dice riendo.

-Vale, pero antes me gustaría saber tu nombre.

-Sandra, y venga vuelve, que te va a caer reprimenda por parte de tu entrenador. -me responde con una sonrisa.

-Hasta luego Sandra -me despido y le dedico una sonrisa.

Vuelvo, y veo que todas las miradas de mis compañeros están en mi, pronto no faltan las bromas acerca de mi puntería, pero la verdad es que me da lo mismo, por mi mala puntería he conseguido el nombre de la preciosa fotógrafa.

Al acabar el entrenamiento, la busco, pero veo que no está y me dirijo hacia el vestuario algo decaído. Pero no entiendo la razón por la que me siento así... ¿Es por Sandra? ¿Porque no la he visto? Es una estupidez, si apenas la conozco...

-Pero te gustaría conocerla... -me reprocha la voz de mi conciencia.

Pues claro que quiero, pero me quito la idea de la cabeza, no puedo ni debo estar con esa preciosa chica.

-Estas muy distraído -me dice Müller de vuelta al hotel.

-Estoy cansado -le miento.

-A mi no me mientes, te he visto mirar a esa chica.

-¿Que chica? -le respondo haciéndome el tonto.

-A la que casi matas de un pelotazo -bromea.

-Sólo me he preocupado.

-Se sincero conmigo. -insiste.

-Sabes que estoy casado.

-Eso no influye.

-Si influye, yo quiero a Jessica.

-La puedes querer, pero hace bastante que no te veo enamorado.-me responde.

-No digas más tonterías.

Y dejamos el tema, ya que llegamos al hotel.

Y ahora me planteo algo, ¿tendrá razón mi amigo y ya no estoy enamorado?

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Espero que os guste el capítulo, ¿que creéis que pasará?
Pido que voten y comenten que os parece.
Besos!