Capítulo 11-

10.4K 403 5
                                    

Sandra:

Me acabo de despertar, rayos de sol que entran por la ventana me iluminan la cara, y yo soy feliz.

Reviso el móvil, y como todos los días tengo mensajes de mis amigas del alma (siguen insistiendo con que me ligue a algún brasileño/futbolista), y creo que por fin las voy a callar cuando les cuente todo lo que pasó ayer, y les hago un resumen de lo sucedido.

Se quedan alucinadas, pero así ahora ya pueden hablar de otra cosa.

Como hoy no tengo nada que hacer, y como veo que es pronto, me vuelvo a acomodar para volver a dormir, pero oigo sonidos en la puerta, voy a abrir y es Marina.

-Hola Sandra. -saluda.

-Hola, ¿pasas?

-Si claro.

Pasa y se sienta en el mini sofá de mi habitación.

-Y bueno, ¿a que es debido esta visita?

-A pues que venía a pedirte si quieres venir a desayunar conmigo, pero fuera del hotel.

-Vale, ¿pero vamos las dos solas?

No quiero estar también con Mateo, así que si me dice que va, me invento algo y no voy.

-Si, sólo tu y yo.

-Vale, pues me visto y vamos.

Me arreglo en 10 minutos (me pongo unos shorts rosa claro, una camiseta azul marino, y unas sandalias).

-¿Vamos? -pregunto a Marina.

-Vamos.

Del camino del hotel a la cafetería, hablamos un poco de todo pero de nada en concreto, se me hace muy agradable hablar con ella.

Me lleva a una cafetería que esta por la zona del paseo marítimo y nos sentamos en una mesa con unas buenas vistas a la playa.

Al momento llega una camarera y pedimos.

-Sandra, necesito consejo.

¿Consejo? ¿Sobre qué?

-Si, ¿que pasa?

-Pues Mateo, que siempre lleva el móvil escondido, cuando le llaman siempre se aparta, algunos días se va y no me dice dónde...

Pobre Marina, obviamente, este tío se está tirando a todas las que puede y más, y tiene engañada a mi amiga; por supuesto no voy a decirle lo que ha intentado este tío conmigo durante estos días, pero le diré que se la esta pegando.

-Pues no se que decirte, aunque es raro... lo más seguro es que este con otras.

-Yo ya lo había pensado... pero me da cosa decírselo y que luego sea una equivocación.

En ese instante llega la camarera y nos deja los que hemos pedido.

-Marina, yo que tu investigaría un poco, lo más seguro es que te esté engañando con otra.

-Bueno, haber si me puedo quedar a dormir esta noche con él y le miro el móvil.

-Vale, espero que estemos equivocadas. -miento, en verdad quiero que abra los ojos y vea como es "su novio".

-Yo también lo espero Sandra.

Dejamos el tema, y hablamos de otras cosas mientras nos terminamos el desayuno, cuando veo como se aproxima Toni, cosa que me extraña mucho.

Cuando creo que va acercarse a mi, veo como se sienta en una mesa donde esta una chica morena de más o menos nuestra edad que esta con un niño pequeño.

Supongo que es su esposa, pero no entiendo que hace quedando con ella si se supone que lo habían dejado, y me molesto, pero entonces veo como la besa y es cuando me enfado de verdad. Me entran ganas de llorar, levantarme y girarle la cara.

Pero a fin de cuentas yo no soy nada, así que le digo a Marina si nos podemos ir, ella acepta y nos vamos de allí. Yo me pongo las gafas de sol, para ocultar las lágrimas que amenazan con salir.

-¿Que te pasa? -pregunta Marina, no sabe porque me he querido ir tan rápido y mucho menos mi cambio de humor.

-No me encuentro bien -miento, no quiero explicar que un maldito me ha mentido y ahora lloro porque me gusta.

-¿Vamos a un médico? -se preocupa.

-No, no, mejor vamos al hotel.

-Vale.

Esta vez vamos calladas, y en cuanto llegamos, me encierro en mi cuarto y suelto todas las lágrimas que he ido reteniendo por el camino.

*******
Holis, bueno aquí os dejo el capítulo. También quiero deciros lo mismo que ayer, he creado un grupo de Whatsapp, quien quiera meterse, pasarme el número por privado. Un beso! Y no os olvidéis de comentar y votar.

La fotógrafa y el futbolista.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora