Break Off | KTH

𝖲 𝖾 𝗉 𝗍

No, no me sentía mal por haberlo hecho. Al menos eso pensaba pero cuando regrese a mi mesa como si nada hubiera pasado mientras arreglaba mi cabello, sentí que mi corazón se hizo pequeño cuando observe a Youngmi comiendo alejada de todos.

Lo siento tanto, aunque eso no arreglaría nada.

Llegue a pensar que Taehyung iría con ella y le haría caso por primera vez en lo que iba de la noche, pero no fue así. Él se dirigió hacia dos hombres donde le ofrecieron una copa y que con mucho gusto la tomó. ¿Nadie sabía que ella era su esposa? Porque al parecer nadie preguntaba por ella o le hacía caso.

—¿Donde estabas? Desapareciste por mucho rato—Mi hermano frunció el ceño cuando me senté a su lado. Por alguna razón se dio cuenta que hice algo con mi jefe pues me miró de arriba a abajo para después negar con su cabeza. Se le veía serio. —No me respondas, se perfectamente lo que hiciste.

—Estuvo increíble aunque fue algo rápido—Me encogí de hombros, Jungkook bufo mirándome mal. Lo único que él odiaba de mi era que me metiera con hombres casados o con novia, solo había pasado dos veces. La primera vez me arrepentí demasiado, pero esta no.

Jungkook se quedó callado y empezó a comer el platillo que nos habían dejado hace unos segundos, lo imité mirando de vez en cuando al señor Kim que conversaba con hombres, en lo que llevábamos de la noche se la había pasado así. Me levante de mi asiento y busque a Youngmi con la mirada pero no estaba por ningún lado. Le avisé a mi hermano que iría a buscarla y este solo asintió empezando de nuevo una conversación con el primo de Taehyung.

La vi salir del baño y después dar la vuelta donde se encontraba una pequeña sala. Sin duda caminé hacia ella algo rápido, se que era una hipócrita por todo esto pero en verdad sentía culpa en el fondo de mi corazón pero en lo más fondo, solo era como un veinte por ciento de eso.

—Hola—Le sonreí, ella me devolvió el gesto.

—¿Te estás divirtiendo?—Oh si, no sabes cuánto.

—Claro, ¿porque no estás con el señor Kim?—De verdad que era una chismosa pero necesitaba saberlo, ella se veía algo decaída.

—Oh pues, siempre en este tipo de eventos suelo estar muy sola porque él se ocupa. Taehyung nunca me ha presentado como su esposa, solo hay rumores de que tiene un matrimonio pero no saben que soy yo. Él dice que prefiere dejarlo así para no tener problemas y tenga una vida normal, prefiero así—Se encogió de hombros. En verdad ella era demasiado inocente para darse cuenta que Kim no la presentaba precisamente por eso.

Que te hicieran creer eso era muy terrible, tal vez en el futuro ella se dará cuenta que Kim no la quiere al cien por ciento. Si fuera así, estaría orgulloso y la presentaría frente a todo el mundo como la señora Kim, esposa del dueño de Samsung. ¿A quien no le encantaría que algún día un hombre nos presentara de esa manera? Porque a mi si, lo deseaba.

Y siempre conseguía lo que quería, de una forma u otra.

—Tiene razón Youngmi, ¿como te acercaste a él?—Me acomode mejor en el sofá a un lado de ella. Tome mi copa y bebo un poco, la chica solo veía mis movimientos. Estaba segura que nunca había probado el alcohol.

—Mi padre me lo presentó en una cena, desde que lo vi entrar mis hormonas se activaron. Él siempre ha sido tan guapo y ese día no era la excepción, por alguna razón que aún desconozco; mis padres me exigían que saliera con Taehyung y ese tipo de cosas. Pero era muy tímida para al menos decirle "Hola", nunca había dado mi primer beso hasta que lo conocí. Él me lleva por muchos años pero eso no importó, en verdad estoy afortunada de tenerlo conmigo, es genial—Podía observar un brillo en sus ojos al hablar del señor Kim, estaba perdidamente enamorada del hombre. Pero eso no sería impedimento para meterme en sus sábanas.

—Que linda historia, les deseo lo mejor. Se ven tan lindos juntos que soy su fan número uno—Sabía que mi voz había salido un poco falsa, como mis palabras. Por supuesto que no quería verles juntos.

—¡Me caes bien, Hana! ¿Tienes novio?

—No, pero estoy intentado conquistar a un hombre—Reí algo burlona por mis palabras, ese hombre era mi jefe.

—-Suerte, eres guapa y se que lo conseguirás muy fácil—-Me dio un abrazo corto, odiaba que lo hicieran.

Le ofrecí una copa a la chica infantil frente a mí pero la rechazó, tal y como me lo imaginaba. Solo acepto un vaso de Coca Cola que se acabó en dos minutos para después meter una paleta a su boca que no tenía idea de donde las sacaba. Pero era mucho azúcar para mi.

—No deberías hacer eso, contiene mucha azúcar y podría causarte mal si te acostumbras—Torcí mi boca generando una mueca. Ella realizó una seña diciéndome que no importaba. Al menos trate de ayudarla con su salud.

El señor Kim se hizo presente frente a nosotras y sin dudarlo dos veces me sonrió grandemente. Mordí mi labio viéndolo desde mi asiento, él aún seguía de pie y era una vista demasiado buena por ser tan alto. Besó la mejilla de Youngmi a lo cual coloqué mis ojos en blanco sin que me vieran los esposos. Él se colocó en medio de nosotras, una chica a cada lado, vaya.

—¿Que hacen? ¿Ya son amigas?—Taehyung "sin querer" dejo caer su mano a mi pierna derecha. Me moví un poco, nadie debería ver eso.

—Por supuesto, señor Kim. Su esposa es genial.—Youngmi me sonrió emocionada pero la ignore.

—-¿Todo va bien? ¿Estas divirtiéndote?—La chica le pregunto mientras jugaba con su cabello. Ver aquella escena me entraron los celos, lo admito.

—Si, esta noche será inolvidable. Ha pasado algo que me encanto demasiado, espero que pronto se repita.

¡No puede ser! Kim en verdad me aventó una indirecta demasiado directa, Youngmi lo miro confundida, sabía que ella no entendería así que le seguiría el jueguito.

—¿Ah si? ¿Porque, tete?—Ese apodo por alguna razón me causaba demasiada risa pero ahora no podía reírme, tenía que mantener mi papel.

—Hice tratos con un hombre importante, él en verdad supo cómo hacerlo.—Bebí de un solo trago mi copa y volteé a verlo, su mirada estaba hacía el frente mientras se mordía el labio y mantenía una ceja alzada. ¡Mi debilidad!

—Me alegra señor Kim, si me necesita, sabe que estoy disponible a la hora que usted guste.—Acaricie su brazo como si fuera "lo más normal". Si Youngmi fuera diferente estaba segura que ya estuviera reclamando el porque le tocó el brazo a su hombre.

Pero era tan inocente que no se daba cuenta que estaba loca por el señor Kim y que en un dos por tres, estaría solo en mis brazos.

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¡Me he dado cuenta que les gusta mucho esta historia!  De verdad gracias por sus votos y comentarios

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Las quiero 💓