Cerré la puerta del auto en cuanto me encontraba en el asiento, el cigarrillo que adornaba mis labios tintados de rojo empezaba a terminarse. Solté un bufido y lo tomé para lanzarlo a la carretera. Pero antes de encender el auto, una figura alta con el cabello rubio dorado saliendo de un restaurante con un bebé en sus brazos me había llamado la atención. Fruncí el ceño tratando de reconocer a esa persona porque de verdad parecía que mi mente me hacía creer que de algún lugar la conocía, esta se encontraba de espaldas.El hombre de traje negro perfectamente ajustado a su cuerpo, se dio la vuelta. Y fue en ese momento cuando lo pude reconocer, Kim Taehyung con mi hijo en sus brazos. Solté una risita burlándome de la situación, por lo que veo, la demanda le dio igual. Pensaba que no me daría cuenta que visitaba al bebé por la tardes sin mi permiso, ¿que pensaría mi abogado sobre esto? ¿Y el juez? Oh claro, con una sola llamada puedo destruirlo. Y es justamente lo que haré. Mi bolso estaba en el asiento copiloto, me incliné un poco más para buscar mi teléfono móvil y hacer aquella llamada que le dolería a Taehyung. Como lo siento cariño, te lo dejé en claro la última vez.
—Buenas tardes, señor Choi—Saludé, mi mirada aún seguía atravesando el cristal del auto mirando como Taehyung sonreía y parecía que todo estaba muy bien. De un momento a otro, su mujer salió del auto con otro bebé en sus manos. Ya había dado a luz, alce ambas cejas mirando esa familia tan hermosa. ¿No lo creen? Porque yo no. Era mentira, no es hermosa.
—Señorita Jeon, ¿que sucede?—Su voz fue tan pacifica que parecía guardar la calma para no reprenderme. Probablemente ahora mismo esté en una gran playa o yo que se, disfrutando del dinero que recibió por parte mía.
—El señor Kim Taehyung acaba de incumplir las reglas de la demanda, ahora mismo está con mi hijo sin mi autorización, lo tomé por sorpresa en un restaurante—Expliqué, del otro lado de la línea solo se escuchaba el movimiento de algunos objetos que desconocía y después un suspiro.
—De acuerdo, entiendo. No se preocupe, ahora mismo empezaré con los trámites de la demanda. Solo le aviso que esto causará que el señor Kim vaya a prisión.
Chasquee la lengua para después sonreír de lado, aquellos pareja de casados ya había entrado en el restaurante. Que descaro de Kim Taehyung pasearse con mi hijo por los lugares de Seúl como si nada sucediera.
—No importa, hágalo—Declaré. Colgué la llamada y lance el teléfono móvil al asiento copiloto. Encendí el vehículo y empecé a conducir hacía el departamento de Park. Oh como deseaba ver el rostro de Taehyung al ver la gran sorpresa que acabo de mandarle.
¿Como de un momento a otro termine de esta manera? Quiero decir, en ningún momento planeé el tener un hijo con Kim. Ni mucho menos desmandarlo de esta manera. Todo era una locura que apenas empezaba. Detuve el auto justo enfrente del departamento de Jimin, tomé mi bolso colocándolo en mi ante brazo y empezando mi caminar al mismo tiempo que sonaban mis zapatos de tacón en por toda esa calle, el área siempre se encontraba despejada y demasiado tranquila. Lo cual me agradaba.
—Hey, Jimin—Sonreí en cuanto abrió la puerta, este hombre realmente era guapo y atractivo. Solo portaba pantalones deportivos, fuera de eso, su torso completamente desnudo.
—Pasa—Me tomó de la cintura adentrándome al lugar, hace tan solo días había terminado con su novia de la cual pensaban que se iban a casar. Que ridiculez. El hogar de Jimin era precioso, algo pequeño pero muy elegante, lo mejor de todo es que lo había recorrido y estrenado.
—Demande a Taehyung—Solté, coloque mi bolso arriba del sofá mientras él estaba por entrar a la cocina, segundos después lo seguí. Tomó asiento en un taburete alto en color negro, me coloque detrás de él acariciando por completo toda su espalda con movimientos suaves.
ESTÁS LEYENDO
Break Off | KTH
Aksiyon"En cualquier momento Kim Taehyung tendría que estar entre mis brazos". Su jefe era demasiado atractivo para ella y miles de mujeres. Jeon Hana haría todo lo posible para que Kim Taehyung cayera en sus brazos. Y lo más importante: Causar el divorci...