SHE (saida)

23.

Sana POV

Salí del territorio escolar con mi nueva bici que me había comprado en una tienda de segunda mano.
Pedaleé tan rápido que ni si quiera sentía el esfuerzo que estaba haciendo mi cuerpo. Mi frecuencia cardiaca aumentaba, mi respiración era agitada. Lo había logrado, conseguir a la chica de mis sueños.
Quería gritar a los cuatro vientos lo emocionada, lo feliz y enamorada que estaba. Me sentía tan cursi pero bueno, esto no pasa todos los días.

Llegué a mi casa y dejé mi bicicleta en el patio frontal. Me acosté en el césped y miré al cielo para bajar esos fuertes latidos que traía por lo rápido que había pedaleado y por la culpa de Dahyun.
Admiré la luz del amanecer y los colores hermosos que se aparecían poco a poco.
-Sana, psst.
Jimin, mi vecino. Llegó a interrumpir mi momento de paz, mi día tan alegre.
Me levanté rápidamente del suelo y me puse en guardia. Uno nunca sabe.
-¿Me vas a golpear?
Jimin decía sorprendido al verme posar como una idiota.
-Sí, si te acercas.
Dije intentando fingir que le soltaría un golpe de defensa personal... já.
-Bien. Yo solo quería decirte que eres mi mejor amiga, quiero que todo esto termine. No soporto estar lejos de ti.
Mencionó, yo intentaba no soltarme a llorar.
-¿Crees que te voy a perdonar si le mentiste a Dahyun sobre mí? Mentiroso.
Afirmé.
-¿Yo? ¡Jamás! La mentirosa es ella.
El chico quiso hacerse la víctima, yo lo conozco mejor que nadie. Es un manipulador.
Suspiré profundamente.
-¿En serio te gusta Dahyun o solo lo haces por molestarme?
Hice una pregunta concreta que ocasionó que Jimin se quedara en silencio por unos segundos.
-Vete al demonio, Sana.
Dijo para después darse la vuelta y caminar hacia su casa.
-¡No contestaste mi pregunta!
Grité para que lo hiciera.
Jimin se detuvo y volvió a mirarme, aunque fuera de lejos.
Después, me sacó el dedo de en medio... afirmó que lo hacía por molestarme, no por Dahyun.
Idiota.

Entré a mi casa y recibí un mensaje de Dubu.

Dahyun: Hey, se acerca el nacional de fútbol y te voy a extrañar tanto. Descansa, te quiero.
8:35 p.m.

Olvidaba que el equipo viajará a otra ciudad durante una semana. ¡Ahh! La voy a extrañar tanto y todavía, estos mensajes me derriten el alma.