3.- ¿Son todos así en Texas?

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Ian reparte la planificación del evento y nos organiza con eficacia. Megan va a ayudar a cocina y a mi me asignan el pequeño pero bien surtido bar de la zona VIP.

Cuando digo zona VIP no os penséis que hablo de grandes lujos pomposos, para nada. Es simplemente una zona aparte dónde relajarse entre ponencia y firmas y sesiones de fotos. Hay algunos sofás, varias mesas que en breve se llenarán con el catering y el pequeño bar que pronto hago mío. Hago repaso de las botellas para ver que puedo preparar y que no, mientras observo de reojo el movimiento de la zona reservada del Olympia West.

La productora de Supernatural ha traído el reparto principal al completo, a juzgar por el folleto que Ian nos ha dado, pero parece una agencia independiente y con no demasiado presupuesto. Algo que encaja con la línea general de la serie.

Mientras corto rodajas de limón escucho como se abren las puertas de acceso general del recinto y como este se empieza a llenar de pisadas y voces excitadas.

Echo un vistazo al folleto con el horario y veo que primero toca firmas del reparto, diferentes charlas de los productores de la serie, sesión de fotos y una maratón de los últimos capítulos de la temporada 7 antes del gran panel en el que estrenarán y comentarán en primicia el primer episodio de la temporada 8.

—Oye... ¿esos no son...?

Megan trae una bandeja con canapés y la deja sobre la barra del bar. Levanto la vista de mi tarea de cortar limones y veo a Misha Collins y Jensen Ackles charlando con dos hombres, supongo que de la productora.

—El puto Dean Winchester y el ángel Castiel.— sonrío.

El grupo está charlando a lo suyo lo suficientemente cerca como para observarles disimuladamente pero no tanto como para que se den cuenta y se incomoden. Y vaya, joder, hostia puta.

Jensen es espectacularmente guapo. De esos guapos que deberían estar prohibidos. Guapo como un póster de un anuncio de Calvin Klein. Guapo perfecto de sonrisa blanca, pelo rubio ceniza y ojos verdosos. Estaba claro tras verle en la serie que estaba buenísimo, pero en persona es otro nivel. Nivel de que las bragas se te ponen a bailar la conga.

—Ay que ver cómo los crían en Texas.— suelta Megan con un suspiro y a mi se me escapa una sonrisa de alelada total.

—La verdad es que...

No puedo acabar la frase porque se une al grupo Jared, todo sonrisas y gestos risueños, con sus casi dos metros de altura. Casi me corto un dedo con el cuchillo que tengo aún en la mano.

Lo primero en lo que me fijo es que ambos actores visten muy parecido a sus dos personajes. Cómodos y desenfadados, con tejanos gastados, deportivas, camisetas sueltas. Muy Winchester todo.

Lo segundo que llama mi atención es que están relajados y parecen estar de charla sin más, ajenos a las cientos de personas que están a apenas a una pared de distancia de ellos, deseando sacarse una foto con los famosos hermanos cazadores de monstruos. De hecho, simplemente parecen unos amigos treintañeros que bromean y se ponen al día, ajenos a todo.

Lo tercero que no puedo evitar mirar es el paquete de Jared. Para mi desgracia, el actor lleva tejanos rectos que no dejan entrever ni tamaño ni la forma ni...

—¿Son todos así en Texas?— miro suplicante a Megan, que sigue repasando a Jensen sin parpadear.— Porque si son todos como estos dos mañana pido el visado, me mudo a Austin y abrazo la poligamia.

—Bueno, basta. Ponte bragas de repuesto y a trabajar.

—Las bragas en la cabeza me voy a poner. Venga, pírate.

Mi mejor amiga se va riendo por lo bajo, no sin antes dedicarme una mirada de advertencia.

Ya, ya... nada de ligar.

Menuda mierda de promesa.

+++

Sirvo bebidas y algunas copas a quién se acerca a pedírmelas, pero en general la acción no está pasando en la zona VIP, sino en el recinto público.

En mi hora de descanso, que no coincide con la de Megan, decido que es hora de disfrutar un poco del evento. Consulto el horario y veo que la sesión de fotos con fans está en marcha desde hace un rato.

Paseo por la exposición sin prestar mucha atención, a excepción de esa belleza sobre ruedas que es el Impala, que retiene mi mirada unos minutos más.

Luego los pasos me llevan de manera irremediable a la sesión de fotos, donde una cola brutal espera su turno. Exhibo mi pase de trabajadora para colarme entre bambalinas y observar como se desarrolla todo.

La presencia de una camarera pasa totalmente desapercibida y yo aprovecho para situarme tras el personal de producción, alejada de los luminosos focos que apuntan a los tres actores.

Y a pesar de que Jared, Jensen y Misha deben llevar como una hora ya sonriendo y posando con desconocidas que les besan y les abrazan e incluso lloran, ninguno de los tres parece haber perdido el buen humor. Entre fan y fan ríen y bromean entre ellos como viejos amigos. Eso me gusta, me hace sentirme cómoda en su complicidad.

En un momento dado, Jensen bromea con el pelo largo de Jared y le acerca un pequeño ventilador, que enseguida le mueve la cabellera castaña como si estuviera en un videoclip de Beyoncé. Ni corto ni perezoso, Jared baila de forma ridícula luciendo su pelo y poniendo mohínes estúpidos que hacen desternillar de risa a Jensen y Misha.

Esa simple gilipollez, que es muy parecida a las miles de gilipolleces que hacemos Megan y yo a diario, hace que me muera aún más de ganas de follar con él.

Creo que Megan se va a enfadar mucho conmigo por romper la primera promesa.

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Hi, Winchester [Supernatural]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora