Spotify - HyunJin

13

S.O

Mis manos temblaban, en realidad todo mi cuerpo lo hacía, estábamos esperando para subir al avión y yo ya estaba casi que me vomitaba encima. Tenía un malestar y angustia que acabarían conmigo en cualquier momento.

Observe a Sebastián quien no paraba de teclear en su celular. Creo que suponer que esta hablando con alguno del club para explicar porqué nos estábamos yendo.
Lucas estaba que no entendía nada pero miraba desinteresado su celular.

Yo en lo único que podía pensar era en mi papá. Se me hacia un nudo en la garganta de tan solo hacerlo.

Él estaba enfermo... hace tiempo, en una de sus consultas al medico, le habían dicho que tenía una enfermedad terminal pero que no sabrían decirnos cuanto tiempo le quedaba. Dijeron que podían ser meses y con suerte años. Pero también dijeron que podía mejorar pero algo me dice que eso no será posible ahora.

Antes de subir intenté llamar a Emma pero no me respondió, creo que ahora si ya podía alarmarme.

En el avión intenté dormir un poco pero no pude, miles de recuerdos y secuencias se repetían en mi cabeza. Definitivamente ya estaba asustada.

*flashback*

Decidí ir personalmente con mi familia para darles la noticia sobre mi repentino llamado para un equipo de natación. Solo les había dicho que iría a almorzar con ellos.

Toqué la puerta esperando que alguien me abra, la sonrisa de mi madre fue lo primero que vi. Me alegra saber que entonces estaba de buen humor.

Baek corrió apenas me vio y literalmente se me trepó encima, no se si tengo sobrino o un mono.¿Como hace para ser tan ágil? Maldito niño, solo esperen a que crezca y se queje de dolores en la rodilla o espalda, es cuestión de tiempo.

Ya tenían la mesa preparada así que estábamos listos para empezar a comer. Fui a buscar a mi papá ya que era el único que faltaba en la mesa.
Entre a su despacho sin tocar y lo vi sentado en su escritorio escribiendo.

Sam:- ¡Hola! - llame rápidamente su atención y guardo lo que estaba escribiendo.

Papá:- ¿Acaso vuelas o te teletransportas?

Sam:- No lo sabrás nunca. - sonreí. - Ya vamos a comer.

Fuimos al comedor y nos sentamos en nuestras sillas, como en toda familia cada uno tenia su lugar.
Comimos charlando un poco sobre el trabajo de Emma y nos reíamos de los intentos fallidos de Baek por usar los palillos como nosotros.
Él tenia unos especiales tipo pinza pero aun asi intentaba usar los que nosotros usábamos.

Emma:- Por cierto, ¿por qué viniste a almorzar con nosotros?

Mamá:- ¡Emma! - la retó.

Sam:- ¿Acaso no puedo venir?

Emma:- Es que nunca vienes por tu cuenta, si no te invitamos ni te apareces.

Baek:- Omma tiene razón. - dijo aún masticando .

Sam:- No es cierto... - los cuatro me miraron con una ceja levantada. ¿Como lo hacen? - Bien, hay algo que tengo que decirles.

Baek:- Redoblen tambores. - uso las palillos como si fueran los de la batería, este es mi sobrino.

Mamá:- Deja de enseñarle cosas raras Sam. - reí.

Sam:- En algo tiene que parecerse a mi.

Papá:- Bueno bueno, no nos desviemos del tema.

Sam:- Cierto. - entrelace mis manos por encima de la mesa. - Vuelvo a América.

Emma:- ¿Eso es? Te vas de vacaciones. - le tiré un pedazo de pan.

Sam:- Déjame terminar. - se calló. - Tengo una oferta de natación. - sonreí. - Así que me iré, si todo va bien competiré.

Mamá:- ¿Quien? ¿Donde?

Sam:- Eso es lo único que se.

Emma:- Capaz te van a secuestrar y vos ahí re feliz.

Baek:- ¡No seas mala con mi tía!

Sam:- Eso... no rompas mi corazón...

Papá:- Yo pienso que es genial.  - tenía una enorme sonrisa. - Veras que te irá genial.

Sam:- Pero no quiero dejarlos.

Papá:- Estaremos bien, esta es tu oportunidad. Ni se te ocurra desperdiciarla.

Baek:- ¡Llevame! - hizo un mini berrinche.

Sam:- No aceptan niños. - mentí. - Pero te traeré regalos, ¿trato?

Baek:- Trato. - sonrió.

Mamá:- ¡Felicidades entonces!

Emma:- Solo no desaparezcas otra vez. - sonreí.

Sam:- Okey, no lo haré~

*fin del flashback*

Papá estaba muy feliz, aun lo recuerdo. Pese a que había actuado ya que el sabia todo al respecto y se había contactado con Sebastián. Pero hizo un gran trabajo pretendiendo que no sabía nada.

La última vez que lo vi fue a los dos días de irme, él lloraba de felicidad y no podía evitar abrazarme y darme consejos. Este es mi verdadero padre, pese a que no fue uno bueno en el pasado pudo cambiar y se había convertido en un gran hombre.

Solo espero que ese no haya sido nuestro último momento juntos. No quiero que sea nuestra despedida, no es justo.

Horas y horas de viaje en las que no pude si quiera dormir un poco.
Ya habíamos llegado y tuvimos la suerte de que nuestro bolsos fueron los primeros en salir.

Corrimos a buscar un taxi, me tocó hacer todo a mi ya que podía hablar coreano.
Pero no sabia donde ir, no podíamos ir al hospital con los bolsos y tampoco se donde es el hospital.

Lo primero que se me ocurrió fue el departamento, le indiqué al taxista la dirección y le envié un mensaje a Samuel avisándole que estaría por ahí y otro para Emma preguntando la dirección del hospital.

Por suerte fue todo rápido y ya estábamos en casita, abrí la puerta y les dije que entraran y dejaran sus bolsos en la primera habitación, que era la mía. No era importante ahora.

Samuel:- ¡Realmente estas aqui! - gritó al salir del baño.

Sam:- Lamento venir de la nada y no es momento de tus escenas de bienvenida.

Le comenté muy por encima lo que había pasado con mi papá.
Emma ya me había respondido y Samuel me dijo que lo esperara para ir juntos. Pero no puedo esperar ahora.

Sebastián, Lucas y yo volvimos a correr para salir del edificio y volver a tomar un taxi.
Todo pasó tan rápido que no se como aun no vomitaba je.

Aguanta papá, solo un poco más.