Sesenta y tres.

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Había muchas cosas pasando por la mente de Percy en ese momento, como que Naruto había logrado cortar el árbol de un solo ataque, y había hecho algo con Guy para mantenerlo con vida pues ella podía sentir que su aura de vida quedaba igual, estaba algo débil pero parecía que no iba a desaparecer por ahora. Otra cosa que pasaba por su mente era lo graciosa que se veía su mano izquierda sin un dedo, como en algunas caricaturas donde solo dibujan a las personas con cuatro dedos.

Percy no siguió a Naruto, quien tomaba a Guy y lo llevaba con los otros, se quedó viendo a Madara que comenzaba a absorber el Shinju, las cosas no dejaban de ponerse más raras. 
Lanzó su espada al aire y cuando volvió a atraparla, era la copia del Yelmo de la Oscuridad de Hades, se lo puso sin pensarlo para después fundirse en las sombras.

Naruto pasó a su lado, sin notarla, también había apagado su chakra.

—No puedes vencerme —le dijo Madara al ver al rubio ahí, frente a él—, ahora soy prácticamente inmortal.

Y Percy sabía que estaba en lo cierto, o más o menos, su aura de vida era terriblemente enorme, así que ella tendría que arreglar eso. 

—Idiota —le dijo Naruto, con una sonrisa en sus labios—, no seré yo quien acabe contigo —dicho eso, un segundo después Sasuke se encontraba a su lado—, seremos nosotros.

Percy estaba disfrutando el espectáculo, Sasuke y Naruto peleaban muy bien juntos, cuando vió que por fin parecía que lo tenían acorralado, ella quiso ir a ayudar, se estaba quitando el yelmo de la oscuridad cuando sintió un fuerte dolor de cabeza.

Era Kronos, quien le pedía que se cortara otro dedo, la mano, para que siguiera teniendo su poder, para que siguiera viviendo a través de ella. 
Percy no era tonta, por lo menos no tanto, sabía que aquello podía pasar si comenzaba a invocar titantes, primordiales y demás. Tomó su cabeza entre sus manos y controlo a Kronos, aquel era su cuerpo, su mente, él únicamente era un huésped ahí el que terminaría por irse. 

Cuando lo tuvo a raya, se quitó el yelmo, había escuchado a Madara irse hacia dónde estaba Kakashi, y comenzó a correr hacía allá. El Yelmo aún en su mano, y cuando llegó, encontró a un Kakashi en el suelo, con una mano sobre su ojo donde antes tenía el Sharingan, Sasuke estaba a su lado, quien al verla ahí, se sintió un poco mejor pues no sabía que había sido de ella.

Percy se dejó caer a un lado de Kakashi en el suelo, viendo su ojo.

—Estoy bien —fue lo que dijo él al ver su preocupación, aún no se acostumbraba a los ojos de Percy.

—No parece que lo estés, te falta un ojo —le dijo ella, con una mirada de reproche. 

—Y a ti un dedo —fue lo que respondió él, con el mismo tipo de mirada. 

Iban a seguir discutiendo hasta que Sakura apareció de repente, los tres voltearon a verla.

—Kakashi-sensei, su ojo —dijo Sakura mientras se acercaba a él y usaba su ninjutsu médico, ella se quitó del camino y se paró a un lado de Sasuke, quien la miraba de reojo, más que nada interesado en sus ojos.

—¿Qué es eso? —le preguntó Sasuke, apuntando al Yelmo tirado en el suelo.

Percy sonrió mientras lo levantaba.

—Mi espada —dijo ella para después lanzarlo hacia arriba, cuando volvió a atraparlo, era su espada, Anaklusmos, mitad acero templado y mitad Hierro Estigio.

—¿Qué le pasó a Obito? —preguntó Kakashi entonces a Sakura, ya se había acostumbrado a las sorpresas que guardaba Percy por lo que no mostró signos de asombro cuando vió el casco transformarse en espada—. Madara se fue hacia allá usando el Kamui.

Una Semidiosa perdida en Konoha.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora