Capítulo 10

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Lavó la ropa, la secó y fue a las respectivas habitaciones para doblar y guardar las prendas correspondientes. Ya que _(t/n)_ no necesitaba más de los monitores de pulso, bolsas de agua y el desfibrilador (que a penas habían ocupado), decidió almacenar todo y bajar cada una de las maquinas y demás material del hospital casero al rincón que les pertenecía en el sótano. Luego de ejecutar dicha tarea, fue a revisar el refrigerador para saber lo que comerían ese día; sonrió al prestarle atención a la carne.

Por otro lado, el tiempo que había pasado desde que Bucky se había ido de su lado para hacer muchas cosas productivas, ella había tomado sus medicinas y distrayéndose con un libro que había tomado de la estantería, sobre política. Le parecía un poco aburrido -ya que solo se hablaba del presidente actual- pero tenía con qué distraerse, hubiera visto la televisión de no ser porque no había nada interesante qué ver.

Observó a la única compañía desde lejos, pensando en qué tampoco tenía con quién hablar.

Recargó su cabeza sobre el respaldo del sillón, comenzaba a aburrirse. No imaginaba por cuánto tiempo tendría que estar así antes de su recuperación, ¿qué hacía la gente cuando estaba encerrada? ¿Cómo hacían para no perder la cordura y sentirse como un ave en una jaula? Comenzaba a desesperarse, sin embargo en su estado actual no podría realizar un esfuerzo considerable. Tenía que hallar otras maneras para pasar el rato y desgraciadamente, no se le ocurría nada por el momento.

El hombre notó el ánimo de la chica, así que decidió acercarse a ella y tenderle el control de la televisión. Tal vez no había nada que ver en los canales, pero sí en Netflix. Sam se había hecho una cuenta semanas atrás y rara vez la utilizaban. Quizá le ayudaría a entretenerse.

Ella lo agradeció y prosiguió a buscar alguna buena película o serie que le llamara la atención. Entonces se detuvo en el título de "Kung Fu Panda". Ya había visto esa película hace mucho tiempo atrás y la consideraba bastante buena. Dejaría lo nuevo para otro día, porque en ese momento quería ver a Po darle una paliza en el trasero a Tai Lung. Se acomodó en su lugar y esperó a que la película cargara.

Barnes iba a regresar al segundo piso, pero se detuvo al inicio de las escaleras en el momento en el que el logo de Dreamworks apareció. Alzó una ceja expresando curiosidad.

Tras ver la escena del sueño de Po, el hombre dio media vuelta y se dirigió a la sala para ver lo que ocurriría después; solo que hasta este punto seguía de pie, con los brazos cruzados y al lado de _(t/n)_, quién discretamente lo miraba. Transcurridos un par de minutos más, ofreció un lugar al lado de ella para ver la película.

--- ¿Eh? ¡No, no! Gracias. Yo... tengo que...

--- Ay, vamos. ¿Qué vas a hacer?

--- Iba a limpiar un poco mi cuarto

Pero en realidad iba a inspeccionar un par de archivos que hablaban de una banda criminal, tenían escasos datos y apenas conseguían algo de utilidad. Aunque por obvias razones no iba a decirle la verdad.

--- El cuarto no se va a ir -bromeó

Se quedó callado, pensando en qué más decir para escapar de ese tiempo al lado de ella.

--- Dime esa excusa después, amigo -continuo-. ¿Por qué no te relajas un rato?

--- Esa película es tan... infantil -dijo sin dejar de mirar la pantalla

Meneó la cabeza en señal de desaprobación, pero no se rendiría con su propuesta. Aún si eso implicaba dejar de prestarle atención a los intentos del panda por entrar en el palacio.

--- No todas las películas para niños son malas. Y bueno, ¿por qué no le echas un vistazo? Si no te agrada, podemos cambiarla y listo

Sin más remedio, se sentó en el sillón que había utilizado horas atrás para hablar con ella y ver la película. Suspiró y dejó caer su cuerpo a tal punto que su espalda terminó sobre el respaldo del mueble, relajándose.

Preguntó porqué su padre era un ganso y porqué vendían fideos. "¿Qué?" dijo a la vez que Po fue proclamado como Guerrero dragón, así como los demás personajes de la película. Contuvo su risa cuando el panda terminó por caer en cada una de las máquinas de entrenamiento. Pensó bastante en la frase dicha por la tortuga: "El ayer es historia, el mañana es un misterio, pero el hoy es un obsequio... por eso se llama presente" y no pudo evitar voltear a verla. Le fascinó la escena de combate de Tai Lung, impresionado al ver de qué manera escapaba de prisión. Sintió pena al ver cómo golpeaban a Po y la manera en la que "su maestro" lo despreciaba. Guardó silencio en el momento en el que Oogway muere y se desvanece junto a las flores de sakura. Disfrutó las lecciones de entrenamiento del maestro Shifu hacia Po. Se emocionó cuando los Cinco furiosos trataron de detener a Tai Lung, aunque ya esperaba que no fuera así de sencillo. No entendió cuando el Rollo del dragón fue abierto, mostrándose en blanco. Y en el momento en que el padre de Po estaba por decirle un secreto, creyó que sería el porqué tenía un hijo panda, pero igual se sorprendió al saber que no le ponía nada de especial a la sopa del ingrediente secreto. Comprendió el dolor que sentía Tai Lung y la furia que tenía contra su maestro-padre. Sintió gran satisfacción cuando Po le aplicó la llave de nombre extraño a su enemigo y cuando ganó el reconocimiento y respeto por parte de los aldeanos y de sus compañeros.

En conclusión, había gozado la película.

--- ¿Y bien? -preguntó con una sonrisa

Avergonzado, asintió.

--- Te lo dije

--- No dije que era... súper buena. Solo... no estuvo mal

Se levantó de su lugar, en dirección al baño del primer piso y justo antes de entrar, Reeves dijo: "Hay una segunda parte". Regresó corriendo hacia ella, chocando casi su cara contra la contraria.

--- ¿Lo dices en serio?

Rió, aceptando que hablaba en serio. También se dio cuenta de que en verdad le había gustado la película, lo que le alegraba mucho. Al final, sus conocimientos en películas animadas no habían resultado ser del todo inútiles.

--- Les gustan los espárragos, ¿verdad? -dijo una voz detrás de ellos

La pareja miró en dirección a la cocina, Sam estaba picando un poco de cebolla y ajo que utilizaría para la carne.

No dijeron nada, era cierto que estaban asombrados por no haber notado a Wilson, pero de preguntarle en qué momento había entrado, él les respondería con algo como: "Oh, hace unos minutos, no quería interrumpirlos" y ellos se sonrojarían. Aunque bueno, sucediera o no esa escena, ya estaban abochornados.

Ella se disculpó y fue hacia el baño. Estaba por ir al de arriba -ya que había notado que James lo estaba por usar-, pero no fue necesario, ya que él le concedió su turno, puesto que no tenía muchas ganas y además no haría un esfuerzo innecesario. Y cuando entró, caminó hacia el cocinero.

--- ¿En qué momento entraste? -susurró

--- Creí que no te gustaban esas películas -trataba de avergonzarlo

--- Pues, no -se cruzó de brazos-. Solo lo hice por... amabilidad

--- Ay, ajá -ahora limpiaba la verdura-. Y un mapache tampoco te ha ofrecido dinero a cambio de tu brazo

Guardó silencio, recordando lo molesto e insistente que había sido el animal luego de la batalla contra Thanos.

--- Como sea. Solo veíamos una película

--- Si tú lo dices. Ahí me dices si quieres una recomendación de películas cursis o de terror

--- ¿Y por qué de terror?

--- Así podrás abrazarla cada vez que tenga miedo -sonrió

El soldado solo negó con la cabeza y rodó los ojos acompañado de una sonrisa. Se dio la vuelta y empezó a poner la mesa.

--- Ella es valiente

Tal vez su amigo no lo notó, pero Samuel sí. Además de defenderla, había dicho una cosa buena de ella. Las cosas estaban progresando.

¿Acaso esa era la manera correcta?

Te recuerdo [Bucky Barnes]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora