H
Todo se había vuelto un caos en cuestión de segundos.
Era complicado saber a quién podía disparar y a quién no. Había cientos de personas corriendo de un lado para otro, emitiendo gritos ensordecedores que eran alimentados por los disparos que se escuchaban ocasionalmente.
Igual de rápido que empezó, también acabó. La multitud huyó despavorida en minutos, dejando a la vista a los causantes de aquella revuelta, que disparaban a diestro y siniestro. Había disparado a varias personas, intentando apuntar a las piernas, pero entre todo el desorden no dudaba que hubiese matado a alguien. Había cuerpos en el suelo, tanto de los que habían iniciado aquello como de los que estaban tratando de sofocar el movimiento, solo alimentando el pánico de la escena. Por suerte, había muchos más guardias que estaban intentando contener el levantamiento que los que se habían vuelto en nuestra contra.
Podía oír mi corazón bombeando sangre en mis oídos. No me permití relajarme cuando la escena fue despejándose. Podía localizar a varias personas de cara al suelo mientras otros guardias los esposaban. Mis ojos viajaron al otro lado de la plaza, mi ceño frunciéndose cuando reconocí varias figuras sin moverse mientras todo el mundo corría de un lado para otro. Reconocí a Kat tirada en el suelo, deteniéndome el corazón durante un momento pero pronto me di cuenta que parecía estar viva. Niall la sujetaba, mirando un cuerpo detrás de él inmóvil que yacía en la tierra. A unos pocos metros de ellos, Riley miraba en su misma dirección sin moverse.
No tuve tiempo de procesar lo que pasaba cuando alguien me empujó con fuerza por la espalda, tirándome al suelo. Mi pistola salió despedida a unos metros de mí, y antes de que tuviese ocasión para intentar cogerla, mi atacante me agarró la camiseta, dándome la vuelta y clavando mi espalda contra el suelo.
El rostro de Jace apareció delante de mí, pero no tuve tiempo de reaccionar antes de que su puño se estrellara contra mi cara. Sentí el sabor amargo de la sangre en mi boca y no hizo falta nada más para sacar la furia que sentía.
Aquel gilipollas no podría haber escogido un momento peor que aquel para cabrearme.
Mi puño golpeó su ojo, dejándolo desconcertado por un valioso instante que me sirvió para apartarlo de encima de mí y colocarlo a él bajo mi cuerpo. Fue entonces cuando toda la rabia y el odio que tenía hacia él desde hacía años salió. Si a eso le sumaba la permanente ira que había en mi cuerpo y el hecho de que por su estúpido egoísmo su plan acababa de arruinar la confianza que necesitábamos en Eastwood más que nunca, ni siquiera tenía motivos para parar.
No quería parar.
Ni siquiera sentía la piel de mis nudillos abriéndose cuando los estampaba contra su cara. Él no se quedó quieto tampoco; sus puños intentaban golpearme igualmente en los costados. No fue hasta que me golpeó en una zona específica que me dejó sin aire y pudo librarse de mí para poder tirarme al suelo de nuevo. Sentí una punzada por todo el cuerpo, claramente aún teniendo sensible la zona donde mis costillas habían estado rotas hacía poco más de un mes. Aprovechó mi momento de debilidad para agarrarme el cuello, apretando mis vías respiratorias con sus dedos con toda la fuerza que podía. Le agarré las muñecas, intentando separarlo de mí pero era mucho más difícil para mí tirar de sus manos hacia arriba que para él presionar hacia abajo.
Intenté mirar hacia los lados con la esperanza de que hubiera alguna roca o lo que fuese que me sirviese para golpearlo pero no había nada y el intento de moverme solo sirvió para que presionara mi cuello con más fuerza. Él parecía tan fuera de sí como yo. Tenía el rostro contraído por la rabia, el cual poco a poco me estaba costando más enfocar. Sabía que había soñado durante siglos con el momento de matarme.
ESTÁS LEYENDO
Shield [h.s]
Фанфик[2ª parte de "Gunshot"] Westfield tiene más poder que nunca. Las mentiras y los secretos nunca han ayudado a nadie. Eastwood está pendiendo de un hilo y la inminente derrota es una carrera contrarreloj. (advertencia: mención de sexo, drogas, suicidi...