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El año ya estaba cerca de terminar pues era Noche buena. La nieve cubría las casas y las calles, la decoración estaba en cada puerta y ventana. Pasarían las fiestas en la casa de Nicole ya que el año anterior las habían pasado en la casa de Thomas y ahora era su turno. Le habían enviado tarjetas navideñas con su foto a sus amigos y conocidos. Los padres de él y Nicole ya se encontraban en la casa, se encontraban charlando en la sala mientras Nicole le estaba dando los últimos toques a la cena. Traía puestas unas botas largas abrigadas para invierno color café y un jean oscuro junto a su suéter beige largo que parecía que la abrigaba muy bien. En cambio Thomas traía un suéter gris oscuro con azul y unos jeans negros y botas para invierno del mismo color. Cuando ella terminó con al cena, él se apresuró a terminar de acomodar los regalos bajo el árbol lleno de luces de colores y así se sentaron a la mesa para cenar el pavo navideño con patatas asadas, repollos de bruselas y de postre un dulce budín flameado de brandy. 
Pasaron un largo tiempo hablando y en el postre contando historias hasta que luego de acomodar la mesa se despidieron de los padres de ambos ya que éstos se iban a acostar en la habitación de huéspedes y en la habitación de Nicole. Thomas y Nicole se quedaron en el sofá mirando películas navideñas luego de un rato, mientras que una manta los cubría. No habían visto más de tres películas que el sueño les estaba ganando de mano así que se acurrucaron un poco en el sofá para estar cómodos para descansar y luego de desearse las buenas noches mutuamente se durmieron.
A la mañana siguiente cuando los rayos ya estaban iluminando las habitaciones Nicole y Thomas se encontraban desayunando chocolate caliente con malvaviscos mientras se deseaban los buenos días y luego le siguieron sus suegros saludándolos para unirse al desayuno. Tiempo más tarde antes de almorzar se dirigieron al árbol para abrir los regalos; le dieron sus respectivos regalos a sus suegros y ellos a Thomas y Nicole, entonces finalmente llegó el momento de que él abriera el suyo de parte de Nicole. Cuando lo abrió vio que era un precioso reloj de color negro y plateado que sabía en su corazón que usaría para siempre. Le agradeció con un beso y una sonrisa para luego darle el suyo; un brazalete de plata con pequeños dijes en él. Ella con ojos de estrellas le agradeció devolviéndole el beso anterior y lo abrazó con fuerza. Entonces Thomas se detuvo a explicarle con detalles su regalo.

—Este dije del libro es por ''Orgullo y Prejuicio'' que es tu favorito, la flor es por tu trabajo y pasión, la mariposa porque significa la alegría que tu posees, la estrella por la luz que tú irradias en los demás y en mi vida, el colibrí ya que es tu animal favorito y por la vitalidad y energía que ambos poseen —hizo una corta pausa para mirarla a los ojos con ternura—. Y por último el corazón con el infinito al rededor que significa mi amor hacia ti.

Los ojos de Nicole se encontraban en un mar de lágrimas a punto de romperse, aun así su sonrisa es dulce.

 —Es el regalo más bello del mundo, cariño. En serio, gracias.

Thomas orgulloso por hacerla feliz le colocó el brazalete en su muñeca mientras ella le decía que jamás iba a quitárselo al igual que su collar, que lo traía puesto cada día desde la noche de su cumpleaños. 
Se quedaron junto a sus padres en el fuego un rato mientras hablaban un poco antes de que ellos se marcharan. La nieve aún caía en la ciudad y por la ventana de la sala era fácil de ver, parecía que esta vez la nieve era más blanca esa mañana.

Por una corazonadaWhere stories live. Discover now