C A P I T U L O 15

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—Vale mamá.

—Se supone que ya Adonis esté en el avión. Te extraña.

—¿Paso algo?

—Ya sabes que le gusta protegerte, hija. A estado muy nervioso. ¿Estas segura de que todo está bien?

—Si tranquila. No entres en crisis existencial.

—Mejor cuéntame qué haces para que no me dé la crisis esa que dices.

—Reí.— Pues.... Estoy haciendo unas compras con Grismarie. Salimos a comprar algo de ropa y ahora estamos de camino a ir a comprarme un carro.

—¡¿Otro más?! T/N ya tienes tu Camaro y tú Banshee.

—¡Pero es de pista! Además quiero otro.

—Y luego otro, y otro, y otro.

—Me conoces bien.

—Tienes espacio en la casa de allá?

—¿Casa? Mamá, Rances me consiguió una mansión. Tiene unos grandes garaje y en cada uno caben como 5 o 6 carros. La mansión tiene muchos niveles, tiene un gimnasio, un estudio para bailar y otro para grabar discos. Tiene un jardín grandiiiiiiiiiiisimo parece que no tiene fin. Tiene un establo para caballos que....

—¿No estas pensando en comprar uno verdad?— No contesté.— ¡T/N!

—¿Que? Solo será uno.

—Ajá claro, tú y los animales se llevan demasiado bien. Terminaras tendiendo una granja en esa casa.

—Posiblemente. Además no hago nada en esta casa, más que bailar. Le dije a Rances que quería una casa sencilla y pequeña para mi. Pero no, él me consiguió una "casa" donde caben 3 familias con 7 hijos.

—¿Pero te gusta?

—Me encogí de hombros.— No esta mal. Pero es muy grande y me siento sola. Al menos los chicos van de vez en cuando.

—¿Te hiciste muy amiga de ellos verdad?

—Son de lo mejor.

—T/N hija, no te encariñes mucho con ellos.

Fruncí el ceño.

—¿Por que no mamá?

—Tú sabes que las personas llegan a un punto en que se tienen que ir. Va a llegar un punto en el que tendrás que alejarte de ellos y se te hará difícil.

—¿Por que me dices esto? No pasará nada.

—Solo no quiero que salgas lastimada.

—Y no lo saldré.— Suspiré.— Te llamo después, ya llegue al lugar.

Fin de la llamada:

Ni siquiera dejé que mi madre se despidiera. Tengo una relación muy buena con mis padres pero hay veces que mi madre es muy pesada. Aveces pienso que pude ser feliz en algunos momentos, pero no los aproveché por hacerle caso a ella. Nunca he conocido la nieve porque ella nunca me ha dejado por sus crisis existenciales, ademas, yo era menor de edad. Ahora que tengo 18 años, ella sabe que cualquier cosa que me diga la pensaré dos veces y yo terminaré tomando la decisión le guste o no.

Al ella decirme que va a llegar un momento en que me tendré que alejar de los chicos, sabrá que no lo haré.

Sinceramente hay veces que me gusta estar lejos de mis padres, a pesar de la buena relación que llevo con ellos.

Tu mirada en mi  [Libro 1]  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora