Tu mirada en mi [Libro 1]

C A P I T U L O 20

—¿Que hizo que?

—Lo que te acabo de decir. Y todo gracias a ti.— Grismarie sonrió angélicamente.— El no puede estar haciendo estas cosas.

—¿Por que no?— Se sentó a mi lado.— Te inscribió en la misma Universidad que yo. ¡Podrás ser cantante como siempre quisiste! Lo mejor de todo es que tienes el talento.

—¿Ajá, y que pasaba si yo decía que no? Se jodia todo.

—Pero no dijiste que no. Así que sigue conduciendo que Jungkook ya tiene que estar esperándonos.

Tal y como le había dicho a Tae. Hoy voy a comprar las cosas de la Universidad con Kookie y Grismarie. Tan pronto le dije a Kook se emocionó tanto que dijo "me baño en 5 minutos y me buscas en 10". Así que ahora estoy estacionándome frente al gigante portón de la casa de los chicos. Le marqué a Jungkook y él dijo que iba a bajar en breve. Eché mi espalda hacia atrás.

—¿Que tienes?

—I'm just thinking.— Pasé una mano por mi pelo y miré hacia otro lado por la ventanilla del carro.

—¿Y se puede saber en que estás pensando? ¿O en quien?— Pude sentir la mirada pícara de Grisma.

—En mi mamá.

—Oh. ¿No la has llamado?— Negué.— Tienes que hacerlo.

—Yo no soy la que está mal.

—Aún así, T/N. Tienes una linda relación con tus padres. No dejes que se vaya a la mierda por una discusión.

—Más bien por sus estupideces. Odio que traten de controlar mi vida. Cuando era menor de edad lo entendía, pero ya soy una adulta y aún así lo sigue haciendo.

—Sigues siendo su pequeña princesa.

—No me importa. Ya es hora de que vaya viendo la realidad.— Dije aún mirando por la ventanilla del carro.

—Ay, T/N. ¿Que voy hacer contigo?

Esa misma pregunta se la hice a Tae ayer.

—¡Hola hermosaaaaaas!— Dijo Jungkook asomándose por la ventanilla del lado de Grisma. Las dos lo miramos.— En estos momentos soy mantequilla por ustedes.

Las dos reímos.

—Vamos sube.

Grisma se quitó el cinturón para abrir la puerta y echar el asiento hacia al frente para que Kookie pudiera entrar y sentarse en la parte de atrás. Una vez Jungkook ya estaba sentado en el asiento trasero, Grisma puso el asiento delantero hacia atrás y se volvió a sentar y cerrar la puerta. Yo puse el carro en marcha mientras rugía al acelerarlo.

—T/N, maneja con cuidado por favor.

—Estás en el carro de una chica que es adicta a la adrenalina y a los carros deportivos. Te recomiendo que te pongas los 3 cinturones de los asientos.— Dijo Grisma mientras contestaba unos mensajes en su celular. Luego se giró para ver a Jungkook quien estaba con una cara de asustado.— No te lo digo de verdad, T/N sabe manejar bien. ¿Verdad?

—Claro.— Contesté.— Por algo tengo la licencia. ¿No crees?

—Confío en ti.

Grisma y yo negamos divertidas.

En el radio empezó a sonar una canción y subí el volumen. De inmediato reconocí la voz de la persona que la cantaba.

Era Tae.