- no grites!! -grite mientras le tiraba una almohada.
Adivinen quien se quedó a dormir. Si. Seoho. Insistió tanto en quedarse "para que no me pase nada" que no tuve otra opción. Termino siendo un poco irritante. Yo dormí en mi cuarto y él en el de invitados.
Sh: levántate que te prepare algo -dijo rascándose la nuca.
- dame 10 minutos que me baño rápido y ya bajo -dije levantándome de la cama.
Sh: esta bien, pero date prisa, te espero abajo! -dijo saliendo de mi habitación.
Agarre algo de ropa y me metí al baño. No se por que me desperté con tanta pereza. Me di una ducha rápida. Me cambie y peine para luego salir del baño.
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Agarre rápido mis cosas y baje al living. Intente visualizar a Seoho pero no estaba ahí. Fui hasta la cocina encontrándome con él. Quede boquiabierta al ver que ya estaba listo el desayuno.
Sh: no es la gran cosa pero espero que de igual modo te guste -sonrió cálidamente.
- si tú vieras mis desayunos te darían pena, mucha pena -reí.
- siéntate -dijo pasándome una taza de café.
Me senté en una de las sillas de la mesada y observé el plato. Un poco más y se me caía la baba.
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Realmente se había lucido. Le sonreí ampliamente. Este me sonrío cálidamente.
Sh: oh...por cierto, hice esto sin tu consentimiento, lo siento, tal vez pienses que me tome mucha confianza -parecia avergonzado.
- ¿Estás bromeando? ¿Por que me molestaría que hagas el desayuno? Yo debería estar avergonzada por no atenderte mejor -lo mire.
Sh: yo fui quien insistio en quedarse así que estamos a mano -sonrió.
- te debiste de levantar muy temprano -dije buscando mi celular.
Sh: no exactamente -respondió llevando fruta a su boca.