VEINTICUATRO.

171 26 1
                                    

Los labios de Seoho ya estaban rozando los míos. Por alguna razón. El dejo de acercarse. Eso me molesto un poco. Tanto que yo fui quien rompió el poco espacio que había entre nuestros labios. Fue un impulso. Pero no me arrepiento.

El beso fue lento. Sus labios eran dulces. Suaves. Eran perfectos. Tal como me los imagine. Por que para qué negarlo. Me imaginé cómo se sentirían sus labios. El momento fue único. Especial. Me gustaría poder detener el tiempo para que durará más.

Nos tuvimos que separar por falta de aire. Lo miré a los ojos. Y él a mi. Estos brillaban como nunca. Se podía notar un pequeño rubor en sus mejillas. Nada comparado conmigo. Que de seguro. Ya había dejado de ser un tomate y me hubiera convertido en algo más.

sh: si esto es un sueño no quiero despertar -dijó sonriendo.

- yo tampoco -reí embobada pero a la vez un poco avergonzada.

Sh: eres hermosa...nunca me cansare de decirlo...soy capaz de gritarlo a los cuatro vientos...por que me enamore...ME ENAMORE DE LA MUJER MÁS HERMOSA DE ESTE MUNDO!! -gritó.

- ya cállate...ya lo entendí -reí.

Sh: me encanta verte reír...me da vida ¿Sabes? -su sonrisa era como la de un niño inocente.

- que cursi eres -negué mientras seguía reiendo.

Sh: así de cursi te enamorare -sonrió de lado.

- ¿Y cómo estás tan seguro de eso Lee? -lo miré con los ojos los ojos entrecerrados.

Sh: por que ya lo estoy logrando...me lo dicen tus ojos...y me lo confirmo el beso -se acercó aún más.

- ¿Acaso sabes como leer mis ojos? -eleve una ceja.

Sh: por supuesto, ¿Quieres saber que mas me dicen tus ojos en estos momentos? -

- claro -respondí al instante.

Sh: me dicen que...tienes calor! -su sonrisa traviesa vino acompañada de unas gotas de agua de la piscina que me tiro.

- ¡¿Que haces?! -rapidamente cerre los ojos.

Su contestacion fue besarme otra vez. Unio nuevamente nuestros labios. El beso seguia siendo dulce. Pero esta vez era un poco mas rapido. Por lo que nos tuvimos que separar pronto. Escuche su risilla. Yo tambien rei.

Con su ayuda. Me seque la cara que aun estaba mojada por el agua que me habia tirado. Cuando lo mire con atencion esa sonrisa traviesa seguia. En verdad que parece un niño en estos momentos.

- vamos, hay aprovechemos el agua, hace mucho calor hoy -me acerque a la piscina, él copio mi acción.

Sh: ¿Sabes nadar? -su tono era un poco burlón.

- claro que se nadar -lo mire indignada.

Sh: hace unos minutos te salver de que murieras ahogada -rió.

- fue por que me tomaste desprevenida y entre en panico -rode los ojos.

Sh: si tu lo dices te creere -sus ganas de reir a carcajadas no dicen lo mismo.

- juguemos carreras, asi veras que puedo ser hasta aun mejor que un profesional -sonreí de manera retadora.

Sh: ¿Mejor que un profecional? Acaso no estas...¿Exagerando un poco? -

- entremos al agua y veras si soy exagerada o no, juzgalo por ti mismo -me lance a la piscina.

𝐒𝐔 𝐂𝐀𝐋𝐈𝐃𝐀 𝐒𝐎𝐍𝐑𝐈𝐒𝐀Donde viven las historias. Descúbrelo ahora