˗ˏˋChessˎˊ˗ [Kirari Momobami X Oc]

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Habían pasado cosas, cosas que Noah se había perdido, y antes de enterarse, pensaba que las quejas de su adorable abuela sobre su nuevo corte de cabello eran adorables, "eres como un muchacho", "ea, a que soy guapo" había respondido esa vez, o cuando le dijo su abuelo que era tan "guapo" y galante como él lo había sido en su juventud.

Noah es del adorable tipo de persona que ama a la família, la família lo es todo, y agradecía, que si bien eran muy distintos entre sí, se entendieran y se tomaran las cosas con humor y una linda sonrisa.

Pensó eso hasta que su abuela les dijo que se callaran, y con razón, porque se enfriaba la comida.

Pues resulta que justamente el día en el que decidió volver a casa temprano para ir de mula de cargas con su abuela y prima, >>porque sabía que si iba la mas joven, iba a comprar muchas cosas, y si iba su abuela, el refrigerador estaría lleno<< se perdió una cantidad de sucesos que, según ella misma, era una ofensa imperdonable para su persona:

-no, no, no, ¿en serio?-preguntó asombrada la del cabello corto- si, con esa ficha las mascotas tenían oportunidad de volver a ser personas.

-Mary-san, eso es impresionante, saliste del ser mascota...

-Yumeko también, Noah-contestó modestamente mientras se vio entrar a la nombrada. Noah de algo se estaba perdiendo.

-si, bueno, algo aquí pasa que yo no me enteré-dijo mirando a cada miembro del escuadrón de Jabami. Mary sonrió.

-puede ser...

-no me digas que se enfrentó con la enanita de las orejotas-dijo Noah pensando en qué miembros aún no había retado.

-no, de hecho se enfrentó a la secretaria de la presidenta, apostaron sus vidas y bueno, Yumeko ganó, la perdedora debía saltar de un edificio que construyó Kirari, bueno, si, te perdiste un par de cosas-contó con un habitual tono de voz. Noah ahora tenia la mandíbula casi por el suelo.

-no, no, no, no-dijo Noah viendo a Yumeko hablar con el muchacho castaño- es imposible que me de media vuelta medio segundo y Kirari sea arquitecta, Yumeko se tire de un edificio y lo que sea que haya pasado... Me ofende.

-no debería, llegaste a tiempo-comentó sin contexto, con seriedad en el rostro y una monotonía algo turbia en su voz, Saotome. Noah la miró durante unos segundos.

-sigo ofendida, necesito nuevas fuentes-dijo con una sonrisa Noah, para ir a ver de cerca a su victoriosa amiga a un paso realmente desesperado, para estar a unos dos pies de distancia. 

-¡buenos días, Yumeko!-exclamó con un tono casi caricaturesco.

-oh, Noah-chan, ¡tu cabello!-espetó con su tono inocente usual. Noah tuvo un brillo en sus ojos por unos segundos, luego recordó el motivo principal-ah, si, anda, anda, cuéntame, ¿cuanto dices que ganaste?

-oh, eso, tres billones-dijo con una sonrisa suave, Noah abrió los ojos como dos platos específicos para sopa- por Dios, ¡cuantas apuestas puedes hacer!

-¿verdad?-concordó, sintiéndose comprendida la otra.

-es impresionante, todo eso en un día...-Noah la halagó- mas importante, cuéntame cómo es eso del edificio ése.

-oh, Igarishi-san fue a tirarse, como debía ser por su derrota, pero Kirari-san corrió junto con ella, algo adorable, le ofreció ser su secretaria nuevamente-explicó enternecida.

-¿Igarashi-san dejó de ser su secretaria?-preguntó curiosa.

-apostamos nuestra vida, pero también mi posibilidad de apostar y el estar cerca de la presidenta, eso por parte de Igarashi-san...