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—Perdone, ¿qué?

—Alguno de ustedes tiene la oportunidad de ir a Hyakkaou, juegan con ella, el que gane podrá asistir sin ningún costo— dijo dando a entender que la muchacha con una máscara color blanco sería su oponente.

Uno de los cinco, la mediana, levantó su mano para hacer una pregunta, el director asintió levemente:

—El juego, ¿cuál será?

—Ajedrez— dijo la mujer de la máscara, ¿era tan sencillo como sonaba? La otra chica levantó la cabeza rápidamente, como por impulso, la mujer enmascarada comenzó a verla a ella esta vez, Noah desvió la mirada hasta sus manos, que estaban dentro de sus bolsillos.

° ° °


—Es ridículo— dijo Yuu— Es ridículo que podamos entrar a una academia solo jugando un partido de ajedrez—Continuó Ryu apoyando a su hermano— Podría ser muy útil si todos los exámenes de ingreso fueran así.

—¿Alguno de ustedes sabe jugar?— preguntó Noah a los varones, ya que sabía que Yuki había aprendido, pues ella le había enseñado. Los chicos negaron con decepción.

—Pero, ¿puedes enseñarnos? El partido es esta tarde—la chica suspiró.

—¿Por qué querrías ir a Hyakkaou?

—¿Por qué irías tú? Odias lo elegante—contraatacó Ren.

—¿Por qué? Bueno, no suelo rechazar retos muy seguido— para éste momento los cinco chicos estaban fuera de la oficina del director, debatiendo lo que se haría.

—No me hagan demasiado caso pero... ¿y nuestros padres?

El comentario de Yuki los había dejado a todos pensando, por lo que concordaron en que deberían llamar a sus padres para avisarles.

Los chicos estaban simplemente agotados, sus padres no entendían la situación. Todos menos los de Noah, que a fin de cuentas, no estaban siquiera en el país. Ni siquiera en el mundo, a decir verdad.

Los hermanos, Ryu y Yuu, estaban ahora en un grave estado de reproche por parte de sus padres, que luego de veinte minutos de explicarles la misma situación una y otra vez, tuvieron una mediana aceptación. Yuki por otro lado pudo convencerlos sin sudar, ya que era la típica chica con familia que no tenia demasiadas espectativas sobre ella. Aparentemente, el resto salió bien.

—Pero, ¿por qué nosotros?— preguntó Ren.

—¡Somos los niños elegidos!— bromeó Yuu.

—Es una buena pregunta—contestó Yuki, Noah le siguió.

—Le preguntaremos eso cuando alguno le gane, o lo que sea.

Ahora todos estaban en la azotea de la escuela, Noah les explicaba movidas básicas acompañadas con otras jugadas.

—¿Ven? Si hacen ésto los peones se protegen— dijo alineándolos en diagonal— Pero no lo uso seguido, al menos yo.

—Entonces ¿te comes al rey y ganas?

—No.

—Entonces ¿qué se hace?

—No lo dejes escapar, déjalo entre la espada y la pared, si a todas las posiciones a las que alcanza corre riesgo de ser atrapado, es decir: el jaque, eso es un jaque mate.

Todos la miraron, su rostro se había tornado sádico de alguna manera, sus ojos verdes estaban ahora perdidos en la pieza de la que hubo hablado un largo tiempo.

—Bueno, eso es todo, lo demás depende de ustedes, tengan en cuenta el valor de cada pieza y prevean movimientos, siempre— finalizó arrojando el rey blanco a las manos de uno de los mellizos.

—¿Quién de ustedes entrará primero?— los retó la mujer enmascarada, Yuki dio un paso al frente.

—Con permiso, me sacrificaré por ustedes, ¿si?— afirmó sonriendo.

—Buena suerte con eso— Noah intentó sonreírle, pero le salió una especie de mueca.

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˗ˏˋChessˎˊ˗   [Kirari Momobami X Oc]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora