Capitulo 40 Nuestra Boda

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Ni siquiera había tenido tiempo de ir por su bolso, tan solo dejo que Seiya se la llevara. Ahora iba tan diferente, sonriente, feliz, y ella también. Por fin estaría para siempre a lado del hombre que amaba. Habían ido a visitar el registro civil que por suerte aún estaba abierto y les habían informado que solo requerían llevar ciertos documentos y pagar una pequeña cuota lo cual era perfecto, así quedaron que ese mismo día llevarían todos los documentos para que su boda fuera al día siguiente. En la iglesia, aunque el padre se había mostrado renuente tras explicarle el porqué de esa boda tan precipitada accedió siempre y cuando estuvieran ambas familias a lo cual ellos aceptaron.

—No puedo creer que mañana seremos marido y mujer —murmuró sonriente al salir de la iglesia— parece un sueño, un hermoso sueño

—Es una realidad amor. Ahora vamos a llamar para darles la noticia y que estén presentes mañana a primera hora, tenemos mucho por hacer mi vida —la abrazó muy feliz al salir de la iglesia.

—¿Estas feliz? —sonrió abrazándolo mientras caminaban hacia la cabina del pueblo desde dónde realizarían las llamadas.

—Muy feliz. Como no te imaginas

—Yo también estoy emocionada y feliz —sonrió— creo que el vestido que me compraste hoy será perfecto para mañana

—Sin duda serás la novia campirana más hermosa del universo

—Tendré la boda de mis sueños, con el hombre que amo, con toda la gente que nos quiere. Será perfecto

—Entonces llamemos a tus padres primero

—Si mi amor —sonrió feliz. Al llegar a la cabina de inmediato proporciono el número telefónico de su casa— solo espero que mis padres no se desmayen ante la noticia

—Seguro que sí, pero seguro tu papá estará muy feliz con la noticia y eso si como no quiero estar separado de ti te mudaras conmigo a mi casa. Claro mientras buscamos algo para los dos

—Me siento como en un hermoso cuento —la chica de la caseta le había hecho una seña cosa que interpreto como que ya estaba llamando— entra y cierra —lo jaló hacia ella— Ah mamá, hola, mamá ¿cómo estás? —sonrió al escucharla.

—Hola hija estamos muy bien ¿y ustedes como se encuentran? ¿cómo te has sentido?

—Bien mamá, no te preocupes. Estoy mejor que nunca —sonrió robándole un beso a Seiya— ¿está papá contigo?

—Sí, se encuentra esta con tu hermano viendo algunas cosas

—Ah muy bien —sonrió— mamá tengo algo que contarles. Bueno antes que nada quiero que mañana muy temprano estén aquí, es muy importante para Seiya y para mí

—¿Sucedió algo hija? —murmuró preocupada, lo cual llamo la atención de los hombres que la acompañaban.

—No, bueno si en realidad va a suceder. Mamá prepara tu mejor vestido primaveral porque mañana me caso con Seiya

—¿Qué? ¿mañana? —abrió sus ojos sorprendida— ¿no se les hace muy pronto?

—No, mamá todo fue idea mía. Deseo ser su esposa ya, cuando antes. Pensaba hacerlo hoy en secreto, pero quiero que toda mi familia esté presente

—Siendo así mañana estaremos allá temprano. Hija, aun se me hace muy pronto, pero si es por tu felicidad que sé que con él serás feliz, los apoyaremos

—Gracias mamá. De verdad estoy muy feliz, me voy a casar con Seiya —dijo emocionada— te aseguro que solo con él podre ser inmensamente feliz

—Se te escucha, sé que así será es un buen muchacho. Ambas familias unidas por partida doble —sonrió divertida— salúdame a Seiya

—Claro que si mamá, pónganse de acuerdo con la mamá de Seiya para que vengan con ella. Los queremos aquí muy temprano. Te va a encantar el lugar, Inuki está más que feliz

BENDITA VIDADonde viven las historias. Descúbrelo ahora