No logro entender cómo un rostro tan angelical es capaz de hacer tanto daño sin pensar en las consecuencias de sus actos. Eso confirma una vez más que las apariencias engañan. Y eso era Camila Anderson Smith, un rostro angelical al cual muy pocas ve...
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CAMILA
Estaba super distraída en la clase de Biología, anotaba todo lo que el profesor discutía, pero aparte de que la biología no era de mis mejores materias tampoco era capaz de concentrarme del todo, aunque me bastaba con escuchar. Existían varias razones para que mis pensamientos estuvieran en la lejanía y no en el presente.
La noticia que me dio mi papá hace unos días acerca de su nueva novia y sus hijos me había caído de golpe, no era algo que me esperaba, aunque fingí lo mucho que me costaba procesarlo. Estaba consciente de que él tenía todo el derecho de continuar con su vida y pasar página, es decir, mamá murió hace casi tres años era lógico que en algún momento de su vida debía avanzar. Sin embargo, eso no quitaba que doliera menos. Pero por papá soy capaz de soportar lo que sea. Lo único que pedía y esperaba era que realmente haya encontrado a alguien que valiera la pena.
Porque cuando eres una persona con muy buena posición económica y reconocimiento es muy difícil encontrar a alguien real, incluyendo las amistades y el romance.
Lo siguiente era la persona que estaba implicada con el asunto referente a Jane. Por más que intentaba unir piezas y llegar a una conclusión lógica de quien podría ser; al final quedaba sin respuesta. Muchas cosas no tenían sentido y cada vez que me inclinaba hacia una teoría pues esta resultaba más absurda que la anterior.
Por otro parte estaba Jayden. Llevaba días comportándose de manera extraña. Como si el "odio" que parecía tener hacia mi debido a que no tuvimos un buen comienzo, se hubiera evaporado repentinamente. Sin dejar rastro. Algo me decía que Jayden estaba tramando algo, no tenía idea de qué, pero sencillamente no confiaba en él.
Y Tyler, bueno, él era un asunto aparte y complicado. Habíamos llegado a hablar, pero intento mantenerme a raya porque no quiero atarlo a algo que simplemente no existe entre nosotros. Él merecía algo mejor y yo lo sabía de sobra.
—¿Señorita Anderson? —el profesor me llamó la atención con su voz ronca y extraña, sacándome de mi torbellino de pensamientos y problemas.
—¿Si?
A mi lado estaba Alexia que como todos mis compañeros —incluyendo a Jayden—observaban la escena expectantes.
—¿Acaso le aburre mi clase? —enarcó una ceja, sus brazos estaban cruzados y una vez más las miradas de todos cayeron en mí.
Genial.
—Creo que la respuesta es más que obvia profesor. —confesé totalmente impasible. Toda la clase comenzó a reír aunque la verdad no me estaba haciendo la "graciosa" solo fui sincera teniendo en cuenta que sus intenciones eran intimidarme o avergonzarme.
—Con que le aburre mi clase. —chasqueó su lengua y puso una mano directo a su barbilla. Obviamente esperaba que me avergonzara o algo como cualquier otro alumno. —Bien, entonces supongo que usted lo hará mejor. —lo miré con incredulidad—. ¿Sería tan amable de pasar al frente y definir lo que es la biología sin observar sus anotaciones?
