Capítulo 21: Juntos.
[...]
La discusión a penas y había acabado, Arthur regresó con Andromeda. Afligido, desesperado, desorientado y desbordando miles de pensamientos; no creía ser capaz de abandonar su ideal, pero si incluso eso hacía que la chica de ojos bicolor hacia que lo perdonará, lo dejaría, lo abandonaría y se rendiría. ¿Qué no haría por ella?
—Arthur— Aquel, casi inaudible susurro, puso a todo su bello corporal en una sintonia que lo hizo temblar. Se giro con el corazón latiendo ferozmente hacia la camilla, encontrando en ella a su amada sentada, observándolo con una mueca de confusión —¿Por qué...?
—Despertaste— Sus ojos heterocromaticos por fin lo miraron, y una ligera sonrisa se formó en sus labios.
Como si fuera lo único que había necesitado, todo su cuerpo dejó de estar tenso y por fin pudo respirar con normalidad —Llamaré a...—No— Andromeda estaba confundida, lo había escuchado todo; la discusión fue lo bastante cercas como para que su consciencia -que recién comenzaba a despertar- captará cada palabra —Espera— No podría explicarse el cómo había sido cambiada de ropa, ni siquiera había sentido las cuando ponían las vendas alrededor de su abdomen; pero nada de eso estaba ahora en su mente... Lo único que estaba enfocada eran en sus palabras: él renunciaría por ella.
—Andromeda, necesitas que te examinen y...— Por un lado decía la verdad, y por el otro sólo quería huir. A pesar de que quería dedicarle incluso el universo entero, no se sentía capaz de hablar.
No sabía cómo hacerlo, y si tenía la idea, no sabía cómo lo tomaría ella.—Lo escuché todo— Sus ojos púrpuras regresaron a ella, de pronto sintiendo sus pulmones colapsarse y el mundo le dio vueltas dentro de su cabeza —¿Por qué...?— Ella estaba tan confundida como lo estaba él —No lo hagas, no lo canceles... No por mi.
—Andromeda— Arthur camino a ella y tomó asiento a su lado, observando su rostro en donde comenzaban a desvanecerse los hematomas y cerrarse las cicatrices —No lo entenderías, tenías razón todo este tiempo: es una estupidez. ¡Todos esto! El hecho de que tu estés aquí, en esta camilla, y yo acá, teniendo que vivir con la culpa y el temor... Inicio por esa tontería— Las suavez y mallugadas manos de la chica, tomaron una de las suyas, uniendo el agarre con fuerza y cerrando los ojos para inclinarse a él con una ligera sonrisa, de esa manera apoyó su frente en el hombro de él y suspiro con alivio.
Por su parte, Arthur sentía que volvía a la vida. Ese simple gesto hizo que cualquier armadura negativa se esfumara, y sin dudarlo rodeo su cuerpo con su mano libre.—La única batalla que se pierde, es la que se abandona— Un simple susurro que corto con la tensión restante, terminando con ella y abriendo camino por fin a la reconciliación que tanto anhelaban tanto uno como el otro —No quieras renunciar a algo por amor, Arthur... ¿Qué tipo de amor seria aquel que no te apoya en las adversidades? Tu lo has hecho miles de veces por mi.
—Pero tu crees que es algo estúpido— La de cabello azul marino, soltó una risa que provocó dolor en la herida —Y si tu dices aquello...
—Sé lo que he dicho, pero estaba tan enojada que las palabras simplemente no eran las adecuadas— Se separó de su anatomía y el mar de ojos azules con destellos verdes, se encontraron con el cálido y profundo color púrpura brillante —Puede que sea algo estúpido, pero a lo que realmente quería referirme era: arriesgado— Arthur no podía dejar de analizarla; sus labios, sus ojos, sus mejillas... Todo en ella seguía siendo perfecto para él ¿Cómo pudo estar tanto tiempo alejado de aquella que le daba lo único que necesitaba para sobrevivir? —Entiende que una parte de mi tiene miedo a perderte,— El comentario lo volvió a sus palabras, escuchándola con mayor atención —Pero hay otra parte que en verdad desea que luches y pelees por lo que ambos amamos. Es nuestro reino, y lo estamos perdiendo ¿Cómo dejamos que tan siquiera eso sucediera?
—No fue nuestra culpa, linda— Dejando de lado las controversias dentro de su mente, elevó su mano y acarició delicadamente su mejillas, contornando el hematoma en esa zona —Lo ha dicho Bartra, y yo también creo que a pesar de que hubiésemos estado aquí, no hubiésemos podido hacer mucho al respecto— Ella sonrió y suspiro.
—Justo así es como ahora te digo yo a ti, Arthur: Nada de esto es tu culpa— El pelinaranja frunció el ceño, y mostró confusión por sus palabras —¿Crees que no te conozco? Sé que has estado todo este tiempo ahogandote en la culpa y dejándote consumir con el pensamiento de que pudiste hacer algo por mi o por nosotros, cuando yo creo que aún estando entre tus brazos, algo así pudo haber ocurrido— Las mejillas de Arthur comenzaron a tomar un ligero sonrojo, mientras sus ojos se cristalizaban con las lágrimas —Hagamos esto junto Arthur, como siempre lo hemos hecho.
—¿Cómo deje que el orgullo me ganara?— Ahueco su rostro entre sus manos, y la beso con anhelo —Andromeda ¿Y si estoy equivocado y es mejor esperar?— La chica junto sus frentes y sonrió, acariciando la cabellera de su amado.
—¿Dudas de que puedas ganar esta batalla, Arthur?— El mencionado sonrió, y negó volviendo a besarla —Entonces dejame ayudarte a ganarla.
—Teniendote a ti, estoy más que seguro que lograremos ganar— Ella sonrió y por fin se distanció de él, observando a su alrededor.
—Sé que tenemos mucho de que hablar, sin añadir que tendremos que planificar más a detalle todo— Arthur sintió un ligero dolor en la herida fantasma, captando así, que ella comenzaba a tener malestar en la herida real —Pero ahora, sino te importa, quisiera hablar con Harriet y mi madre.
—Claro, las llamaré— Se puso de pie, y antes de salir de ahí se giro a ella y sonrió —Andromeda, quiero que tengas en claro... Que estoy dispuesto hacer lo que sea por ti, incluso si eso seria renunciar a todo— Le sonrió y salió de la habitación, dejando a la chica con el corazón latiendo intensamente y una sonrisa llena de ternura.
Sabía que era capaz de hacerlo, pero así como era él capaz de renunciar a todo, ella también estaba dispuesta hacerlo.
Lo sé, lo sé... He dejado pasar tanto tiempo para actualizar que ahora simplemente no me quedan palabras para disculparme con ustedes.
Últimamente he tenido tantos bloqueos que me ha sido difícil terminar de escribir. Si pueden ser capaz de notarlo, al inicio comenzó muy animada, y el final está bien wuacalas :c
No quiero darles algo así, ustedes se merecen los capítulos bien hechos y yo solo ando escribiendo pura mama*a.¡Lo siento mucho por embarrarlos en esta crisis! Voy a mejorar, ya verán.
Nos leemos hasta el próximo capitulo...
¡Ah! Otra cosa más: ¿Qué creen que pase cuando lleven en marcha el plan? Tengo curiosidad de lo que piensan al respecto.
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𝘌𝘴𝘱𝘦𝘳𝘢𝘯𝘻𝘢 "ᴬʳᵗʰᵘʳ ᴾᵉⁿᵈʳᵃᵍᵒⁿ"
FanfictionLe otorgaron el poder único de un demonio... La capacidad y destreza de una diosa... La fuerza extrema de un gigante... Y la magia potente de un hada.... (ᴾʳᶦᵐᵉʳᵃ ᵖᵃʳᵗᵉ) 𝘍𝘰𝘳𝘵𝘢𝘭𝘦𝘻𝘢. (ˢᵉᵍᵘⁿᵈᵃ ᵖᵃʳᵗᵉ) 𝘌𝘴𝘱𝘦𝘳𝘢𝘯𝘻𝘢.