Ya había pasado una semana desde la visita de Asahi y en ese tiempo Bokuto, Akaashi y los niños ya habían regresado, tras la mejoría en la relación de los padres y Keiji la familia había decidido extender la visita. Obviamente tras el regreso, Suga no dudo ni un momento en contarle al doncel mayor lo que había sucedido durante ese tiempo de ausencia, claro que había omitido algunas cosas...Pero Akaashi estaba 95% enterado de todo. Ahora estaban sentados en la sala de té mientras que los niños mayores jugaban un nuevo videojuego y los gemelos dormitaba al lado de su madre.
-Deberías quitarle el derecho. - Dijo Keiji moviendo la cucharita dentro de la bebida. - No fue necesario y no lo será. - Dijo refiriéndose a Daichi. - Por lo que ya me contaste se que estas que en buenos términos con Ushijima. - sonrió y Suga se sonrojo. - No me sorprendería que te pida matrimonio. -
-¡Ehhhh! - Suga se coloreo aún más. - No... No... imposible...- No sabía qué hacer, miraba a todas partes buscando un distractor. Movía sus manos por toda la mesa. - Waka....Ushijima-san...no...no creo...-
Keiji se contuvo de soltar una risa. - Vale vale.- Tomó la mano de Suga. - Digamos que falta un tiempo para que seas Koshi de Ushijima... - Suga ocultó la mirada y suspiró....casarse con Ushijima....
-Cómo sea. - dijo Keiji cambiando de tema. - Estoy de acuerdo con que arreglan un encuentro. Pero si deberías tener en claro lo que quieres hacer. Habla con ese abogado que te recomendó Asahi-san. - Terminó la bebida y observó a los niños quienes estaban entretenidos. - Hora de lavarse los dientes niños. - Mandó.
Suga observó cómo Mamoru persuadió a Kiyo para que hicieran caso, sin embargo se sorprendió cuando este por iniciativa propia le cogió de la mano para luego salir de la sala. Keiji y Koshi compartieron miradas y rieron bajito. - No me molestaría que fuéramos consuegros.- comentó con simplicidad.
-¡Akaashi-san~~!
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¿No te ha escrito o llamado? - preguntó Daichi a Asahi por teléfono.
El abogado negó. -Tienes que darle tiempo, daichi. No ha pasado mucho tiempo y debe estar pensando que hacer, no es cualquier cosas, es sobre su hijo. - Comentó este sentándose en la cama.
- Es mi hijo también. - Comentó Daichi.
-No quiero tener esta discusión contigo nuevamente Daichi. - Le advirtió el pelilargo. - Un paso en falso y Koshi y compañía te negaran el ver a Mamoru.
Daichi suspiró, Azumane tenía razón. - Me carcome todo esto...el tiempo se pasa realmente lento, yo solo quiero estar con ellos.- confesó abatido.
-Dales tiempo.- comentó el pelilargo. - Me tengo que ir...si...vale... - cortó la llamada y dejó el teléfono a un lado para luego suspirar. Ambos eran sus amigos y estaba entre ayudar a Daichi y ayudar a Koshi...Daría lo mejor y ayudaría a que las cosas no se complicaran para ninguno de ellos.
-¿Todo bien? - Asahi sintió a Noya detrás de él acariciándole la espalda desnuda, movió un poco su cuello y observó a su esposo acostado en la cama y con la sábana medio acomodada. - ¿Suga-san esta bien?- preguntó curioso, suga era un amigo muy especial y cuando se enteró estuvo a nada de partirle el trasero a daichi, del no ser por Asahi lo detuvo lo hubiera hecho.
-Si....esta bien. - le respondió y se acomodo nuevamente para abrazar a Yuu. - Hubiera estudiado mejor otra cosa...- confesó derrotado.
Yuu suspiró de vez en cuando tenía que ayudar a Asahi a salir de esos baches, cuando su profesión le ejercía demasiada presión este tendía a desanimarse. - Vamos Asahi...eres le mejor y se que les ayudaras. - besó la coronilla castaña. - Ahora...por qué no recuperamos el tiempo perdido?- hizo que sus miradas se encontraran y le besó con deseo. - debes reponer estas semanas que me dejaste solo. - dijo en tono seductor haciendo que asahi le mirara sonrojado y ansioso. - Te quiero bien dentro de mí... - Le susurró en el oído.
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Me cuesta olvidarte.
FanfictionSugawara Koshi da a luz a su pequeño hijo de forma inesperada, llora de alegría por tener a su hijo en brazos y a su vez llora por que aquel infante se parece a la persona que tuvo que dejar. Le costara olvidarse de aquel hombre que tanto ama y tr...