veintiuno.

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— SunHye piensa bien lo que vas hacer ¿si? No tomes una decisión precipitada— me decía mi hermano desde la ventanilla de su auto— No quiero que te pase nada malo.

— Está bien Hoseok, no te preocupes— le sonrío para transmitirle de la tranquilidad que no tengo, se ve bastante preocupado y no quiero que todo esto lo afecte— Vete tranquilo.

— Cualquier cosa, me llamas— asentí.— Ya me voy, que tengo guardia hoy.

— Adiós— me despedí agitando mi mano.

Abrí el portón, encontrándome con Taehyung hablando con Jungkook en el jardín. Yo bufé al ver lo feliz que se veía el castaño corpulento, al cruzar mirada conmigo.

— Iré a dentro, para que hablen a gusto— asentí ante lo dicho por Taehyung y lo vimos entrar a la casa.

— Lo que tengas que decir dilo ahora, y rápido.— me crucé de brazos.

— Me sigues gustando, se que dije que no venía al caso conquistarte de nuevo pero, después que lo pensé, creo que será bueno si intento recuperar el tiempo perdido, siento que tu aún sientes algo por mi.— solté una risita.

— ¿Estás loco?¿Crees que después de cinco años yo voy a seguir sintiendo algo por ti? No me hagas reír por favor.

— Si no es así, yo estoy dispuesto a reconquistarte, se que cometí un grave error al no despedirme de ti, pero te juro que no dejé de pensarte ni una sola vez, eres mi primer amor SunHye— ruedo los ojos con molestia, no estaba para esto ahora mismo, sólo pensaba en lo que habíamos hablado con la abuela.

— Si ya terminaste ¿te puedes ir? Tengo cosas que hacer— dio un paso hacia mi y agarró mis brazos.

— No me importa si te gusta alguien más, lograré reconquistarte, porque tu y yo, nacimos para estar juntos— su expresión me aterrorizó, fue tan maliciosa que sentí como su mirada me atravesaba la piel. Lo sentí muy diferente, no era el mismo Jungkook de antes.

— Vete ya— di un paso atrás— Y no insistas con esa tontería, no pienso tropezar con la misma piedra.— di media vuelta y entré a la casa.

Solté un largo suspiro de camino a las escaleras. Me sentía abrumada, mi cabeza tenía un gran enredo.

(...)

Pedí la cena en un restaurante y llevé la mía a mi habitación, no quiero encontrarme con Taehyung y verme en la obligación de hablar del tema. Tras terminar de comer, me puse a revisar algunos informes que me había enviado Yoongi por correo. Cuando logré terminar me metí en la cama para ver si podía coincidiar el sueño.

Algo que no pude lograr, me giré varias veces en la cama, trataba de olvidar todo lo que estaba pasando pero era imposible. Pensaba en la única solución que había y me volvía loca.

A ver, confieso que me gusta el chico, el problema está en que no me siento segura de mis sentimientos, tal vez sea porque temo volverme a enamorar y no quiero entregar nuevamente mi corazón, por miedo a que me lo vuelvan a romper. Que si me pongo a pensar ahora, gracias al incidente con Taehyung, no tuve ni chance para maldecir al sinvergüenza de
Baekhyun, o sea, ese chico llegó y se apoderó de mí vida de la manera más peculiar que ha podido existir, incluso hasta amenaza con robar mi corazón. Y no es para menos, a cualquiera le movería el tapete, con tan linda apariencia.

— Ash, no voy a poder dormir— bufé mientras me sentaba en la cama— Un vaso de leche me vendría bien.— introduje mis pies en las pantuflas y caminé hasta la puerta.

Cuando salí me llevé un buen susto, al ver a Taehyung parado en el pasillo.

— Me asustaste imbécil— retorcí mis ojos y me acerqué a las escaleras.

— No era mi intención, señorita sensible.

— Vete a dormir, anda— en el instante que sostiene mi brazo lo zafo, incluso hasta su tacto, remueve las mariposas.— ¿Qué quieres?

— ¿Qué haremos?¿Eh?— se cruza de brazos— Está claro que tu y yo, no somos el uno para el otro.

— No tengo ni la menor idea— doy la espalda y bajo las escaleras.

— La única solución, es ser pareja y yo no quiero pasar el resto de mi vida con una maleducada como tú.— me siguió hasta la cocina.

— ¿Y crees que yo si quiero estar con alguien como tú?— creo que lo hace a propósito, siempre me está provocando.— Sería una pesadilla.

— Yo prefiero morir—  admito que eso me dolió.

—Pues muere de una vez ¿que estás esperando?— sirvo leche en un vaso.

— Estoy esperando que admitas lo que no quieres admitir—  se cruza de brazos, recostando su cuerpo a la pared—Todo será más fácil si lo haces.

— No estoy para tus estupideces, iré a dormir, buenas noches.— paso por su lado bebiendo de la leche y me dispongo a subir las escaleras.

— Son dos palabras nada más ¿qué te cuesta decirlas?— me siguió.

—¡Ay! Déjame en paz.— pedí enfadada — ¿Acaso tu mandas en mis sentimientos? Deja de inventar cosas que no son, joder.

— Eres una engreída, prefieres morir antes de aceptar lo que sientes.

— ¡Que no siento nada! ¿Eres tan estúpido qué no lo entiendes? Estoy por pensar que eres tu el que está enamorado de mi.

— Y si es así ¿qué?¿Hay algún problema con que me gustes?— eso fue sorprendente, casi y mis ojos se botan.

— ¿Qué?

— Eso que escuchaste— me da la espalda peinando sus cabellos— No soy tan cobarde como tú, no tengo problema con aceptar lo que realmente siento, aunque no me guste.— me quedé sin emitir ni una sola palabra, estaba muy nerviosa y no podía pensar que decir.— Perfecto, ahora te quedas muda.

— ¡¿Cómo quieres que reaccione, si me dices eso así de pronto?!

— ¿Es necesario que grites? Siempre estás a la defensiva incluso cuando te digo algo bueno.— grito porque estoy nerviosa y porque no tengo ni la menor idea de como reaccionar a esto.

— ¿Algo bueno? ¿Crees que enterarme de que le gusto a alguien que no soporto, es algo bueno?— lleva sus manos a la cintura y sonríe ladinamente.— No es nada bueno, es algo irritante.

— Irritante eres tu— comienza a dar algunos pasos hacia mi— Ni porque te confesé lo que siento, bajas la guardia— no se detuvo hasta que mi espalda toco la pared.— Me haces perder la paciencia y eso casi nadie lo logra, sólo personas insolentes como tú.

— ¿A si?¿Y qué me harás?— nuestras miradas estaban fijas en los ojos de cada uno—¿Me golpearás hasta matarme?¿O prefieres tirarme de las escaleras? No, mejor...

Y selló mi boca con un profundo beso, qué provocó que el vaso de leche que sostenía en mi mano, se quebrara al caer al suelo. Ni el ruido que provocó, lo distrajo de lo que estaba haciendo, parecía querer comerse mis labios y yo sin objeción se lo estaba permitiendo, a pesar de que estaba desfalleciendo por dentro. Sus labios cálidos, el tacto de sus manos en mi rostro, su aroma, estaban provocando que enloqueciera.

Se separó para tomar aire, nos miramos por un instante y está vez fui yo quién se apoderó de sus labios nuevamente.

Me puse de puntitas y abracé su cuello para tener más acceso a su boca, él hizo lo mismo con mi cintura, apretándome a su cuerpo.

— Después de esto ¿seguirás negando qué te gusto?— dijo al separar por un segundo nuestros labios, pero yo le di mi respuesta al volverlo a besar.

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Hola!

Al fin, la tonta de SunHye, aceptó lo que siente.
Capítulo dedicado a Valeria929895 💕

Leyenda ➳ ᴋ.ᴛᴀᴇʜʏᴜɴɢ ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora