Leyenda ➳ ᴋ.ᴛᴀᴇʜʏᴜɴɢ ✓

nueve.

Pov SunHye.

Si, yo también lo veo muy guapo y me parece un desperdicio de hombre perfecto. Pero no me atrevería a decírselo, estoy segura que se lo tomaría como un halago o piropo pero no lo es.
Realmente me irrita su forma de ser tan arrogante y cínica. Si pudiera lo expulsara ahora mismo de mi casa. ¿Quién dice que tengo que ser su sirvienta? Ni de broma soy sumisa y mírenme.

Oh, mi móvil está sonando y ve tú a saber dónde está. El sonido viene de la sala, quizás se cayó de mi bolso y se quedó en alguna ranura del sofá. Efectivamente ahí estaba, enterrado entre los cojines del sofá.
Al ver de quién era la llamada quedé en shock, era Jeon Jungkook. Mi primer amor, mi primer novio, mi primera desilusión, fue como revivir todo lo que sufrí cuando me dejó. En ese instante no supe que hacer, si contestar o dejar que siguiera sonando el móvil, la opción de colgar no existía porque no quería hacerle saber que lo estaba evitando.

Por unos instantes dejó de sonar y fue un alivio tremendo, pero cuando regresaba hacia la cocina el maldito teléfono volvió a sonar. Entré en valor y contesté, ¿qué mal pudiera hacerme escuchar su voz?

— Hola SunHye— la respuesta era clara, me provocó mucha nostalgia, amo su voz.— ¿Cómo has estado?

— Bien...¿y tú?¿Cuándo regresaste?

— Acabo de llegar a Corea, eres a la primera persona que contacto.

— Oh...de-debiste haber llamado a tus padres, ellos...ellos estaban muy preocupados por ti.

— Tu también lo estabas ¿No? ¿O ya me has olvidado?

— Si te soy sincera sí, ya te estaba olvidando, aunque nunca lograré olvidarte por completo.

— ¿Sabes? No hubo un minuto en que no pensara en ti, te extrañé mucho SunHye y estoy deseando verte de nuevo.

— Lamento decirte que no será posible, yo no quiero verte y por favor, no me llamas más, adiós.

Díficil, pero así tienen que ser las cosas. Jungkook, no tuvo compasión cuando decidió irse a otro país sin despedirse de nadie, supuse que no le importaba, si no tuvo la decencia de despedirse de la chica que en ese momento era su novia, fue porque no sentía ni la mínima afectividad por ella.
Y yo que me moría por él. Imagínense, logré hacerme novia del chico que todas las chicas deseaban en el cole, él me gustaba un montón y vivía tan feliz sabiendo que había muchas que me envidiaban por tenerlo. Pero además de eso, yo lo quería por su forma de tratarme y cuidarme, incluso se peleó con Hoseok un día que me insultó.
Fue mi primer amor, realmente lo amaba y cada minuto que pasaba con él se me hacian especiales.

Pero así resultaron las cosas, él decidió irse lejos de mi, olvidando que realmente lo amaba, y que me iba a romper el corazón en mil millones de pedazos.

(...)

Hoy era un buen día para hacer ejercicio. Temprano me levanté y me coloqué algo de ropa cómoda para poder ejercitar un poco mi cuerpo.

Encendí la tele y coloqué un programa matutino que unas chicas realizan, haciendo varias rutinas de ejercicios. Empecé a hacerlas, una tras otra, siguiendo el ritmo de la tutora. Hasta que me cansé y me quedé tirada en el suelo. Respiré lentamente tratando de relajar mi respiración con mis ojos cerrados y sentí esa voz irritante llamándome.

— Señorita Gro.

— ¿Qué?— murmuré desde el suelo.

— ¿Qué te pasa?— cuando abrí mis ojos el tonto estaba agachado mirándome con sus ojos bien abiertos.

— Nada— alcé mi torso sentándome en mi lugar.

— Bueno entonces ¿por qué no me has llevado el desayuno?

— Porque creí que estaba dormido, además yo te llevo el desayuno cuando yo quiera, no hay horario fijo— ví recorrer su lengua por su labio inferior para después echar una risita.

— Eres realmente grosera— se levanta y va en dirección hacia la cocina con sus manos metidas en los pantalones anchos que lleva puestos.

— Ey ¿qué harás?— me levanté rápidamente del suelo y fui tras él— Ni creas que te dejaré tocar mi cocina.

— Bueno, has algo de desayunar tengo hambre.

— ¿Qué tipo de dragón tienes ahí dentro?— señalé su barriga— Siempre tienes hambre.— me fui a la nevera haber que había para hacer y creo que se tendrá que conformar con cereales.

— Oh ¿Qué es eso que tienes en el costado?

— Un tatuaje— murmuré echando en dos platos hondos los cereales.

— Wow, es bonito— seguía mirando hacia el lugar donde están mis costillas.— ¿Qué dice?

—Ese dice "never dream for success but work for it" nuca sueñes con el éxito, trabaja por él.— hizo una sonrisa— Ese es mi lema de vida.

— ¿Tienes otro por ahí?— también vio el que tengo en la pelvis, debo de ir por mi abrigo, está mirando ya donde no debe.

— Ese no dice nada, es un dibujo.

— ¿Y tienes más?— que curioso es.

— Si, el de mi brazo— alzé mi brazo— Lo hice cuando mi padre murió "You will always be in my heart" Usted siempre estará en mi corazón, eso es lo que dice.

— Son muy bonitos— cuando actúa así me hace olvidar lo arrogante que es.

— Gracias— coloqué el plato de cereales enfrente de él y al lado un vaso de jugo.

— ¿Esto...es lo que vamos a desayunar?— asentí, sentándome enfrente de él.

— Tengo que ir de compras, el refrigerador está vacío— él volvió a mirar lo que tenía enfrente y suspiró

— Bueno, si esto es lo que hay me lo comeré— al dar la primera cucharada sonrió— Mmm, es rico.

— Los cereales son muy ricos— respondí.

— La señorita SoYu ¿Por qué no viene hoy?

— Porque hoy  tiene que trabajar todo el día, pero mañana vine sin falta, no te preocupes— parece que le agradó mucho SoYu.

— Usted y ella son buenas amigas ¿verdad?

— Oye, hoy estás muy curiosa.

— Solo quiero hacer conversación— otra vez hablando con la boca llena.

— Entonces ¿Por qué no hablas de ti? Te gusta mi amiga ¿verdad?— negó con suma calma.

— No es el tipo de chica que me gusta, la veo como mi Noona, nada más— vuelve a comer del cereal.

— ¿Y que tipo de chicas te gustan?¿te acuerdas de eso?

— No creo que sea algo que se olvide o se deba de recordar, es algo propio de la persona ¿No?— creo que tiene razón— Me gustan las chicas inteligente, amables y que tengan iniciativa propia, no me importa su aspecto físico, solo desearía que nunca me traicionara.

— SoYu cumple todos los requisitos, no sé por qué no te gusta.

— Ya dije que ella es mi Noona, no me voy a fijar en ella, aunque tu quieras— hice una mueca y bebí del jugo.

— Tú te lo pierdes.

— Ya terminé, me iré a la habitación.

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Rocío Unnie, Saranghae 😍
Capítulo dedicado a ti.
Las quiero.