12 de Enero del 2019.
Venezuela. Estado Lara.Ese día, Victor, Carlys y Hilary habían llegado con una cantidad de sueño notoria, y eso que la última de la lista solía vivir con sueño. Tras haberse quedado las dos en casa del cazador, tras haber prometido con su vida el no revelar el sitio donde estaban.
Los mercenarios no podían creer lo que veían cuando llegaron Carlys e Hilary junto con su más tenido enemigo. Riendo y hablando entre ellas, pues él tenía una cara de sueño intenso. Tomaron asiento en las mesitas. Él colocó ambos brazos sobre la mesa y enterró su cara entre ellos. Buscando descansar entre el bullicio de los alumnos.
—Oye, Victor, recuerda que hoy tenemos que entregar una tarea de matemática e inglés—Le dijo Carlys moviendolo del brazo.
—Por el amor a...
Laury obsevaba aquello junto con Bruno, el cual ya no le prestaba atención al joven al no considerarlo una amenaza inmediata. Ella por su parte, no podía creer como ahora ellos se veían como mejores amigos.
Loreannis llegó en ese momento, junto con Douglas y Juliette. La pelirroja caminaba con ese bamboleo de caderas que le causaba tantos problemas al sexo masculino. Aún cansado, Victor le miró y ella por igual. La señorita Reagal podría decir que sería la primera vez que lo veía sin una expresión sería o neutra.
El Cazador cerró los ojos con lentitud e inhaló del mismo modo, ese dulce aroma a fresas, tragó grueso. No pudo evitar pasear su mirada por su rostro fino, delicado, por las curvas de su cuerpo, por las piernas que se acercaban, se acercaban a ellos. Fué cuando se dió de cuenta que iba hacia su mesa.
—Hola Carlys—Saludó con un abrazo desde atrás.
—¡Juliette!—La arquera la abrazó con efusividad dejando de lado los ejercicios de matemática.
—Hola Nicole—Saludó Juliette.
—¿Que onda we?—La saludó Hilary mientras copiaba las traducciones del cuaderno de Victor.
Victor tenía la mirada en otro lado, o eso aparentaba, pues su atención estaba en la mujer, en su voz, su cuerpo. Los ademanes, como solía sonreír con cierta dulzura. Incluso como arrugaba la nariz.
—Hola Victor—Una sonrisa surcó su rostro.
—Por todas las generaciones de dragones—Alwyrm se sentía derretir por ella.
—Hola Juliette—El joven le sonrió ladino.
—¿Y que hacen?—Ella se sentó junto a la Arquera dejando su morral sobre la mesa.
Victor hacia un esfuerzo interno por comportarse normal, relajado, como si no fuese su alma gemela quien estuviese allí por más que si lo fuera. Tragó grueso y bajó la mirada al cuaderno, se lamió los labios al sentir ese dulce aroma a fresa. Vió las ecuaciones, pero su atención estaba en otro lado. Con deficiencia, comenzó a intentar realizar los ejercicios.
—Estabamos aprovechando que Victor sabe inglés y nos está ayudando con las traducciones—Carlys le mostró el cuaderno que le quitó a Hilary.
—¡Oye!—Se quejó ella.
—¡Agh! Scheize—Se quejó y al instante notó que lo había echo en alemán.
Lentamente alzó la mirada a las jóvenes, Carlys lo miró con asombro al igual que Juliette, Hilary solo arqueó una ceja y tras retomar el cuaderno de las traducciones siguió escribiendo.
—Y parece que también habla... ¿Que fue eso?—Preguntó Juliette con notoria curiosidad.
—Aleman...—Balbuceó Victor.
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El Hombre Sin Miedo (Saga: El Cazador Libro#2)."Actualizaciones Lentas""
خيال (فانتازيا)Los Renacidos son ahora un grupo radical en el mundo sobrenatural que atenta contra el delicado balance entre El mundo humano y El mundo Sobrenatural. Y sus garras ahora se ciernen sobre un país de América del Sur. Venezuela. Siendo este el nuevo d...