No negaré que hubo algunos encuentros así entre Nathan y yo, pero tampoco parecíamos adictos. No como Heather y Cárter que ni siquiera podíamos mantener una conversación de un día.Eran... muy activos.
Entre Nathan y yo había ocaciones en que nos comportábamos como amigos y eso me alegraba porque más que nada así empezamos y así es como nuestra relación se ha reforzado más a través del tiempo.
Rápidamente las semanas pasaron, hoy teníamos un evento en la escuela, teníamos que ir elegantes, y lo mejor era que podían venir otras personas, y decidimos que Liam, Carter, Amelie y Nathan nos acompañarían. El evento era en la noche, así que las próximas horas serán de algo entre chismes con Heather y lindas sonrisas de Jade, pero antes vería a Stephen que había regresado de cuidar a su abuelo durante un mes. Quedamos en comer un helado por el centro.
Así que yo me dirija hacia haya.
Mientras caminaba hablaba con Amelie en el teléfono.-En serio que no se que ponerme.-me contaba ella.
Últimamente nos veíamos más por Nathan al igual que a Miles.
-Amelie eres preciosa no deberías luchar con ese tipo de cosas.-le decía.
-Gracias, pero creo que terminaré comprando otro vestido.¿Tú ya tienes el tuyo?-me preguntó.
-Si, bueno hace horas que lo compré.-comentaba.
Y era gracias a Jade, que quería que deslumbrara ante Nathan. Al igual que ella por mi hermano. Era algo que me emocionaba.
-No entiendo porqué Miles se demoró tanto en invitarme. Ahora tendré que buscar un vestido.
-Y ten por seguro que cualquiera te irá Perfecto.-la alague.
-Lo mismo digo de ti, tienes que verte increíble, la última vez que Nathan te vio en un vestido de gala, lo dejaste babeando.-eso me dio risa. Recordando nuestro encuentro en el teatro.
-Ya te diré que no fue el único.-Y con eso hablaba de mi. Estaba apunto de entrar al lugar donde vendían los helados.-Tengo que irme ya Amelie, nos vemos en la noche.
-Claro que si, ahí nos vemos.-nos despedimos y yo entré al lugar donde habíamos quedado Stephen y yo.
Entre y me senté en una de las mesas.
-Buenas tardes señorita.-dijo el señor.-¿Que sabor será su helado?
-Galleta por favor.-dije y intente adivinar un sabor para Stephen.-Y también uno de menta.
Espero haber acertado.
-Deme un minuto y se los traigo.
En ese momento entró Stephen.
-No me digas que te deje mucho tiempo esperando.-dijo al sentarse.
-Solo una hora.-bromeé y sonreí.-Acabó de llegar de hecho.
-Asombroso. ¿Ya pediste tu helado?-me preguntó.
-Si y también pedí uno para ti, solo que no sé si haya sido el indicado.
-Cualquiera está bien, pero el de menta creo que es mi favorito.-fiuu.
El señor llegó con los helados.-Aquí tiene señorita.-me dio el de galleta.-¿Esté es para el joven?-me preguntó.
-Si.-afirme y Stephen me miró.
-Le atinaste.-dijo alzando las cejas.-Muchas gracias.-le dijo al señor.
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𝑼𝒏 𝒓𝒆𝒄𝒆𝒍𝒐 𝒆𝒏𝒊𝒈𝒎𝒂
Teen Fiction𝑈𝑛𝑎 ℎ𝑖𝑠𝑡𝑜𝑟𝑖𝑎 𝑐𝑜𝑛 𝑢𝑛 𝑟𝑜𝑚𝑎𝑛𝑐𝑒 𝑞𝑢𝑒 𝑡𝑒 𝑑𝑒𝑗𝑎𝑟á 𝑐𝑙𝑎𝑣𝑎𝑑𝑜, 𝑝𝑒𝑟𝑜 ℎ𝑎𝑠𝑡𝑎 𝑒𝑙 𝑓𝑖𝑛𝑎𝑙 𝑑𝑒 𝑙𝑎 ℎ𝑖𝑠𝑡𝑜𝑟𝑖𝑎... 𝑒𝑛𝑡𝑒𝑛𝑑𝑒𝑟á𝑠 𝑡𝑜𝑑𝑜. 𝐶𝑒𝑟𝑟é 𝑐𝑜𝑛 𝑙𝑙𝑎𝑣𝑒 𝑦 𝑐𝑎𝑚𝑖𝑛é ℎ𝑎𝑐𝑖𝑎 𝑒𝑙 𝑎𝑢𝑡...