Me tuviste con un "Hola"

Día 322

Tomé esta foto de Scott ayer, estábamos en clase y el profesor le pidió que se sacara esos anteojos. Yo sabía que a pesar de ser de lentes rosas, eran sus anteojos de lectura y no de sol como el profesor creía.

"Si me los saco no voy a poder leer el pizarrón, y ya que a usted le gusta llenar como siete, le pido por favor que me deje llevarlos puestos".

"De acuerdo, y te pido disculpas. Creí eran lentes de sol".

"Exactamente por eso los pedí rosas", la clase rompió en risas al escuchar eso.

Después de clase fuimos a la biblioteca, Scott y yo debíamos hacer un trabajo práctico para una de las materias más jodidas, Paradojas Ambientales.

"Ells, vayamos a andar en long. Tenemos tres semanas para entregar el tp, por favor te lo pido".

"Scott si no lo empezamos siquiera vamos a postergarlo hasta que estemos hasta las manos. Solo una o dos carillas, y pasa a ser de algo por empezar a algo por terminar".

"Te odio, Ells".

"No, no me odias. Ayer me dijiste", puse voz grave intentando imitarlo, "te quiero Ells, debes ser a la primera que se lo digo".

"Yo no sueno así, a demás no dije eso. Fue el whiskey".

"Claro, el whiskey me quiere. No que eso no sea cierto, pero no me mientas. Y menos en la cara Scott. Me queres, me queres, me queres", no se porqué empecé a cantar eso, pero ya no podía parar.

Me encantaba molestarlo, pero esta vez fue diferente. Él se empezó a reír, y asintió con la cabeza. Se dio vuelta, y comenzó a acercar su cara a la mía. No dijo nada, y yo tampoco, es más ya me había callado. La canción dejó de ser algo gracioso, y se tornó en algo serio. Muy serio.

¿Scott me iba a besar? Dios, ahí vienen las mariposas.

Pero no fue en los labios, sino en mi mejilla donde él depositó sus labios. Las mariposas igual estaban como locas.

"Sí, es verdad. Te quiero Ells".

"Ves, lo sabía".

"¿Y vos?".

"Scott, desde la salida primer salida que tuvimos te vengo diciendo que te quiero. Sos como una molestia necesaria".

"Uuff, que lindo eh. Gracias, Ells".

"No es algo malo. Sin vos mi vida sería muy aburrida. Y andaría rompiendo tabiques por ahí", logré que se riera, pero estaba raro. Lo notaba raro.

"¿Pasa algo, Scott?".

"Emm, sí. Dos cosas, en realidad. La primera, Max y Sarah se pusieron de novios. La segunda, es que no quiero ser el clavo que saca a otro clavo Ells. Por eso no te besé hace un ratito".

Boomb. De nuevo, lo había hecho de nuevo. Decir la verdad sin importar nada. Me gustaba eso de él.

"Scott, no sos un clavo. Sos mi amigo, bueno... sos muy dulce para conmigo, y siempre estas molestándome. Y amo eso, pero no hay nada de Max en mí.
Sí, bueno... que se haya puesto de novio no me afecta, quiero que sea feliz, incluso si esta de novio con la puta de fraternidad, hermandad, lo que sea.
Pero te quiero decir algo, amaba a Max. Pero no vine a Finlandia por él. La universidad nos dio esta oportunidad por nuestros promedios. Así que, no creas que lo seguí en esta locura por estar locamente enamorada, ¿ok?
A demás, estoy saliendo con un chico de fraternidad también, ¿o no sabías nada?".