29. Joel

370 38 21
                                    

—¿Nos acompañas a comprar la comida, Chris?

El castaño negó con la cabeza a lo que le preguntaba Richard, moviéndose un puesto para quedar al lado del rizado. Ya había colgado la llamada, había escuchado cómo se despedía, pero seguía con auriculares, imaginó que escuchando música o algo por el estilo. Era notorio el desagrado entre la mulata, Joel y la ojiazul, y lo entendía en cierta parte, ya que Lauren era demasiado directa y uno de sus defectos más grandes era la antipatía. No negaba que seguía igual de atractiva, pero la actitud también le molestaba un poco. No quería tener inconvenientes ni con Richard ni con Joel.

—¿Estás molesto?

—No.

—¿Por qué estás tan distante entonces? —llevó una mano a su hombro y lo apretó levemente —. Odio verte tan serio, siento que vas a matarme con la mirada.

—No pasa nada, Chris, solo que la novia de Richard no parece muy contenta con mi presencia —siguió la mirada del rizado, y en efecto, la pelinegra estaba ignorando por completo la existencia de su acompañante y parecía mirarlo demasiado a él, a pesar de tener al moreno rodeándola por la cintura —. No es que me importe, pero amarga un poquito el plan.

—¿Quieres que cambie la forma de mirar?

—¿Qué?

Sonrió y se acercó hasta cortar la distancia, pero fue el rizado quien hizo de beso algo más profundo, fue él quien lo tomó del cuello delicadamente. Los besos de Christopher hacían que todo dejara de existir a su alrededor, eran bastante seguros, no como si sintiera temor de que alguien lo viera o lo juzgara por besar a otro hombre. Ambos comenzaron a mover sus labios en sincronía, el mayor tomando el control. Joel dirigió su mano a la mejilla del castaño, terminando con la caricia al separarse unos escasos milímetros y uniendo sus frentes con una gran sonrisa ambos. Era la primera vez que se sentían en la libertad de besarse frente a personas conocidas y un lugar tan visitado, y aunque las cosas a escondidas eran divertidas, no tener que hacerlo era simplemente magnífico.

—Tu ex debe estar petrificada.

—Podría besarte todo el día.

Se dieron un último beso superficial y Joel sonrió al ver a la chica con el ceño fruncido, resultaba divertido hacer ese tipo de cosas. No era una persona de comparar, pero era inevitable recordar que cuando Erick veía alguna chica o chico con el que había estado, hacía hasta lo imposible para evitar que lo vieran con él, algunas veces hasta había llegado a negar la relación, argumentando que solo eran amigos. Nunca iba a entenderse a sí mismo, no entendía cuál era el motivo por el que seguía estando con el ojiverde a pesar de todas la indiferencias y las desestimaciones que le hacía en su cara.

—Lo dije, son unos tortolitos —Kathy regresó a la mesa con una hamburguesa en la mano, ya se había comido la mitad y faltaba casi una hora para comenzar la función —. Joel, ven te muestro algo.

El rizado se acercó a ella y miró su celular, eran dos fotos de todos con Richard, en una faltaban algunas personas y en la otra faltaban las que estaban en la anterior.

—Es para el pastel, para que quede más personalizado —le explicó al ver la cara de Joel preguntándole qué pasaba con eso —. ¿Cuál te parece mejor a ti?

—¿Y si mejor pones una donde solo salga él?

—Eso mismo pensaba, tal vez lo considere.

—Es lo mejor.

—Oye, otra cosita, ¿cómo le haces para tenerle reemplazo a Erick tan rápido? —el rizado sonrió con diversión y se encogió de hombros, Kathy era demasiado indiscreta cuando se lo proponía —. Lo merece, es la persona más falsa que conozco después de Zabdiel, te ves más guapo sin él, corazón, tus ojos brillan más.

Una Oportunidad ||Joerick - Virgato|| TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora