Un Alfa de Mentira «JIKOOK»

『¢αριтυℓσ XXI 』

—Sólo tienes que invitarlo, no es nada del otro mundo—gruñó el alfa.

—Pero no puedo —negó el alfa menor—, Jimin no me dejaría acercarme a él. Tú sabes como es el no es ningún idiota —suspiro mientras le daba la vuelta a la mesa que estaba frente a él—. Además también tiene tu sangre ¿por qué no dejas que el lo marque y así tener toda la descendencia pura que quieres?

—Porque el omega es hermoso —admitió—. Lo quiero sólo para mí.

—¿Y que va a pasar con tu hijo? Señor Lee—
preguntó.

—Haré que se aleje de él —dijo con su mano derecha en la barbilla haciendo una acción de pensar.

—¿Cómo? —quiso saber.

—Eso a ti no te importa —gruñó molesto por las preguntas del alfa—. Sólo debes invitarlo a la fiesta y listo.

El alfa menor se resignó cuando supo que el contrario no le daría las respuestas que necesitaba. Pero estaba dispuesto a todo si eso significaba humillar a Park Jimin. El alfa salió del cuarto en el que se encontraba junto a ese hombre y decidido a comenzar con lo que le ordenó, se fue hacia lacasa de su mejor amigo.

Sólo esperaba que este le ayudara sin hacer ningún tipo de pregunta, porque sino, tendría que obligarlo y él no quería eso porque después de todo era su amigo. Por otro lado el alfa mayor se quedó en su silla pensando en que todos sus planes comenzarían a procesarse y en un lapso de tiempo, estos ya darían fruto de todo lo que por años deseo.

Nadie iba a arruinar sus planes. No importaba si personas salían heridas y muertas en el proceso. Él iba a tener lo que quería, cueste loque cueste.

—Espero que sigas igual de hermosa, Park JiHee—dijo en un susurro y una sonrisa cínica.

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—Quiero irme de aquí —se quejo el peli negro sentándose en el pasto.

—Yo también —le siguió el castaño.

—¿Por qué siempre se están quejando? —se quejo el omega mayor.

—No, ¿Por qué tú siempre te estás quejando de que nosotros nos quejamos? —frunció el ceño peli negro. —Porque me molesta que siempre se quejen por todo —
argumentó el mayor.

—Y a nosotros nos molesta que no dejes que nos quejemos a gusto —bufó Yoongi.

—¿Pueden callarse un momento? —regaño Jungkook ya harto.

No entendía porqué sus amigos siempre estaban peleando por todo. Pero tampoco el entendía porqué se quedaba y escuchaba las peleas insignificantes.

—Sí, cállense —le siguió el alfa.

—Tú no te metas —Dijeron los dos omegas alunísono mientras apuntaban con su dedo al alfa.

Jungkook bufó y se tragó cualquier comentario que tenía en su mente, suficiente era con que los otros dos estuviesen peleando. Hoseok sólo tragó saliva al ver que sus amigos lo miraban de forma amenazante.

—Ya, vamos a calmarnos todos —dijo en un intento de calmar el ambiente.

—No nos digas que hacer —volvieron a decir al unísono los dos omegas.

Hoseok levantó sus manos en forma de rendición e iba a decir algo, pero fue interrumpido por unos brazos fuertes que se enroscaron en su cuello.

—¿Por qué tienen esas caras? —preguntó burlesco el alfa de cabellos negros.