Kendall y Kendall

16. "-Estás... raro."

Suspiré cansada.

Después del incidente con Kendall, mi mamá había tomado la decisión de irnos.

Subimos al auto y mamá llevaba su rostro claramente furioso.

Los primeros 5 minitos fueron en silencio, hasta que mamá habló:

—¿Que pasó ahí Kendall?–me aclaré la garganta.

—Iba caminando con Kendall y me tropezé, caí en el césped y él tropezó también; ya él te lo habíamos dicho.–Kendall inventó esa excusa para "salvarme", y funcionó para sus padres y para mi papá. Mamá no se tragaba el cuento.

—¿Y por qué estaba tu rostro rojo?

—Me dió vergüenza.

—¿Y tus labios?–añadió David, ganándose un golpe de mi parte.

—Fue que me mordí el labio al caer, ¿podemos olvidarlo ya? Ya pasó y...

—Prometiste que esta noche sería perfecta y dijiste que harías lo que fuera necesario...

—Y sí que lo hice–interrumpí a mamá–, bailé con el hijo de su jefe por obligación. Tú me obligaste.–recordé y ella se mantuvo en silencio.

—Bien–dijo papá–, es suficiente. Invité a la familia Adams a pasar la tarde del sábado con nosotros, para pedir disculpas. Así que ellos vendrán a casa a pasar un rato con nosotros y luego iré con Jeff a jugar al golf.–papá era adicto a jugar ese deporte.

—El sábado debo ir a hacer un trabajo con unos compañeros.–Y Kendall.

—Está bien–continuó papá–, irás a hacer ese trabajo, pero al terminar, te quiero en casa.–dicho esto, el recorrido quedó en silencio. Papá estacionó el auto en el garaje y la primera en bajar fue mamá, quien se adentró en la casa sin decir palabra alguna. Seguida fui yo. Estaba demaciado cansada y mareada con todo lo que había pasado hoy.

Entré a mi habitación y cerré la puerta atrás de mi, para luego lanzarme en mi cama boca arriba. El beso con Kendall volvió a mi mente y un dolor de estómago me invadió. Pero no era ese dolor de querer vomitar o de asco, no. Era ese dolor de... de... No sabía como explicarlo. Todo era tan confuso.

Aún sentía sus labios presionados sobre los míos, ¿por que me besó? Él dijo que... dijo que había esperado toda la noche por eso. Él quería besarme, así que no puede decir que fue un impulso masculino.

¿Lo hizo simple y sencillamente por que se le antojó? Probablemente sí. Apostaba todas mis cosas a que en este momento estaba besándose con otra.

Narra Kendall Adams

—¡Mierda!–grité y Nath se levantó para hacer un baile de victoria.

—¡Te gané!–repetía cantando.

—¡Shhh! No hagan ruido.–volteé a ver y encontré a Chad leyendo un libro sobre mi cama.

—¡Te gané!–siguió bailando Nathan.

—Ya, ya entendí.–me puse de pie y caminé hasta mi armario para quitarme la camisa.

—¿Que te pasa?–preguntó Nathan– Estás... raro.

—No estoy raro.–me volteé hacia él.

—Claro que sí. Casi nunca te gano jugando a la Play Station y te he ganado las últimas 5 veces, ¿que pasa?

—Solo estoy algo cansado.

Mareado y con el estómago revuelto.

¿Que carajos pasaba conmigo? Desde el beso con Kendall me sentía... extraño, a decir verdad. Solo esperaba que no tuviera alguna de esas enfermedades mortales que se transmiten con solo tocarse las manos.

Al instante, un par de golpes en la puerta de mi habitación me sorprendieron y de inmediato, mis padres entraron, ya tenían su ropa de dormir puesta.

—Chad, Nathan, a sus habitaciones.–dijo mi padre y mis hermanos, sin dudar, se levantaron y se fueron, para que luego mi progenitor cerrara la puerta.

—¿Pasa algo?–pregunté caminando hacia las ventanas para cerrarlas.

—Dimelo tú, ¿qué pasó Kendall?–dijo mi padre claramente molesto.

Rodé los ojos. Kendall.

—Ya ella y yo les explicamos qué...

—¿De verdad crees que me trago eso Kendall?–preguntó claramente molesto mi padre.

—Kendall–dijo mi madre con voz suave–, lo que tu padre quiere decir es que sabemos que fue lo que pasó con Kendall y tú allá en la cena y no queremos que lo hagas.

—¿El qué?

—El enrollarte con la hija de los McCartney.–agregó mi padre– Ellos son los mejores abogados que he adquirido hasta el momento y no permitiré que vengas a destruirlo todo con uno de tus jueguitos.

—No estarán hablando en serio.–dije burlón y miré a mamá.

—Hijo, está bien si quieres ser amigo de Kendall, y nos gusta que lo seas, solo no queremos que te metas en problemas y nos dejes luego a nosotros dos intentando solucionarlos.

—Y provocaste un problema hoy.–agregó papá– Y es por eso que hablé con Frank y acordamos que el sábado iremos a su casa, pero a pedirles disculpas.

Oh, eso no sonaba tan mal.

—Bien.

—Y tú irás con nosotros.–añadió papá.

—Bien.–ambos se miraron confundidos. Mi papá iba a decir algo, pero mamá lo interrumpió diciendo:

—Descansa, hijo.–empujó a papá hastala salida y luego volvió a cerrar la puerta.

Bufé molesto. ¿Que les importaba a ellos que yo hubiera besado a Kendall? Fue solo un beso, ni que hubiera significado tanto.

Después de eso, me preparé para dormir y horas más tarde, ya estaba en un sueño profundo.

El domingo se fue rápido. Salí a correr, como siempre, y luego me fui a casa. No hablé con papá, y fue por que él no quizo hacerlo. Y cuando me di cuenta, ya era de noche y estába alistándome para dormir otra vez.

Llegó el lunes y ahora estaba conduciendo mi auto hasta la escuela. Al llegar, aparqué donde siempre, tomé mi mochila y bajé. Puse la mochila en mi hombro y empezé a caminar.

—¡Kendall!–me volteé y encontré a Peter. Peter era mi mejor amigo desde el segundo grado en la escuela primaria– ¿Por qué no me contestas las llamadas?–preguntó cuando llegó a mi lado– Desde el viernes te estoy llamando y no contestas.

—Apagué mi celular.–dije sin más.

—¿Por?

—¡Kendall!–la voz chillona de Amanda llegó a mis oídos y al instante, la divisé caminando hacia nosotros.

—Por eso.–la señalé con la cabeza y Peter rió sonoramente.

—¡Kendall Adams!–volvió a chillar y llegó hasta mi– ¡¿Quieres explicarme qué es esto?!–me mostró un grupo de papeles, al parecer era el periódico escolar de hoy.

Leí la portada: "¡Escenas exclusivas de el triángulo amoroso más explosivo en nuestra escuela! "

Fruncí el ceño y miré la gran foto de la portada, en la que habían varias fotos de Connor, de Kendall y varias mías, en las que salía genial. Pero eso no era importante ahora, lo que importaba era ¿quién carajos escribió eso?

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Gracias por esperar hermosas❤ No saben cuanto las amo❤❤ Sé que no ha pasado TAAAAANTO tiempo desde que dije que iba a hacer una pausa, peeeeero mis papás decidieron darme tiempo libre (sin estudiar) en la noche (: En Costa Rica falta 1 hora para las 7 p.m. (;

Así que amen a mis padres❤ JAJA

Las leo luego honeys❤ Gracias por su apoyo ❤❤❤❤

En la foto: Chad y Nathan Adams ❤
Gracias a @Unorthodox-girl ❤(: