Horacio sentía un gran dolor dentro de él, pero no era como una herida física la cual curabas y con el tiempo mejoraba; era como una laceración en su interior que solo se iba haciendo más y más grande. Era angustia tan fuerte que rodeaba a su pecho, que sentía que le podría consumir por completo.
De repente, escuchó alguien llamarle por su nombre y se despertó abruptamente por un toque en el hombro, encontrándose con Gustabo enfrente de sí. Notó entonces que seguramente aquella extraña sensación había sido fruto de una pesadilla y que de sus ojos brotaban lágrimas de las cuales no había sido consciente. Trató de secarse las lágrimas mientras debía observar su entorno con cierta desorientación, pero es que Horacio no recordaba haber ido a su cama en los barracones.
-Tranquilo tio, solo era una pesadilla, aquí estás seguro. – Trató de calmarle Gustabo. Horacio en ese momento se incorporó de la cama y su amigo aprovechó para sentarse a su lado, rodeándole con el brazo por la espalda.
-¿Qué ha pasado? No recuerdo... - Pero mientras decía aquellas palabras, Horacio le vino a la mente lo último que ocurrió antes de desmayarse. – Oh, sí, lo del Cherno. Joder, hice el patético...
-No te presiones, que no todos tendrían cojones de subirse a ese tanque ruso y hablando de rusos... Te trajo aquí el niño ruso, se te habría caído la baba si hubieses estado consciente. – Horacio le miró con cara de sorpresa y Gustabo se descojonó de la risa, suerte que sería de día; pues no había nadie más durmiendo en los barracones, sino les hubieran despertado a todos. - ¡Que sí! Te cargó cual princesita, no me lo invento, pregúntaselo a Segis después, también lo vio.
-Me cuesta de creerlo, Volkov no me habla para bien. Si dices eso es casi como si se preocupase por mí o algo...
-¿No te habrá dicho alguna mierda ese cabeza hormiga? Le reviento las piernas como se pase un mínimo... O le digo a Pablito y a Emilio que le den un toque, seguro que eso lo acojona más. – Gustabo rápidamente se puso a la defensiva y Horacio pareció encogerse un poco más, a pesar de que era el más alto de los dos.
-¡No te metas con Volkov! – Horacio hizo un puchero. – Tuvimos un encontronazo pero ya sabes, se le acaba de morir el compañero y voy yo, un completo desconocido y ocupo su lugar... Está super triste, cada vez que derivo con él lo siento. Dejadlo en paz, ¿vale?
-Vale, vale, no saques las garras tigre... No voy a tocar a tu novio. – Gustabo lo dijo con tono burlesco, levantando un poco las manos mientras hablaba.
En el fondo a Horacio le dolía estar encubriendo el comportamiento que había tenido Volkov con él, porque obviamente no estaba bien ir amenazando a nadie después de una primera deriva, pero también tenía la empatía suficiente como para saber que el ruso lo estaba pasando mal. La cuestión es que sabía que si le comentaba aquellas cosas con Gustabo, es posible que fueran a decirle algo... Y no quería complicar más su relación con Volkov.
¿Por qué los problemas no dejaban de llegar a él?
-Dijo el médico que te iría bien descansar, duerme un poco más si quieres. – Gustabo estaba preocupado por él y agradecía tener a un amigo así a su lado. Todavía se sentía cansado a pesar de que probablemente habría dormido gran cantidad de horas;hizo caso a Gustabo y volvió a dormirse un rato más.
Cuando Horacio recordaba la primera maniobra en el Cherno Alpha una gran ansiedad invadía su cuerpo, no solamente se sentía patético por no haber llegado a las expectativas, sino que la gran mayoría de personal del cuartel había visto en directo su error. Él mismo había estado mirando cuando Ivanov y Volkov hicieron la primera prueba en el cuartel, ¿Por qué no iban a hacer los demás lo mismo?
![](https://img.wattpad.com/cover/230385930-288-k891061.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Черный ✬ Альфа || Volkacio
Ficção CientíficaPacific Rim AU. Aleksander Ivanov, piloto de Cherno Alpha, muere en una operativa y deja a su compañero, Viktor Volkov, con la necesidad de encontrar un piloto que ocupe su lugar. El cadete Horacio Pérez no estaba preparado para ser nombrado como ta...