VISITA AL MÉDICO

1.4K 133 37
                                    

Charlotte Morningstar se encontraba tomando su café matutino, había muy pocas citas médicas para pediatría, ella amaba a los niños, eran muy obedientes la mayoría de las veces además de que muy pocas veces se ponían a llorar o de malcriados o eso solo ocurría con ella ya que su trato era suave y cálido, los padres a veces eran algo estrictos o mal encarados, algunas veces llegaban el padre y su esposa, por alguna razón que ella parecía no comprender ya que se aseguraba de no ponerse en una situación comprometedora con algún chico casado, bueno ahorita esperaba que hubiese almenos algún paciente que le alegrara el día odiaba quedarse sin algo que hacer. Los pasos de Vaggie llegaron hasta donde ella estaba.

- ¿Estás en café? -

La joven de cabellos rubios y tez blanca, ojos color miel elevo levemente su taza de café confirmando la pregunta que realizaba la peliblanca frente a ella.

-Me lo supuse ¿puedo sentarme a tu lado? Es que Cherry no deja de fastidiar diciendo, ser enfermera es más bajo que doctora, la odio a veces puede ser un verdadero dolor en las muelas. -

Dijo la morena frente a Charlie con una cara de fastidio y cansancio, algo que ella sabía es que muy pocas veces Cherry y Vaggie congeniaban, peor aun cuando se juntaba con Angel Dust, ya que ambos se ponían a fastidiar al pobre de Pentious.

-Si ya sabes cómo es, siempre le gusta molestarte, no deberías dejar que eso te amargué el día, mírame a mi tengo que estar lidiando todo el día los comentarios llenos de veneno de Helsa, pero bueno atender niños es lo mío y me agrada, al rato encuentre a alguien dulce y responsable mientras hago mi trabajo-

Respondió por lo que ambas sonrieron, y detrás de ella comenzó a resonar las carcajadas de Angel, sabían lo burlista que era Anthony, ese era su nombre real en cuanto a los comentarios cursis y cuestionables de la "princesa pediatra" así fue como Angel decidió llamar a Charlie.

-Cielo, cuando lo consigas me avisas querida, tal vez me presente a su amigo, querida ¿Vez porque te llamo princesa?, eres como no sé ¿los ideales de Disney en carne y hueso?, eres inocente e ingenua, ¿Quién demonios cree que vaya a encontrar una pareja perfecta mientras revisa un montón de mocosos revoltosos, de padres desatentos? –

Dijo el joven albino y de contextura delgada, con rasgos finos y delicados, mientras movía sus manos de una manera altiva y burlista, así como demostraba el resto de su cuerpo, algo que molesto demasiado a Vaggie.

- ¿Por qué demonios vienes siempre a arruinarnos el desayuno? ¿no tienes pacientes que atender o a alguien más que puedas fastidiar? –

El chico afeminado se acercó caminando de manera grácil hacia Vaggie, coloco su mano sobre el hombro femenino y miró hacia el frente.

-Oh querida tuerta, el barco de ahí en frente zarpó hace mucho recuerda, no fuiste suficiente ¿Qué te hace pensar que ahora le darás lo que ella busca?, además yo también tengo hambre-

Dijo sentándose al lado de Charlie, incomodando más a la morena, no solo por la actitud si no porque tenía razón solo en una cosa, su relación amorosa con Charlotte ni esperanzas de resurgir tenía.

- ¿Por cierto princesa ya hablaste con tu padre? Digo la última vez se veía muy interesado en visitarte-

El semblante alegre de Charlotte decayó levemente ante la mención de su padre, él le había pedido encarecidamente que volviere con Seviathian, su primer novio, "el que más le convenía", claro su padre no menciono que era por la fortuna de los Von eldrich, dos familias poderosas uniéndose.

-Sí, lo que quería era convencerme de que volviese con mi primer novio, ya saben para elevar el dote de la familia, así como sus riquezas y ganancias, pero no, yo quiero casarme con alguien a quién ame realmente y que me ame ya saben, como las películas románticas-

DAME UNA OPORTUNIDAD PARA ENAMORARTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora