DAME UNA OPORTUNIDAD PARA ENAMORARTE

LO QUE SE DESEA

Al día siguiente en las noticias y diarios locales, se veían las fotos tomadas por aquel paparazzi quién había seguido a Mimzy con el título "un Angel entre cielo e infierno", donde el mismo hacía quedar mal a Mimzy ante los medios como mala madre, ahora la noticia de la cita romántica entre Charlie y Alastor quedó olvidada ante ese atroz hallazgo, una pequeña quien con su padre se veía feliz y risueña al contrario que su madre, ahora le lloverían las entrevistas a Mimzy pero ella era buena actriz, pero la pregunta sería ¿Cómo le hará ahora para negar lo evidente?.

Por otro lado, Niffty estaba feliz, ese día su padre iría por ella y es más la Dra iría a ayudarle con su proyecto.

-Pronto la Dra será amiga de papi y no estará solito. –

Se dijo así misma esperando que su amado padre llegase, cosa que hizo rápidamente, la pequeña corrió a los brazos del mismo abrazándolo con fuerza, ella lo quería mucho, sentía injusto que él no tuviese a quién amar de la manera que su madre "amaba" a sus amigos, pronto llegaron a su casa y Niffty debía recordarle lo importante a su padre por obvias razones ya que a veces era un poco olvidadizo.

-Papi, recuerda que hoy llega la Dra Morningstar a ayudarme a terminar el trabajo para mañana-

Solo eso bastó para que su padre se volviera a lastimar pelando verduras, lo supo cuando lo escuchó quejarse en voz baja, tenía la mala maña de chupar la herida.

- ¿Te cortaste? -

Alastor la observo un poco nervioso, Niffty siempre le reprochaba que hiciera eso de limpiar su sangre de esa manera.

-Ohh solo fue un rasguño, pero gracias por recordarme, lo había olvidado por completo-

Dijo retomando su labor como si nada hubiese ocurrido, obviamente sabía actuar, él se sentía completamente feliz, ansioso, quería verla, quería oírla, sentir su aroma, su calor tenue, removió su cabeza ya que sus pensamientos no le dejaban cocinar a gusto.

Por su parte Charlotte, llegó a su casa y se arregló lo más que podía, quería dejar boquiabierto a Alastor, paso casi media hora probándose ropa, hasta que se decidido por una blusa y una falda algo larga, además de arreglar su cabello en una coleta baja.

-Espera ¿A dónde vas? -

Dijo Vaggie algo temerosa e interesada al rumbo al que se dirigía Charlotte.

-Voy con Alastor, es decir con Niffty, quedé con ella para ayudarle con su proyecto y no quiero quedarle mal-

Vaggie se acercó a ella y le colocó las manos sobre los hombros, a ella no le agradaba Alastor, no por mal hombre, no le conocía como para decir ello, si no que estaba celosa del como él llegó a la vida de Charlotte y le puso el mundo de cabeza solo con su altanería.

-Charls sabes bien que no me gusta la confianza que estas teniendo con ese personaje, sabes que puede solo querer acostarse contigo y que manipule a todos a su antojo ¿no se te ha ocurrido? –

Charlie suspiro y retiró las manos de Vaggie con cariño de sus hombros.

-Vaggs, se cuidarme sola, confía en mí, no me estoy ilusionando, yo tampoco sé si me utiliza o no, solo sé que quiero seguir con esto hasta que bueno, él decida llevarme o no solo a su cama-

Angel vio algo triste la escena yéndose con Vaggie y Charlie.

- ¿Por fin van a coger? -

Dijo Angel más que todo como un plan en que Charlie le dijere algo más y Vaggie estuviere tranquila.

-No, Angel su hija está con él-

Dijo Charlotte con hastío, mientras se marchaba, allí estaban otra vez él y Vaggie, suspiró ya que sentía que hablar con ella era cómo gastar saliva, más cuando observo sus ojos cafés comenzar a volverse acuosos por las lágrimas que amenazaban con salir, Angel la abrazó y suspira.