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No había nada en su cuello, eso en parte era bueno

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No había nada en su cuello, eso en parte era bueno. No tendría que explicar las marcas que le pudieron haber quedado en su piel aunque tampoco tenía pruebas de lo que le había pasado más temprano en la escuela. Sólo sería su palabra como evidencia.

- Entonces, ¿me estás diciendo que algo invisible te quiso matar? - preguntó Chaeyoung con un poco de incredulidad en su voz.

Tzuyu a través del espejo que tenía en frente observó a Chaeyoung por su hombro y asintió con su cabeza.

- Se sentía como si una persona de carne y hueso lo estuviera haciendo.

- Nunca había escuchado algo parecido. - Chaeyoung parecía realmente pensar en las posibilidades.

- Imagina yo. - soltó con un poco de amargura.

- Quizás fue el resultado de todo el estrés acumulado.

A Tzuyu le gustó pensar que ese podía la razón del último mal que estaba apareciendo en su vida, aunque tenía el presentimiento que no era así. El solo recordar los segundos de terror que protagonizó en frente de Irene le provocaba un nudo en el estómago difícil de desatar.

- Fue demasiado real. - se dejo caer en su cama al lado de donde Chaeyoung estaba sentada - No se sintió como si estuviera enferma o al borde un ataque. Sé lo que viví, era claramente algo impidiendome respirar y quizás buscando algo más.

- ¿Cómo estás tan segura?

- Llámame loca...

- Loca. - se escuchó el eco de la risa de Chaeyoung por la habitación.

Tzuyu no pudo evitar mirar de manera seria a Chaeyoung aunque en el fondo la broma le hubiera hecho un poco de gracia. A veces eso es lo que agradecía de su amiga, que era capaz de aligerar momentos de seriedad por el bien común. Solo que esta vez sí necesitaba que sus expresiones fueran de acuerdo con sus palabras.

- Como decía... - suspiró con una mueca en sus labios - Llámame loca, pero desde lo del pasado martes, me vienen sucediendo cosas fuera de lo normal y lo sé, pueden ser simples coincidencias. - sonrió burlonamente ante haberse anticipado a las palabras de Chaeyoung - Yo no lo veo así, en serio. - vio a su amiga prestarle atención y siguió - Desde que me cruce con esta chica, no me he dejado de llevar un par de buenos sustos cada tanto. Hay un antes y después en el solo hecho de haber intercambiado palabras con ella.

- No me dijiste que hablaron... - expresó con duda la más baja.

- Sí, eso pasó.

Una tenue sensación de aleteo se instaló en su pecho al recordar ese momento además de casi sacarle una pequeña sonrisa, casi porque Tzuyu no lo permitió.

- Además, no estoy segura cómo, pero ella sabe que soy un licántropo.

- ¿Cómo es eso posible? - la sorpresa en la voz de Chaeyoung era notable.

GЯΣKΉΛ「 satzu 」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora