Cuando Tzuyu conoce a una chica con cabellos de un color poco usual, considera que su primer encuentro no pudo ser más inesperado de la forma en que sucedió, si se lo preguntarán.
Un asesinato cambia el presente en la vida Tzuyu para mal. Y el miste...
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Los segundos pasados habían sido tensos para Sana y Dahyun al observar a Tzuyu e Irene mientras estaban en esa sub dimensión de recuerdos, sus cuerpos quedaban aquí, pero sus mentes no. Momo se había situado al lado de la rubia dándole un poco de confort al frotar sus brazos suavemente aunque Dahyun mantuviera la vista fija en la licántropo y la bruja porque tenía miedo de que el collar de Sana en el bolsillo de Tzuyu no funcionará y por su culpa ella no regresará.
Por otro lado, Sana estaba muy impaciente por ver a la menor volver a manifestarse con normalidad. Recién se había recuperado del proceso petrificación que caracterizaba a su especie vampírica al iniciar el proceso terminal de su vida. No quería volver a pasar por eso y trataba de auto convencerse que era esa la razón de su inquietud, pero como una visión a la lejanía, podía ver el verdadero motivo de toda su agitación. Debió haberlo previsto en algún momento justo como le habían enseñado tiempo atrás en cuanto a anticiparse a todas las posibilidades provenientes de quien pudiera ser tu enemigo. Para Sana fue tan simple como verla de nuevo para agitar todo el mar de emociones en su cabeza, tanto buenas como malas. Pero está vez quería un final diferente, uno que pudiera dar fin a todo lo que había vivido en el pasado y, además, pasar página. Aunque aún no estaba segura de cómo llegar hasta ese lugar.
Quebró el silencio en la gran habitación al avanzar hasta quedar al lado de Tzuyu, cruzó sus brazos al no saber muy bien qué hacer con ellos al observar sin vergüenza a la menor. Era una oportunidad limitada que tenía ahora y no quería desaprovecharla. En la escuela no podía hacerlo porque la menor siempre la descubría y tenía que parar, pero ahora, podía darse un pequeño gusto. También le servía para confirmar algunas cosas como que Tzuyu era más alta, tenía las facciones de su rostro más marcadas, su pelo era lacio y más negro que la noche, tenía una actitud de lo más cordial y poco agresiva que no sabía que le podía llegar a gustar en ella. En todos estos años nunca pensó ver esa actitud junto con ese rostro. Se sentía como cuando había empezado a leer sobre los avance científicos logrados en todo el tiempo que estuvo ausente. Su curiosidad le hacía querer ver y saber más de ello.
En un momento dado de sus pensamientos tuvo que morder su labio inferior para esconder la gran sonrisa que quería aparecer en sus labios. Si Momo y Dahyun la vieran de esa forma no tendría escapatoria. Para Sana, Tzuyu era algo (alguien) que no entendía y esa característica le provocaba querer acercarse más, pero no debía hacer eso. No cuando ella misma esperaba a alguien más actualmente.
Se mantendría cerca de la menor para cumplir su objetivo, pero nada más que eso por el bien común.
- ¿No vamos a hacer nada?
La voz de Yeri fue un buen motivo para Sana, el justo para borrar el gesto alegre de su rostro ya que la menor al no estar cómoda con la situación no se expresaba con ningún ápice de cordialidad hacia ella y sus amigas.
