Relatando mis fantasías

Último Juego

Julieta
Camila insistía demasiado en jugar con unos niños, hijos seguramente de otros vecinos, al escondite, no tuve opción, la niña y sus caprichos sumado a sus encantos de seducción eran imposible de obviar, además si la dejaba sola en una noche tan ajetreada, sería peligroso y Ángela y su sobreprotección de hermana, sin pensarlo demasiado, nos mataría.

-¡Vamoooos!- ¿Como tiene tanta energía?

-yo cuento de 1 a 10, ustedes se esconden, no pueden entrar a la casa ¿Listo?- decía un niño de unos ¿7 años?, Los demás en unísono respondieron "si" incluyendo a Camila.

-digan sus nombres- sugirió el niño, debe tener buena memoria para recordar el nombre de nuevos desconocidos y reconocerlos en la oscuridad apenas con una luz incandescente de las bombillas navideñas y las incorporadas al jardín. Los niños le hicieron caso y fueron presentándose cada uno, Miguel, el niño que iba a contar, se dio la vuelta y comenzó

-1-
Camila empezó a correr conmigo, la condición para que ella jugará es que yo tambien estuviera.
Que buena niñera soy

-2-
Llegábamos al borde de la piscina y las carreras de la niña casi me hacen caer al agua, mientras trataba de seguirle el paso

-¡Rápido!- me susurro

-3-
Estábamos detrás de un árbol y aparece un niño junto a nosotros

-vete, llegue primero- amenaza la niña

-4-
-no me importa, vete tu- el niño empuja a Camila, ella se la devuelve mejor y lo hizo caer a la piscina.

-5-
-¡No te rías!- me amenaza la niña, viendo con orgullo como el niño casi se ahoga, de no ser por sus padres que lo auxiliaron, él nos mira molestos pero por suerte no nos acusa.

-6-
Permanecimos en silencio.

-7-
Camila subió a las ramas del árbol, con cuidado la sujetaba de la espalda para evitar accidentes, ella me hace mala cara y me causa gracia

-8-
-¡Que te calles!- que niña más agresiva.

-9-

-¡10!- el niño empezó a buscar en los lugares más obvios, cerca a la casa, el garaje, entre las paredes y grandes decoraciones de arbustos en el jardín.
Hasta ahora habían encontrado a 5 de 7 niños, faltaba Camila y otro, la niña se veía tan entusiasmada y nerviosa, mi reflejo en un exámen se matemáticas.

Baje a la niña, ya que me hacía señas extrañas y pues supuse que eso quería.

-¡Quédate aquí!- me ordeno, y como buena novia le hice caso, pero me subí al árbol para ser más discreta, desearía no haber usado vestido, aún así era muy cómodo.

Desde esa altura, en medio de las hojas pude notar a la pequeña y su planeación, iba desde el árbol hacia un arbusto, y ella por ser pequeña, le favorece, allí se quedó un rato en silencio, el niño aún no encontraba al otro, ni a Camila y ya estaba un poco exhausto de correr de un lado al otro para evitar que se salvarán.

-¡1,2,3 por Camila!- el niño grito y salió a correr, mi niña lo siguió y parecía alcanzarlo, sin embargo Camila no fue tan veloz y fallo, estaba muy molesta.

-¡Ya puedes salir! ganaste- decía el niño gritando por el patio, seguramente faltaba alguno.
Me acerqué con cautela, la niña estaba echando fuego y si la mirada matará ese niño estaría en la morgue por 7 balazos en la cabeza.

-calmate, Camí, solo fue un juego- intento abrazándola, mientras veo como el niño buscaba al otro, o otra.

-¡Yo quería Ganar!¡Por tu culpa no ganamos!-