Enséñame lo prohibido [NAMJIN]

Capitulo 1

Seokjin observaba como las venas se marcaban en la gran mano que se apoyaba en la pared delante de él mientras el dueño de ésta entraba y salía de su interior, con embestidas certeras que lo hacían morder sus labios tratando de acallar sus gemidos. La otra mano lo sostenía por la cintura juntando aún más sus cuerpos.

Si se preguntan cómo Kim Seokjin terminó follando con un completo desconocido en el baño de un club, tenemos que regresar cuatro horas antes, cuando el pelinegro se encontraba en su casa aburrido con una serie de vampiros y un helado de chocolate como única compañía, a pesar de todo se sentía cómodo usando su pijama con rayas celestes y calcetas gruesas. Por eso se negó tajantemente cuando Yoongi y Hoseok trataron de arrastrarlo a un club nocturno, de esos con música estridente, cuerpos rozandose y olor a alcohol y sudor en el ambiente. Lamentablemente cuando llegaron a su casa no pudo seguir negándose, menos ante la mirada de cachorro atropellado de Hoseok.

La verdad es que la primera hora en el lugar fue bastante "agradable". Debía admitir que el club no era como se imaginó. La luces de neón en tonos morados en combinación con los sofás blancos y la música R&B le daba a todo un toque elegante y sensual. Estaba conversando con Hobi animadamente mientras éste recibía caricias en la cintura por parte de su novio. Cuando Yoongi comenzó a morderle la oreja y susurrarle cosas que hacían a su amigo sonrojar y reír tontamente, sintió que sobraba y prefirió ir a la barra antes de ser testigo del intercambio de saliva que venía a continuación.

Pidió un vodka con jugo de naranja y comenzó a beberlo lentamente mientras miraba su reloj, decidiendo que las 2 a.m sería el límite. Estaba aburrido jugando con la tapa de una botella cuando se sintió observado, al mirar hacia la izquierda se encontró con un hombre que lo miraba con total intensidad mientras bebía de su copa, sus ojos eran atrayentes y dominantes. Hizo un gesto casi imperceptible con su cabeza que Seokjin interpretó como una señal para seguirlo.

Él definitivamente no era un hombre de encuentros casuales, menos con desconocidos, pero esa mirada lo había hiptonizado y se sentia curioso.

De un momento a otro perdió al extraño de vista provocando que hiciera un puchero infantil. Iba a volver con sus amigos cuando alguien lo tomó por las caderas y se pegó a él por la espalda, moviendo sus caderas al ritmo de "sex trip" de Jay Park, lo sentía contra su trasero y en vez de alejarse, simplemente se movió con él en una suave danza. Podía sentir la respiración del contrario cerca de su oído y el calor de su cuerpo en combinación con el perfume masculino lo estaba volviendo loco. Ladeó su cabeza, dejando expuesto su cuello en una clara invitación que el otro no dudó en tomar.

Seokjin gimió bajito al sentir los besos húmedos que bajaban por su cuello. El hombre que ahora más de cerca parecía un chico más joven que él, probablemente universitario, jaló suavemente su camisa dejando expuesta su clavícula y una parte de su hombro, dónde continuo besando. Con pasos lentos fue empujándolo hacia los baños, sin parar de tocarlo. Jin se sentía tan excitado, tenía una dolorosa erección en los pantalones y la mente en blanco, le gustaría echar la culpa al alcohol, pero no era posible cuando apenas bebió la mitad de su bebida, él simplemente ardía en deseo.

No se dió cuenta como en un momento pasó de estar en la pista de baile a estar en el baño con los pantalones abajo y su acompañante poniéndose apresuramente un condón. Ese pequeño lapso sin tocarse fue suficiente para sentirse inseguro, algo tímido se atrevió a mirar al otro, quien notando la duda en sus ojos se agachó un poco y por fin juntó sus labios con los de él y ¡oh Dios! Sus labios eran cálidos, su toque suave pero a la misma vez demandante. El castaño acarició el cabello de Seokjin para luego tirarlo con un poco de fuerza y atacó otra vez su boca hasta que se separaron algo agitados y respirando con dificultad.

Y así llegaron a este momento, donde el extraño entraba y salía de Seokjin, llenándolo por completo, haciéndolo sentir estirado, quería gritar, quería que sus gemidos se escucharán por encima de la música y quería decirle al desconocido que ésta estaba siendo la mejor follada de su vida, a pesar de estar con la ropa puesta, haciéndolo apresurados en el baño de un club. Quizás era el peligro de ser atrapados lo que hacía del momento tan excitante.

El menor lo tocó comenzando a masturbarlo para hacerlo llegar mas rápido y lo consiguió después de algunos movimientos. Su propio placer hizo que el desconocido alcanzara también la liberación. Observando como Jin mordía ese labio inferior abultado, como cerraba los ojos y al sentir como se apretaba al rededor de su pene.

A pesar de ser sexo rápido en un baño, el chico se preocupó de ayudar a Jin a subir sus pantalones, abrocharlos y lo peinó con sus manos, demorando un poquito más de lo necesario.

Se separó cuando escuchó  voces acercándose a donde estaban y le dió un pequeño beso en los labios para luego salir de ahí.

-Namjoon, estábamos buscándote, ya nos vamos.

Fue lo que alcanzó a escuchar Seokjin antes de que el chico saliera completamente de su vida, tan rápido como entró.

-Namjoon- susurró, probando como sonaba el nombre en su boca.