Era una noche fría en jord
City, las calles estaban completamente vacías, solo se escuchaban los ladridos de los perros, era una noche perfecta para seguir desatando sucesos preocupantes en la tierna y pequeña ciudad o eso es lo que ellos pensaban.Y ahí se encontraba Zoé Williams, agotada, este era su momento favorito del día, pijamada puesta, recién bañada, recostada en el borde de la ventana con un té helado en la mesita, leyendo su libro favorito, ese era su lugar feliz , lastima que fue interrumpido por el grito desgarrador de la señora Williams, la joven se llevó un gran susto, tan grande que le hizo derramar el té, salió de su cuarto lo más rápido que pudo, de todas las cosas que ella espero encontrarse en ese momento no imagino encontrarse con tal cosa.
La joven bajó las escaleras y al ver la causa de los gritos de su madre no pudo evitar llevarse las manos a la boca, su corazón estaba latiendo a mil por minuto, sentía que le faltaba el aire y lágrimas amenazaban con salir de sus ojos, ahí estaba Richard Brown el mayordomo de la familia Williams por más de 25 años, recostado sobre la alfombra blanca de piel de oso polar falsa que en ese momento se encontraba bañada con sangre, sus ojos estaban medio abiertos, de su boca y su estómago no paraba de salir sangre, la joven se quedó totalmente helada, la señora Williams estaba llorando sosteniendo la cabeza del hombre manchando sus manos con la sangre, en eso la señora Williams de golpe la mira con los ojos bien abiertos susurrándole algo, fácilmente en ese momento podría hacerse pasar por una psicopáta.
- No logro entenderte- logro pronunciar la joven temblando.
- Llama a una ambulancia y a la policía.
- ¿Que tienes en tus manos mamá?- dijo la joven preocupada.
- E-Encontré una nota- dijo pasándosela con sus manos temblorosas y llenas de sangre.
Era igual a la nota que había encontrado en su cuarto el otro día.
"Él sabía demasiado"
Estaba tan asustada como molesta, estaba aterrada, estaba triste, Richard estaba muerto, una de las personas más importantes de su vida, estaba ahí, tirado en el piso, no podía dejar de llorar, no podía evitar sentir el dolor punzante en el pecho, jamás imagino que Richard estaría en la misma situación que Susan.
- ¡QUE HACES AHÍ PARADA VE A LLAMAR A ALGUIEN!
Al escuchar eso despertó de su pequeño trance.
_______
El señor Williams habló con la policía, este no lucia tan afectado, otro caso sin resolver en la ciudad, alguien había entrado a la casa, la señora Williams ya lo había encontrado muerto, Zoe estaba extrañada por la falta de empatía de su padre.
Al llegar la madrugada, mientras todos dormían y ya no se escuchaban los llantos de las mujeres en la mansión Williams, Zoe no soporto mas, sabía que se arrepentiría de lo que estaba apunto de hacer.
Bajo delicadamente las escaleras, salió de su casa y cruzó la calle, no le importó el frió o la niebla, se quedó ahí, mirando la enorme mansión en donde vivían esos psicopatas, esos seres a los cuales le tenía tanto rencor... tanto odio, cerro los ojos y respiro con fuerza, se quedó un momento analizando lo que iba a hacer.
No podía creer que haría esto.
Cruzo el patio y llego a la parte trasera de la casa, encontró al enorme perro gris durmiendo plácidamente, intento hacer el menor ruido posible, abrió la puerta de la casa que para su suerte se encontraba sin seguro, todo se encontraba oscuro y no lograba ver nada, no sabía bien donde se encontraba así que decidió prender la linterna de su teléfono, ella estaba en lo que parecía ser la cocina.
Salió de la cocina y se topó con una enorme y elegante sala, decidió caminar delicadamente a las enormes escaleras que se encontraban detrás del sofá de la sala, no tenía mucho tiempo de admirar todo lo que la rodeaba ya que debía ser rápida.
Ella estaba dispuesta a tomar cualquier tipo de información que se le presente, no sabía bien lo que buscaba, pero tampoco estaba dispuesta a quedarse sentada viendo cómo sus seres amados mueren a causa de estos monstruos, necesitaba pruebas que los acusen para que la policía no tenga más remedio que intervenir y terminar con toda esta red de atrocidades.Estaba tan distraída pensando donde ir que choco con alguien, era probable que ahora si no sobreviva, las otras veces solo fueron suerte, Zoe suspiro al ver que era una mucama y ella no podía hablar ya que era muda.
- Lo lamentó yo...
La mujer solo la miro y se retiró en silencio con lo ojos bien abiertos.
Escalofriante.
- Tenemos un código amarillo caballeros- escucho como alguien anunció a sus espaldas, este se encontraba arriba de las escaleras, era un joven de cabello blanco y sonrisa siniestra, el la miraba con una sonrisa siniestra.
Las luces cambiaron de color, se volvieron rojas, el joven de cabellera blanca se colocó una máscara blanca y se retiró caminando para atrás lentamente.
- ¡HUYE!- grito aterrada la mucama.
¿Que no era muda?se preguntó a sí mismas.
- ¿Que está pasando?- preguntó la enrulada aterrada.
- Vienen por ti.- dijo la mujer para luego salir corriendo.
Zoe estaba tan aterrada que no sabía que hacer, salió corriendo de nuevo a la cocina, intento abrir la puerta pero está se encontraba cerrada.
- Corre niñita, ya vamos por ti- canturreó la voz de un hombre mientras se escuchaban risas de fondo.
- ¿De que hablan?- preguntó desesperada.
- Ya empezó muchachos- anunció una voz femenina- es mejor que corras si aprecias tu vida muñeca.
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Jord City
RandomLos Williams, una "familia perfecta"ante los ojos de la sociedad, esta adinerada familia decide mudarse a la pequeña ciudad de Jord City en busca de paz o eso era lo que el señor Williams decía. Lastimosamente sus planes son interrumpidos por una...