Jord City

Cap 27

Cap sin corregir🫡

- Ya vete Dylan- dijo Eros rodando los ojos con tono de súplica.

- No. Eres un mal amigo, ¿no ves que estoy triste?, quiero quedarme con ustedes, me siento solito, ¿Zoe me haces un pastel?.

Eros suspiró cansado.

- Vamos- suplicó- tu puedes dormir con Zoe y yo duermo en el sofá, prometo no molestar.

Eso no va a pasar.

- Ya estás molestando Dylan- aseguró- ¿Zoe te molesta que Dylan venga con nosotros?.

- Para nada, será divertido.

- ¡Genial!, ya escuchaste a la chica, vamos a tener una pijamada- anunció Dylan emocionado- ¿puedes pasar por el supermercado?, en verdad quiero ese pastel.

- Uno di questi giorni giuro che lo ucciderò (Un día de estos juro que lo mato)- susurró Eros entre dientes poniendo en marcha el auto.

- Sisi la tuya por si acaso- respondió el chico de atrás.

- ¿De que quieres el pastel Dylan?- pregunté amablemente, en un intento de que deje de molestar a Eros.

- Quiero que sea rosa, y quiero un corazón en medio que simbolice nuestra bonita amistad.

Yo solo asentí apretando mis labios para no reír, el también termino bebiendo de más.

- Llegamos, los espero aquí- anuncio Eros cuando estacionó el auto frente al supermercado.

Lo mire suplicante, pero solo me dedico una sonrisa inocente.

- Apúrate Zoe - me regaño Dylan bajando del auto.

Al entrar Dylan tomó un carrito.

- Bien, yo voy por el licor, tu vas por las cosas que necesitamos para el pastel.

Tome un carrito y fui por algo de mantequilla, huevos, leche, colorante rosa entre otras cosas, cuando me cruce con Dylan vi un carrito repleto de cosas innecesarias.

- ¿Por que quieres comparar un destapacaños?.

- Por si Eros no tiene uno, hay que ser considerados Zoe- me miró con desaprobación- ¿Ya tienes todo?.

Asentí.

- Bien, yo pago.

Salimos del lugar con seis bolsas en cada mano, no conocía este lado infantil en Dylan, era simpático pero en realidad agotador cuando bebía, subimos y Dylan se encargó de cargar las bolsas en la parte trasera del auto.

- ¿Ya podemos ir a casa?- preguntó el italiano.

Asentimos y luego de unos 20 minutos ya estábamos subiendo en el elevador, Eros vivía en un piso, al abrirse las puertas del elevador me quede con la boca abierta, colores negro, blanco y gris eran los dominantes, era un lugar enorme y moderno, del mismo tamaño que mi casa en realidad.

Los chicos se dirigieron a la cocina dejando las bolsas, la cocina era de mármol negro, muebles grises y todo perfectamente acomodado, olía a lavanda.

- Bien, ¿van a ayudarme?.

Dylan asintió emocionado y Eros negó rápidamente.

La última vez que hice un pastel sin quemarlo fue con Richard, amaba pasar horas con el horneando y riendo, el era como una verdadera figura paterna, aún así supongo que no conocí al verdadero Richard y agradezco no extrañarlo como antes, aunque su ausencia aún me afecte.

- Eros ya deja eso, yo quiero poner la harina.

- Yo la agarre primero, suelta Dylan.

- !No! - Dylan la estiró con fuerza haciendo que la bolsa se rompa y se desparrame por el suelo.