Mierda!
Y acá estoy, en la cafetería comiendo una hamburguesa con unos 6 chicos, además del idiota de "el Sr. Paez". Si, así es! Aún no me ha dicho su nombre. Pensar que hace al rededor de media hora salí de la dirección y además me perdí las clases de hoy
Da igual, al fin y al cabo no quería estudiar!
*flashback*
-la señorita Gonzales se disculpó?- pregunto el director, yo no conteste, solo mire al piso, como con vergüenza
-Si, no se preocupe, ella se disculpó y yo la perdone- dijo el idiota, en ese instante lo miré y sin darme cuenta me comencé a sonrojar
-Bien, entonces pueden retirarse. No olviden que deben limpiar el salón de clases, puesto que van a distintos salones deberán limpiar ambos!
-De acuerdo-dijimos ambos con un poco de frustración.
Luego de esa situación salimos de ahí, yo pensaba ir directo a limpiar, puesto que ya no había nadie en los salones, pero tal persona me hace acordar que debía ir a la cafetería con el y sus amigos.
-Bueno, ¿vamos preciosa?- dijo mientras me agarraba de la cintura
-No me toques la cintura y no me digas preciosa, no soy ninguna zorra, ¿de acuerdo?¿o querés que esta vez te rompa el ojo?- yo había dicho que no tenía un buen carácter
-Tranquila, quiero llegar completo a mi casa- la verdad tenía muchas ganas de golpearlo, hasta que me sangraran los nudillos!
*fin del flashback*
Estábamos camino a la cafetería, mientras el había ido a hablar con sus amigos, sobre que no se pasaran conmigo y esas cosas. Me pidió que le llevara su comida así les advertía con más tiempo, yo simplemente accedí. Cuando llegue a la mesa había un silencio tan silencioso que me dejaba aturdida, hasta que alguien por fin se dignó a romper ese silencio
-Hola... mi nombre es Martín-era alto rubio ojos verde intenso y parecía atleta-, el Ramiro- un chico cuyo pelo, ojos y piel eran oscuros (sin ser racista), el parecía hacer fútbol o algo parecido-, el es Alexis- este chico era parecido al anterior, solo que su piel era tan blanca como la nieve-, ella es Morena- ella era la única chica en el grupo, era tan linda... tenía un cuerpo perfecto, su pelo estaba teñido de negro azulado pero originalmente era rubio, los pude distinguir por las raíces, tenía ojos celestes, creo que usaba lentes de contacto, no importa, la hacía verse mejor de lo que ya se veía-, el idiota que te trajo se llama Ezequiel- ya lo había descrito cuando lo vi- y el es el novio de Morena, se llama Agustín- Dios... este chico si que era lindo, era un Dios griego, era castaño, sus ojos eran de un color azul profundo, que cualquier chica que lo viera se perdería en su mirada; y para rematar hacia baloncesto.
Dios, este chico es perfecto!
-Mucho gusto mi nombre es Lara-
-Tranquila chica, te conocemos como"la chica que le rompio la nariz a Eze"- dijo Morena, provocando que a todos nos causara gracia y comenzaramos a reír, todos menos el idiota de Ezequiel.
-Ey, eso no es gracioso, me dolió y mucho!- comenzamos a reírnos nuevamente.
Los chicos me habían caído bien, y al parecer yo a ellos, puesto que me invitaron a comer con ellos mañana. Morena me miraba raro algunas veces, pero fuera de eso me caía bien, era tierna, graciosa y linda. Su novio no habló mucho, pero el parecía distinto a los demás, como si a el le importarán los demás, eso es lo que necesitaba en mi vida, a un amigo así...
Tras pensar como psicópata me fui a limpiar el salón que estaba hecho un asco, estaba lleno de papeles los pupitres estaban... pegajosos! Cuando termine de limpiar me dirigí hacia la puerta, para por fin poder irme, pero ahí estaba el... Ezequiel, el idiota!
-Se te perdió algo?- pregunté en un tono sarcástico
-Tenemos que hablar.
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El intruso
Ficção AdolescenteEs una chica con un carácter fuerte que quiere dejar su terrible pasado atrás; ella también es una persona que no se enamora fácilmente, no es muy sociable y rara vez le cae bien a alguien, pero todo va a cambiar cuando alguien aparezca en su vida...