El intruso

#17

Acá estábamos Agustín, Ramiro, mi amiga y yo. Esperábamos que algún médico nos dijera algo.

-Tiene una costilla fracturada, la nariz rota, a su labio y sus ojos en poco tiempo se van a comenzar a desinflamar. ¿Tienen contacto con su familia? -hablo el doctor que lo estaba atendiendo.

-Si, en un momento los llamo- termino de decir Ramiro y se fue afuera, creo que para llamar a su familia, mi amiga lo siguió, el doctor se fue a seguir atendiendo a otros pacientes; nos dijo que lo dejáramos un rato solo.

Estábamos Agustín y yo solos en la sala de espera, los chicos se fueron a buscar a los padres de Ezequiel. Agustín no paraba de llorar diciendo que era su culpa, que el estaba así por su culpa y cosas así. Yo lo abrazaba y le decía que no era su culpa, que todo pasa por algo. Estuvimos un largo rato así, hasta que salió una enfermera, se dirigió a nosotros y dijo:

-Señorita, ¿Usted es Lara?- Yo asenti, no tenía ni idea que me iba a decir- El chico quiere hablar con usted, dijo que si es a solas mejor.- termino de decir y se fue.

Estaba entrando a la habitación de Ezequiel, abrí la puerta, y ahí estaba el en la camilla, estaba todo lastimado, no podía tolerar la idea de verlo así, y peor... sabía que en parte era mi culpa, por aceptar.

-Te... tengo que decir la verdad...- comenzó a hablar apenas me vio entrar- Fui un idiota, te planté por ir a follar con Raquel. Perdón, se que no me vas a perdonar, pero...- no quería que siga hablando, me lastimaba cada palabra que decía, así que lo interrumpi.

-Te perdono, no vas a tener ni una sola posibilidad de estar conmigo, pero al menos... podemos volver a ser amigos. -le sonreí tiernamente.

-Si, gracias- susurró-. Te quiero, enana. -ay... ¡Que tierno!

-Yo también, ahora descansa, tu familia debe estar por lleg...- ni siquiera terminé la frase y la familia ya estaba ahí.

-Ay, amor, ¿Que te paso? ¿Quien te hizo eso? ¡Dime y lo mato! -dijo su madre haciendo que el se riera.

-Tranquila mamá, estoy bien, es algo que me merecía. -dijo Ezequiel y volteó para verme.

-¿Ella es tu novia?- pregunto su... ¡UN SEGUNDO! El chico era muy parecido a él, arriesgaría lo que sea, apuesto a que son gemelos o mellizos. -. Un gusto, mi nombre es Thomas, soy el mellizo de este idiota. -me entendió su mano.

-Hola, no, yo no soy la novia de el, solo somos amigos. Ah, y el gusto es mío. -lo sabía, arriesgué todo y gané. La mamá de estos no dejaba de mirarme mal, ¿Señora, que le pasa conmigo?

-¿Nos podes dejar hablar con nuestro niñito? -pregunto la mamá, yo solo asenti y salí de ahí.

..........

Me encontraba en mi cuarto, estaba pensado en todo lo que había pasado hoy, estaba un poco impactada, ¿Por que le caigo mal a la señora? Ni idea, mejor me duermo.

Narra Ezequiel:

Mi madre le hablo tan mal a Lara, espero que ninguna de ellas esté enojada. Por cierto, todavía me encontraba en el hospital, dijeron que tenía que estar una noche acá y que mañana podría volver a mi casa, pero que a la escuela no volvería hasta dentro de 2 semanas. En parte me gusta la idea de no ir a la escuela, pero por otro lado, quería ver a Lara, ella habrá creído que no la vi, pero cuando me acomodaron en la camilla, pude ver como sus ojos sudaban.

Los ojos no sudan, estaba llorando, que idiota eres.

Si, puede ser.

Sentía mucho dolor en algunas partes de mi rostro, y también en mis costillas, pero tenía mi celular, así que decidí llamar a Camila, quería saber cómo estaba Lara, pero el orgullo ante todo.

-¿Hola? ¿Te permitieron usar el teléfono? ¿Como estás? ¿Te sentís mejor?

-Hola Cam, estoy bien, me dejaron usar el celular y... ¿Que más preguntaste? -bromee

-Ya idiota! ¿Para que llamaste? Si quieres saber cómo esta mi amiga, pues... ella se siente algo culpable, y también dijo que mañana te iba a ver. - esta chica sabe leer la mente-. ¡C, YA NO GRITES! -se escucho a Lara gritando a su amiga para que se calle.

-Llamo mañana, decile a Lara que no es su culpa, y también que mañana me voy a mi casa. Ahora si, te dejo, bye y ¡suerte con Ramiro!

-Espera, ¡Hijo de...-  bip. Corte la llamada.