Over Again I y II. [TERMINADA]

Capítulo 27.

Erick's POV

Desde que nos encontramos en el supermercado no he sabido de ella porque me di cuenta que me bloqueó de todas las redes sociales que pueden existir. No podía marcarle, ni enviarle mensajes y la verdad es que no me daba la cara para seguirla buscando después de lo que pasó.

El bebé ya tiene 3 meses, es un niño grande y chinito. La Stefi vive aquí pero no somos nada, me lo ha vuelto  a preguntar en repetidas ocasiones pero siempre le desvío el tema porque la verdad me da algo de pesar decirle que no, no quiero discutir.

—Ya viene tu cumpleaños, ¿quieres que organice algo para ti?—Me preguntó mientras acomodaba al bebé en su cuna.

—La verdad no, ósea mi mamá vendrá con mis hermanos y algunos amigos y haremos algo tranquilo. No quiero tanto ruido por el bebé.

—No me habías dicho—Frunció el ceño.

—No lo creí necesario—Me encogí de hombros—llegarán en unos días. Ya yo me voy, cualquier cosa me mandas un mensaje.

Tomé mi bolso y me fui al entrenamiento. Mi cumpleaños sería en 3 días y tenía partido el mismo día pero al menos mi familia estaría aquí conmigo, después de todo ellos son mi cábala y de seguro ganamos ese partido.

—Hey Loco, ¿harás una fiesta?—Me preguntó el Pol cuando nos encaminábamos a la grada por una botella. Yo negué—¿como que no?, anímate que yo la organizo.

—No gracias, ¿sabes que todo lo que me ha pasado partió por tus fiestas verdad?—Miró el piso avergonzado—ya he tenido bastante.

—Lo siento Loco, de haber sabido yo no hubiese insistido en esas fiestas.

—Ya da igual, ya las cagaste—Reí sin ganas.

—Erick, te toca lanzar—Me llamó el PF.

—Voy míster—Tomé el último sorbo de agua.

—¿Como va ese bebé?—Preguntó Pezzella acercándose.

—Bien, creciendo. Es bastante tranquilo y duerme toda la noche así que no me quejo.

Me fui a lanzar penales y tiros libres, pero en especial me enfoqué en los primeros. Hace unos partidos erré un penal que menos mal no acabó por hundirnos porque ganamos pero lo tomé como una llamada de alerta a que debo seguir perfeccionándome. 

[...]

—¡Feliz Cumpleaños!—Gritó mi mamá cuando entré en la casa.

—Felicidades por ese triunfo, perrito—Saludó mi hermano.

—Son mi cábala—Abracé a mi mamá—¿ya vieron al Álex?.

—Sí, la Pao está con él en brazos—La llamó mi mamá y apareció con el bebé en brazos—¿no es igual al papá?.

—Pero mamá si se parece a mi—Reclamó el Cristo.

—Es igual a ti, campeón—Mi hermana me entregó a mi hijo—¿ves que tiene los mismos ojitos chinos que tú?.

—Hermanito—Habló mi hermana la Sherry—¿crees que podamos celebrar aunque sea un poquito?.

—Yo creo que sí, solo no quiero tanto ruido.

—Erick tranquilo que el Álex tiene el sueño pesado igual que tú—Rió la Stefi.

—Prometo que no haré tanto ruido. Jeans ayúdame con el proyector—Lo tomó del brazo.

—¿Para que trajiste un proyector?.

—¿Para que crees tú?—Me rodó los ojos—ya cállate y déjame trabajar.